Guardar

DIARIO DE COSTA RICA MM iembre de 1921. artes 15 de noviem e a PAGINA CUATRO EL EP Ayer fue pressitado al Congreso el projecto de contrato colebrado ul referendun entre la Secretaría de Hacleadá yA Royal Bank of Canada, y la Comisión de Hacienda de la Cámara tiene en su poder ese importante nezocio, acerca del cual ha de rendir informe a promcipios de la Dróxima semana.
Se trata de. un dellcadisimo asunto de Estado: la contratación de un empréstito, y es deber de todos los cludadanos prestar atención al negocio, y están obiigados aquéllos que al30 entienden en materia de finanzas, a exponer sus puntos de vista, a fin de que la opinión pública? pueda orientarse y 58 llegue a una acertada solución del asunto.
Nosotros nos proponemos hacer algunas oObservacionez al proyecto, más que con. espíritu de lucha, con el desto de Sivulgación amplia de las condiciones de ez contratación, que algunos considaran ta panacea que ha de curar toloz ny males. En las discusiones de este negocio debz predominar la serenidad más absoluta, ya. que se ventilan Jos intereses del país y no hay derecho para que pasiones políticas puedan torcer las deliberaciones de la Cámara, pues una desacertada nésolución «e Un asunto de esa especie acarrea malos resultados que pesarán sobre el país, delando muy tranquilos a quienes hicleren pesar en la balanza odios o amistades sonales. Porque al hablar de pasiones. remrobamos lo mismo a quienes procedan por enemistades personales o políticas, ques a quienes funden su decisión exclusivamente en su adhesión a los hombres de Gobierno. El único interés kotizable en este torneo la conveniencia nacional y debe hacerse abstracción de cualquier otro, deíde el mezquino interés personal hasta el espirilu de bandería, qué obstaculiza las resoJluciones patrióticas.
Por nuestra parte, creemos inútil manffestar que estamos por completo ajenos a odo prejuicio en esta materia y que 12 trataremos con da serenidad que ella reclama y con la claridad que precisa paTa que el público. todo se dé perfecta cuenta de los aspectos de la contratación.
Aparle de coxsideraciones generales que el proyecto nos sugiere, conviene al plan de nuestro estudio, que consideremos se paradamente algunos de sus artículos im portantes, procurando escudriñar su clara significación y sus alcances; de la reunión de observaciones podremos después sarar conclusiones generales idversas o favorables al contrato. Comencemos por el articulo primero. que contemple el asunto del famoso millón. de las sábanas, y que a nuestro entender es el más escabroso de los artículos del contrato. Dice asi. Las sumas que el Gobierno resulte. deber a la Sucursal del Banco en ésta eludad como sobregiro de su cuenta en virtud de haber sido declarados nulos los billetes del Banco Internacional de Costa Rica de la emisión a que se refiere la Ley de 28 de junio de 1919 y Acuerdo Ejecutivo ae 10 de julio del mismo año, serán liquidadas y pagadas desde luego: con interezes de seis por ciento anual desde la fecha de los respectivos giros. La liquidación y pa e aquí estipulados pondrán fin a toda reclamación de parte del Banco contra el Gobierno o contra el Banco Internacional!
de Costa Rica por el motivo indicado.
La redacción de ese artículo, que figura de primero quizás porque «onstituye el je del negocio. nos revela entre otras 0525, UNa sagacidad muy fina del abogade de la fnstitución bancaria que interviene en la óperación.
Bien saben nuestros lectores que al rededor de ese asunto de los billetes sábanas se han agitado multitud de opiniones en ontradás; pero que entre todas ellas ha predominado la de que es menos aiscutible la validez de los mismos billetes ante la legitimidad de la operación verificada ton ellos.
Cuando ese asunto estuvo ea el tapete, ruando se discutió el aleanco de la ley de nulidades con respecto al reclamo británico, que abarcaba los dos negocios: Amoy y Boy2l1 Bank, nosotros decididamente combatíamos el primier asunto que considerábamos nulo de toda nulidad por les elircunstancias;en que se llevó a cabo y por la falta de personería legal de Quienes otorgaron la concesión petrolera, verdaderamente onerosa para el país, hasta el extremo de poderla calificar de despojo mapiñesto.
En exmbia pasíbamos como sobre brases al tratar de los billetes del RoyaL Elo requiere una explicación. Nuestra opinión de entonces, como l2 de ahora, era adversa a es nulidad de cretada a nuestro entender jorrefexivamente. Pero sostener entonces es8 tests nos parecia antipatriótico, ya que era dar armas 21 enemigo, y na queríamos en eso segulr ejemplos lamentables.
Alas boy ha llegado el esso de presen peligro de que s2 llegue a una CODtratiió» que prive al pals de un a recho ma nifieato contra una Banco que ba de rendtr cuentas de trasgresiones al Código Fiscal, que trajeron como consecuencia la evaporación de unos cuantos millones del Tesoro Público.
