DIARIO DE COSTA RICA.
Lejos de nosotros la idea de Prestnd atención, señorita, di Quién es el caballero que bido alguna noticia faasta. Si os que se emprendan nuevas luchas; jo Edwards: hoy estan los caba acaba de saludarnos!
así, lo felicitamos lo que deseamos es que se reali llos muy en vilo. Apenas he tenido tiempo de cen positivas reformas. No tengais miedo, respondió verlo, pero me parece que le co De Heredia nos informen que Lejos de nosotros la idea de Betina, los conozco.
nozco.
debido falta de competencia, que se prescinda del elogio sensa La señorita Percival tenía la Le conoceis?
sin duda, en la única panadería to; lo que deseamos es que no se vez mano muy firme y muy lije. Sí, y me parece haberle vis quo actualmente hay en aquella apele a la adulación cortesana. ra. Centuvo los poneys por unos ta este invierno en casa.
ciudad, el pan que se vende es El señor Redactor de La Re instantes, obligándolos guardar. Dios mio! Será uno de los bastante malo.
pública es un partidario conven su puesto en la fila; después, ec treinta y cuatro? Volverá princido. Por lo mismo reconocerá, volviendo los dos caballos delan cipiar. Cuentase que al principio si medita con calma, que muchos teros en una doble y larga ondude la administración del Gral.
VI.
de los que hoy hacen mayores es lación del látigo, arrancó el tiro Barrios en Guatemala, fué persefuerzos para probar su euemistad de un golpe, con talento incomA las siete y media de la no guido el señor Casanova por haA las contra el doctor Zaldívar fueron parable, y salió magistralmente che de ese mismo día fué Juan al ber dicho algo en contra de una un tiempo los que más elogiaron del patio de la estación, en medio presbiterio buscar al Cura y disposición de aquel tirano relasu talento, su energia su herois de prolongado murmullo 10 de los dos tomaron el camino del cionada con La Escuela de Cristo.
des dos mo, su prestigio y hasta su belle asombre y admiración.
Castillo Casanova hasta entoces, seza. En cuanto nosotros, re El paso de los cuatro caballos Hacía un mes que un verdade gún parece, no habia pensado en nunciamos a la tarea ingrata de sonaba sobre el empedrado de de ro ejército de obreros se había ordenarse; pero Barrios para ricitar nombres propios.
Souvigny. Bettiva hasta la salida da apoderado de Longueval; las fon diculizarlo hizo que lo pasearan Nuestro colega nos aconseja de la ciudad les hizo llevar un a ar un das y tabernas de la aldea tuvie. varias veces por la calle con 80que dirijamos lecciones de mo porte contenido; pero desde quero queron su agosto. Inmensos carros de tana y demás distintivos de los ralidad política otro país donde vió delante do sí dos kilómetros traste trasteo llevaron de París carga sacerdotes.
los vicios que censuramos sean de camino ancho, sin subidas ni mentos de muebles y tapicerías. Pasaron aquellos dias. Casanoevidentes.
descensos, dejó que los caballos Cuaren allos Cuarenta y ocho horas antes de va se encerró y poco se dedicó Ha querido decirnos, sin duda, tomaran progresivamente su an la llegada de la señora Scott, se estudiar Teologia y resolvió orque Colombia está en poder de dar. y teuian un andar de los intendieron al castillo os introdujeron al castillo la sefiori denarse.
un tirano que ha destrozado prin infiernos, ta Marbeau, directora del correo, Pronto ese mismo señor Casacipios de la honradez y leyes del Oh! cuán feliz soy, Suzie, y la señora Lormier, alcaldesa; la nova será consagrado Arzobispo liberalismo, exclamó ella.
relación de lo que ellas vieron, de Guatemala.
Nosotros podríamos contestar. Varos galopar y trotar las volvía locos todos. Los anti Prueba esto, lector querido, le que hemos trabajado y que dos solas por ese camino.
guos muebles habían desapareci que de la suerte y la muerte nahemos luchado contra ess tiranía; Quereis arrerdar vos, Suzie! Se do, relegados a las bobardillas; die escapa.
y que si hoy vivimos en estran. siente placer cuando puede perlando puede per pasea base en medio de un verdajero suelo, en una tierra donde no mitirse los poneys caminar así. dero bacinamiento de mara villes. El baile dado anoche en el tenemos sico lo que nos brinda Caminan tanto y están tan edu y las caballerizasl y las cocheras Hotel de Italia, estuvo muy bueuna hospitalidad generosa; si esta cados! Tomad, tened las riendas.
as.
