DIARIO DE COSTA RICA leyes celestiales parece hoy co El espíritu progresivo no emmo sol que ilumina con sus rayos prende nada sin contemplar en el y fecunda con su calor suave lo cielo azul y sereno de la verdnd que es honradez del sentimiento aquella estrella de oriente que in y purcza de la acción; sol que en dica el rumbo que debe seguirse momentos supremos derrite las para llegar a la cuna humilde de cadenas y destruye las coronas. todas las humanas redenciones.
Errantes los suspircs, las alas temblorosas, En su incesante vuelo plegaron con afán; Los labios palpitantes buscaron otros labios, luego tanta pena siguió la soledad.
Descoge la mañana su crencha luminosa, Llenando con sus rayos el firmamento azul; máyades y ondinas acuden a mirarse De las parleras fuentes en el rizado tal.
En alas de otro afecto, soñando nuevas dichas, De mirtos coronada la alabastrina sien, Recuerdos de otros dias no cruzan por su frente hacia el altar avanza con dulca timidez.
La desposada es Ella. mas ay! entre su pecho La ausencia nuevas flores vivificando está, en caprichoxos giros se ven las ilusiones Vagar tras las cortinas del tálamo nupcial.
Inmenso es el abismo. mi amor un imposible.
Eterna despedida quisiera darle yo.
Está dormida y sueña. mi nonbre ha pronunciado.
Su sueño no interrumpas. Silencio, corazón. ROSALIA, INVOCACIÓN Encanto de mis ojos, fanal de mi ventura, Estrella refulgente del cielo tropical, Ostenta en torno inío tu disfana blancura, Alumbre tu sendero tu luz matutinal. Alondra cuyos tiernos, armónicos enntares Preludinn en sus notas la dicha celestial, Tus bosques abandona, desecha tus palmares, cuelga en mis jardines tu rústico nidal. Arroyo cristalino de plácida corriente, Que avanzas por un lecho de gualdas y coral, Las flores de mi vida Refresca con tus aguas: bañe con dulzura Mi calurosa frente De tus serenas ondas El límpido ra udal. en las amargas noches de duelo y agovit, En que mis ojos brotan de llanto un manantial, Encapto de mi vida, difunde tu alegría; Alondra, suelta al aire torres de armonía; Estrella de mis ueches, enciende tu fanal. MUERTA.
Enlutan los crespones el fúnebre aposento; Los cirios vacilantes infunden triste luz; al pie del crucifijo que anima y que conguela Descansa mi adorada, cual si durmiera aún.
Oscura está la noche, desierta la campiña; Tristeza y amargura se sienten por doquier; inclinan la corola las perfumadas flores Que ndornan de su tumba la agreste sencillez.
Creced con mit caricias oh! flores delicadas, En vuestro cáliz puro mis lágrimas guardad; en torno del sepulcro que encierra sus despojos, Henchid el claro ambiente de aroma virginal!
IDILIO.
Así cuando la tarde plegaba lentamente El monto vaporoso, teñido en rósea luz, Le dije con acento sensible de ternura, Clavando mis miradas en su pupila azul. llena de ilusiones, unidas nuestras almas, Miramos la esperanza vagar en derredor, Forjámos castos goces, juntámos nuestros labios, un beso pudoroso con timidez vibró.
La luna en el espacio mostraba temerosa De estrellas circundada la pudibunda faz; En tanto que en las brumas oscuras de la noche Borraba sus contornos la luz crepuscular.
Aromas delicadas, peremnes melodias, Suspiros de las brisas, columpios de la flor, Encantador idilio de los primeros años, Guardad de esos recuerdos la grata vibración.
Dejó el mollido lecho SOLEDAD Encanto de mis ojos, fanal de mi ventura, Estrella refulgente del cielo tropical, No ostentas ya mi lado tu diáfana blancura, Ni alumbra mi sendero tu luz matutinal.
Alondra, de tus tiernos, armónicos cantares Las notas no prelndian la dicha celestial; Soñando nuevos huertos y bosques y palmares, De mi vergel huiste buscando otro nidal.
Arollo cristalino, tu plácida corriente Dejó el mallido lecho de gualdas y coral; Las flores de mi vida No riegan ya tus aguas; Ni con igual dulzura Frescor prestó mi frente, De tus serenas ondas El límpido raudal. en las amargas noches do duelo y agonía, as noches de duelo y agonía, En que mis ojos brotan de llanto un manantial.
Encanto de mi vida, no encuentro tu alegría; Alondra, no me brindas torrentes de armonia; Estrella de rois noches, no enciendes tu fanal!
ALIRIO D:AZ GUERRA. Colombiano. ello LA CARTA. De nuestra amarga ausencia la copa emponzonada Mis tiernas ilusiones envenenando vá: En lo intimo del alma tu nombre llevo eserito, en medio tanta pena, te quiero mucho más. Jamás podre olvidarte, jamás de moi memoria Los plácidos recuerdos de amor apartaré, Tu amor será la historia que, luminosa siempre, Alumbre de mis noches la densa lobreguez.
Si otra mujer más bella mo roba tu cariño, frases amorosas aprende para ti, dejas en sus lábios el néctar de tus besos, Quizás serb dichosa mirándote feliz. No puedes olvidarme; tu amor me da la vida; Soy tuya, tú lo sabes. Te adoro. Adios. adios!. Sus lágrimas borraron las cifras de su nombre, Que aún guarda con cariño mi amante corazón.
de operaciones acertadas, la canBOLETIN tidad de agua caliente del hervidero. El Empresario Sr. Crespi asegura que puede obtener 80 gaEl industrioso y perseverante one lones por minuto, lo cual es una joven don Carlos Volio Tinoco, buena cantidxd.
empresario de la fábrica de acei Para el edificio hay listos ya tes, ha regresado de su viaje a los 30. 000 ladrillos y una buena canEE. UU. Lo saludamos deseun tidad de madera de construcción, dole feliz éxito en su empresa.
Confusion y grande es la Baños Termales. Los de que se nota en las reproducciones La Agua Caliente, Cartago, han publicadas ayer referentes al principindo construirse en estos nombramiento de don Ricardo dins. Se ha aumentado por medio Villafranca. Lo que se dice de DEL OLVIDO.
Las flores doblegaron las púdicas corolas; Las brisas acallaron su lánguido rumor; Las sombras del olvido borraron lentamente Del cielo de mis dichas el último arrebol.
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