Vamos a cuentas. Declamos y decimos que la validez de esos biilstes no debía haber sido puesta ex tela de juicio, a rizor de justicia. nos induce a tener esa idea el hecho de a lo defentos de forma pueden alezara en contra de esos billetes, defectos de que también adolscen otros cuya vatdez no ha puesto en duda. De mantra que puede parecer usa tínteriliada 2cogarse a delastos de los que, después de todo, no es responsable la parte que recibió los. billeres, síno que debz carzgarst en cuenta al Banon. que los emitió.
No cresmos preciso mucho argumentar acerca de este asunto, pues creemos qua astá en el ánimo de rodos, por lo menos la duda de si la nulidad decretada para es03 billetes fue acertada.
Pero si está en la conciencia de todos que no es posible dejar tranquilamente que los dineros del Estado hayan podiao esfumarse en la forma que se esfumaron. el instinto nos dice que es preciso que existan leyes que porgan a salvo al pais de esa y parecidas exacelones. vaya sí las hay!
El público conocz opiniones de jurisconsultos que abiertamente sostienen los derechos del Estado contra el Banco que, al prestars. faltando a la ley, a realizas tobros y pagos en ablerta contradicción con las claras estipulaciones del Código Fiscal,. se hizo responsable ante el Fisco, de las consecuenciós de esas infracetones.
Acerca dé ese aspocto de la cuestión se publicó. luminoso informe de don Ricardo Jiménez, én que se sostiene esa responsabilidad del Banco. No ez preciso, para el efecto que hoy nos própon mos, extendernos en demostraciones o citas de códizos. Nos basta con establecer que tizne. ese asunto del Royal Bank dos aspectos dignos de estudio, En cuanto a los billetes, En cuanto a la operación. nuestro propósito, además de deslindar ambos aspectos, es el de manifestarnos más partidarios de discutir el negocio desde el punto úe vista de la operación, yz que no no3 iparec? discutible la validez de los billet. Pues bien, el artículo primero del conirato de empréstito, da por buena la opsración y se axoge a la nulidad decretada para los billetes. No podemos estar de acuerdo con esa solución que resuita perjudicial para los intereses del Fisco. No queremos asegurar que lá discusión Judicial de ese negocio pueda ser o no favorable para el Estado, pero sí tenemos el deber de pretender que los derechos del país se ventílea, ampliamente y que paguemos si hemos de pagar, pero que no Ros encreguemos atados de ples y manos a los contrarios, Y ese. contrato en su artículo primero viene a poner fuera de toda discusión las relaciones ¿sl Royal Bank con la Secretaria de Hacienda de la primera mitad de 1919. Eso no nos parece acertado. El Royal tiene el derecho irrecusable de exigir al Banco Internacional el pago de documentos respaldados por esa institución: el Fisco, en cambio, tiene el derecho, no menos indiscutible, de investigar si todas las operaciones fiscales sé lievaroz a cabo de acuerdo con las leyes vigentes, y en caso de infracciones, exigir las reparaciones del caso, El artículo que reproducimos aleja de la discusión los indiscutibles derechos del país, al que se pone tranquilamente ante la única perspectiva: pagar. pagar sim discutir. Si el Royal quisiese que ante cualquier tribunal se ventilase ese négocio del milión de colones, desde el punto de vista de la legalidad de los tratos que llevó a cado con la Secretaría de Hacienda, entonces creeríamos en que no es un mita la justicia. Entre tanto, mientras al país se nlega el derecho de defensa, presentándosele en lontenanza los atributos de la fuerza como único argumento, es preciso poner muy en duda la segoridad de los débiles.
JUSTO Sé solicita el Teatro Nacional Compeñía de Operetas Españolas la Secretaría de Fomento s2 ha presentado una solicitud tendiente a que 5e3 cedión para el mes próximo el Teatro Naelonsi, quien se propone traer uns compe.
fía de operetas españolas, El frmante de een solicitud es don Moy tar las 00626 Como B0D, ya que exñta el. Noticia bibliográfica Dei libro Crónicas Amarzan que aeíba de pu rn San José don José Satilo Plcormell, tomamos la siguiente apreciación, que explica el alto móvil que tura Para editar ess obra el distiuzuldo putriota venezolazo. Libertad y Sinceridad Como el héroe de la crezción (bsenlana erremos que dos mejores puntdes de la »iiedad son la liberiad y la sinceridad, y sta argamaza está hecho el libro de Soeritos desnudos de narcisismo, dan su yerdadero valor e los hechos y llame por u nombre a las grotesoz; patriótico montonera tita: smo cívico, sale al llano y emplea un lenguaje desconocido en este tablado de simulaciones.
media sino ua poro de audacia, Entre e: general aue veadrá y 21 que hoy gobierzz no existen sino ligeras diferencias de tono. Qué gana, pues, la libertad con este cam bio de hombres sí la matriz sigue produciendo las mismas formas imperfectas?
Asf lo cree Sotillo Picornell y er eso dirige su lucha más 21á del ambiente. Ora contra la romería universitaria de Georgetown, abita de banquetes palacizgos; ora contra el revolucionario profesional que adivina en el triunfo de su causa. las humeantes mármitas ds las bodas de Camacho, ora contra ios bufones del verso que se reparten las migajas del cacique de Maracay.