In tren seneci Un tren especial llevó de Pa no.
mos separados de aquellos seres No, retenedlas; me divierte is baie la alta vigilancia da teris, bajo la alta vigilancia de Ed. Reinó la más plausible armo idolatrados con quienes nos ligan veros gozar.
wards, una deceda de coches, y nía y predominó hasta el fin ese Oh! en cuanto a gozar, yo go. qué coches! una veintena de ca exquisito acto social que tanto hemos cumplido el deber que nos zo! Me gusta tanto arrendar cua ballos, y qué caballos!
contribuye al buen éxito de todas imponian nuestras ideas puras, tro, con espacio para correr. El abate Constantino creía co las reuniones semejantes. De las nuestros propósitog honrados y En Paris, ni aun en la mañatia menacer lo que ara al Ini Comía otras Provincias no vinieron todas nuestro evidente patriotismo. atrevia. me miraban mucho. una vez por año a la mesa da an las. una vez por año, a la mesa de su las señoras y señoritas invitadas.
y eso me disgustaba. aqui. obispo, Monseñor Foubert, prela La música fué del gusto de tonadiel. nadie. nadie! do amable y rico, cuyas recepcio dos.
EL ABATE CONSTANTINO. En el instante en que Bettina, nes erar bastante espléndidas. El La cena se sirvió como era de ya ébria de aire puro y de liber Cura había creido, hasta enton esperarse.
LUDOVICO HALÉVY.
tad, arrojaba triunfalmente esos ces, que no podía haber en ell Nos alegramos del buen éxito tres: Nadie! Dadie! Dadie. mosTraducido expresamente de la 66.
mundo nada más suntuoso que el del baile, y felicitamos al Sr. Dn.
tróse ginete caminando, al panel edición, para el Diario de Costaso, al encuentro del coche.
Rica.
que los castillos de Lavardens y dos por su acierto en todo.
Era Pablo de Lavardens. Ha(Continúa. de Longueval. Comenzaba cía una hora que espiaba allí pn. darsa pil darse cuenta, por lo que oía decir ra tener el placer de ver pasar de los nuevos esplendores de Hecha gu revista, Bettina, sin las americanas.
REMITIDOS.
apresurarse mucho, quitóse los Os equivocais, dijo Suzie Longueva. que el lujo de las largos guantes de piel de Suecia Bettina, hé ahí alguien, grandes camas de hoy dia sobre y los reemplazó por guantes Un provinciano No hago puja extremadamente el lujo, serio y severo, de la antiguas casas gruesos de gamo tomados de la caso de ellos; esos no pretenden San Jose, diciembre 14 de 1885.
respectiva bolsa en el coche. mi mano.
de otros tiempos.
En dias pasados, estuvo de vista, en Después ocupó el pescante en lu. Ese no es un provinciano. última instancia, un asunto do bastangar de Edwards, recibiendo de Miradlo.
te importancia, contendiendo en él éste las riendas y el látigo con Pablo de Lavardens, al pasar partes demandantes y partes demanextrema destreza y sin que los al lado del coche, hizo las dos BOLETIN dadas.
caballos, muy excitados, hubiesen hermanas un saludo perfectamenCon reserva de especificarse próxitenido tiempo de percibir el cam te correcto, que lo daba conoma y circunstanciadamente, según mebio de manos. La Señora Scott cer por parisiense.
jor haya lugar, ciertos hechos relativos ese asunto, sugierense, de pronocupó un puesto al lado de su Los caballos iban tan aprisa El pabellón español ha estado o to, su respecto, algunas observaciohermana. Los caballos pateaban, que el oncuentro tuvo la rapidez izado durante todo el dia en el pes preliminares.
bailaban y amenazaban encabri de un relámpago. Bettina excla consulado respectivo. Supone. Trátase en dicho asunto de determitarse.
mó: mos que el Sr. Cónsul habrá reci nar si se han cumplido nó varias POR Costetus: araba Topu Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica