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Año América Central. República de Costa Rica.
Núm. 96.
Diario de Costa Rica AN EDITOR PROPIETARIO, Joaquín Calvo.
AGENTES GENERALES DE ANUNCIOS, Laján y Niata.
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Número suelto. 010 San José, viernes de mayo de 1885.
CALENDARIO. de Centre) América. pesar de perar auxiliares ni aliados. Con ro a todos podemos contestar MAYO DE 1885.
nuestro sostenido principio de tinuamos nuestra marcha vence triunfantes. Si la pericia, si la ESTE MES TIENE 31 DIAS. neutralidad, las muy diversas dora, y el de abril éramos due previsión inteligencia militar cuanto graves circunstancias que nos de los puertos de San Juan pudieron escasear en un ejército Vier. SANTOS FELIPE SANTIAGO EL aparecían, los peligros que to del Sur y la Virgen y la impor improvisado, bisoño, jamás acosMENOR, APÓSTOLES, Segismun dos amenazaban, bicieron que la tante ciudad de Rivas. La llave tumbrado a las penalidades y di.
do tovy Jeremijas profeta.
Sab. Santos Simplicio, Ambrosio, whesein voz pública se pronunciase desde del tráusito entre el Pacífico y el fícil arte de la guerra, sólo commrs. y Anastasio, ob fines del pasado año por empren: Atlántico estaba en nuestro po prensible en dilatadas campañas der la guerra contra la falange der al ines de salir de esta capi y sangrientos campos de batalla, aventurera que crecía con rapidez tal. El camino real del filibuste sobró el depuedo, el sufrimiento, DIARIO DE COSTA RICA en número y poder en el centro ro estaba cortado. El 11 de abril la abnegación y el valor hasta el de nuestros Estados esparciendo Walker con su ejército nos ataca heroismo. Donde estaban las la alarına por do quiera; por re en Rivas. La victoria puesta en profundas tácticas, los capitanes CAMPANA NACIONAL. Jimin dimir Nicaragua esclavizada por sus manos por el acaso instantá eminentes. En qué belicosas Fragmento del Mensaje del Pre ella; y poner cubierto de un neamente, es reconquistada por empresas habían estudiado nuessidente de la República al Congre golpe alevoso la existencia y so nuestros bravos con un valor in tros compratriciós la ciencia y el. de 1856. ciego de nuestra codiciada nacio superable, obligándole huir al genio de la guerra Que más nalidad, amanecer del día 12 con los res puede exigirse a jefes y soldados HONORABLES REPRESENTANTES.
Convencido de los riesgos que tos de su despedazada bueste, en improvisados, que el sacrificio geGrato era el cuadro que en su nos cercaban, de acuerdo con los medio de las tinieblas, la mortan neroso de su tranquilidad, de sus modesta infancia presentaba Cos Gobiernos de Guatemala, San Sal dad y el espanto.
intereses, de sus goces domésticos ta Rica al terminar el año de vador y Honduras, apoyado por La necesidad de curar nues y de su propia existencia. i, 1855 Concordia y amistad con la unánime opinión nacional, ostros heridos y de esperar los re yo que participé siempre de sus los países hermanos y extranjeros: Hamé el 25 de febrero para ha fuerzos pedidos, para po abando calamidades y alegrias, de sus Orden, paz y prosperidad en el ceros presente nuestra situación nar la muy importante línea del privaciones y entusiasmo, enorinterior. Garantías para todos, frente a frente de los aventureros tráfico interocéanico, me obligó gullezco al hablar de ese ejército la población duplicándose, la ins que subyugaban el vecino Estado detener nuestra marela victoreo ante la Representación Nacional.
trucción difundiéndose, las leyes retándonos con audacia. Pene sa permaneciendo en Rivas hasta Ese ejército de labradores y artecodificándose ilustradamente, el trado de mis propias conviccio fines de abril en que apareciendo sanos, ese ejército de pacíficos comercio acrecentado, la agricul nes me concedistéis àmplias facul súbitamente el cólera en las filas y honrados propietarios, ha contura obteniendo de día en día tades para hacerles la guerra. La costarricenses derradio en ellas el quistado en esa guerra santa conmayores beneficios, las ciudades juventud valiente y decidida aeu contagio y la muerte. Nada sa tra los usurpadores de la América engrandeciéndose, allanándose los dió presurosa mi Vamamiento bíamos de las fuerzas aliadas. Te Central una palma imperecedera.
caminos, las obras y las ventas alistarse bajo las banderas de la merario hubiera sido avanzai ni Ei ha dado un ejemplo y una públicas aumentando, y por to Patria. Todo entonces fué júbi permanecer en aquella infestada lección a nuestros amigos y adver.
das partes: el pueblo avanzando io, entusiasño, celebridad y pa ciudad, desprovista de recursos, sarios, y sin ese ejemplo unánicon pasó mesurado, pero firme, al triotismo. Era la vez primera que, al empezar el infermiso y lluvio memente aplaudido, sin esos reprogreso y bienestar general. en Centro América se emprendía sn invierno. Fué forzoso retro: petidos triunfos, ni un sólo tiro El espíritu laborioso de los cos una guerra que la razón y la hu ceder, aplazando el dar fin la se hubiera disparado aún en detarricenses, su respeto al orden, manidad no condenaban Así en cainpaña, pero dejando bien es fensa de los escarnecidos deresu amor a la propiedad, y el acuer el interior como en el exterior es carmentados y larga distan chos centro americanos. Nicarado constante de la nación con el ta decisión fué aplaudida con al cia a nuestros aterrorizados ene gua no estaría en armas como loy Gobierno produeían tan bpimos borózo. Marchamos. El enemi migos, humillada su bárbára so llo está ya contra sus opresores frutos, cuando exteriores aconte go, tiempo hacía resuelto, com berbia, animados y agradecidos dándose un. abrazo, fraternal dos cimientos, funestos al parecer pa batirnos, cegado por su soberbia a los leales nicaragüenses, y. sal partidos que parecían irreconcira la América Central, tal vez y el incomprensible despreciovo el honor nacional. liables, las fuerzas de los Estapropicios en los incompreusibles con que nos miraba, invadió nues. En este infausto regreso hubo dos permanecerían aún en sus ho misterios de las evoluciones hu tro territorio en él sé derramó la pérdidas dolorošas, víctimas ilus gares, y más, tarde ellos y nosoi manas, vinieron a interrumpir esa primera sangre, y en Santa Rosa tres que nos arrebató el cólera al tros, todos, todos lloraríamos el.
marcha pacífica y feliz conquistaron nuestras armas los traves de solitarios caminos, tán infausti) error de haber yacido en.
Harto conocidos son los muy primeros laurėles poniendo a los ásperos como faltos de toda espe una cobarde o estúpida indolen escandalosos, sucesos de Nicara filibusteros en desastrosisima fuga. cie de auxilios. cia.
gua que pusieron en vigilante es Provocados, invadidos triunfán. Graves cargos se nos han he Honorables Representantes, pectativa a todos los buenos hijos tes no era honroso ni posible es cho por nuestros adversarios, pe pueblo costarricense. loor eterno Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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