Para los que tenemos poca fe ea la libertad escrita en las constituriones, para los que sentimos compasión por los pusblos cargados de derechos politicos mieztras se mueren de hambre; para los que ta democratización de un país empieza por los pisos limpios, las páredes blangueadas, las vidrieras brillantes, la camisa limpia, en fin, por todo eso que puede emular el acrecentamiento de la individualidad, un libro destinado a combatir a un solo hombre dentro de un sistema malézntr, tiene un valor muy limitado. Por eso este panfléto que refleja las inquietudes de un patriota a la manera antigua, se perfia komo una inicial en las luchas del poryenír, no contra el tirano, sino coñtra la podredumbns que lo produjo, JULIO PADILLA Plcosnell, Sino ridad. porque sUs e sAlrededor de pr EL INTERES DEL CONTRIBUYENTE es indispensable hacer Un empréstito usurario, si la situación del Erario evi vn remedio heroico, si no existe ptry Camíno por la premura del tizmp9 por Lo agudo de la crisis, que el socorsido de u abrir un hueco para tapar otro. por no recurrimos a los mismos que definitíva han de pagar el emprástito. Por no les damos a los direciamenble a 9s et ue hiñcados ena parte o la tovalidad de exagerados beneficios que prisode Banco prestamista, en acibio del oro Que necolltamos. tin En otros términos, ya que el empréstito durante cuatro o cineo año ¿por qué ño contratarios Los caletaleros expo: a éstos los benei Porque bay que tener en cuenta qué como el importe total del empréstizo será pasado con el impuesto que sati án los cafetaleros, estos pagarán él bensicio que en la operación obtenga el prestamista, y QUe cuanto mayor sea esa beneñcio mayor será la carga que soporten. Si no temiéramos escandalízar a los prácticos Jes diríamos que entre las reglas hacendarias figura una que quiere que todo Impuesto pese lo menos. posible sobre aquellos que lo han de tributar y por lo tanto debe procurarse que el monto total del impuesto, a ser posible, y cuando no la mayor parte de él, ingrese en las arcas nacionales. Ahora bien; la contratación con el Royal 2nk poca: contra esa norma de buen gobierno ya que uría parte considerable del «impuesto cafetalero no pasará al Erario siúo al Banco prestamista. Esa parte Considerable, pérdida para el Fisco, ya hemos visto que consistía en 1c3 utilidades que se reserva el Banco que son, a parte de la muy legítima del interés, la comisión y la indefendible gscondida en el cambio arbitrario que nos exigen. o. Es justo que se obligue a los cafetaleros contribuyentes a pagar doble contribución de la que el Estado recibe? Pero, se nos dirá, es que los exportadores, ho quieren o no pueden, adelantar el valor. de sus contribuciones, a lo que respondemos. Se les ha consultado para asentar una afirmación tan rotunda. No un em préstito 14, ja propio bacerio, ya que ellos van y ser los que pagan?
Admitimos que no todos pueden; pero su propio interés hará que todus quieran; pobre todo sl Una hábil combinación loz proporciona el Justo ulíciente que len dy termíne al adelauto requerido. para pro.
proporelenar ese aliciente nos dejan am.
plio margen las utilidades que Pentíbamo;s regalar al Royal Bank.
aquí. del ingento de nuestros gobernan.
tes para estudiar el más convenimte entry e loz mil rbitros que pueden ocurrirse, Pya. den emitirse bonos de exportación que de. rían vendidos eu mercado abierto y Cuyg precio sería tanto menor cuznto más lap, PE go fuese el plazo eu que hubleren de uti. zArse. Por ejemplo: todos los bonos cualquiera que fuera el año en que deban servir, sa.
ian de un valor zominal de 1. 50 por ql, pero los aplicables este año serían vendi a ese»precio; los aplicables 3Maño eotrante se venderían a 25 y los aplicables dentro de dos años se venderían a 1. 90 Muchos exporiadores adquiririan los bonos que necesitasen para utilizarlos en las propias cosechas y ¿asta pequeños rentistaz ahosrantes hallarán su interés en esta ip.
versión. Repetimos: hemos lanzado esta idea, eomo una de tantas, pero sin estudiar a fon.
do la cuestión. De modo que puede y debe ser reformada en cuanto al valor nomina de los bonos y a los descuentos que deban sufrir según el plazo. AN Nuestro intento ha sido el de significar: que la utilidad onerosa, no comercial, dada al prestamista puede, en último caso, darse a los contribuyentes sia perjuicio para la nación. Pero no es esto decir que hemos contemplado, ni mucho menos. todos log medios pará solucionar el conflicto, Alguien nos hablaba de una emisión gar rantizada por los. cafetaleros; pero este ar.
bitrio tendría el grave inconveniente de aumentar la cantidad circulante, no convertíble a vista, y eso haría forzosamente subir el cambio, por quy bien garantizados que estuviesen los nueyos billetes, ya. que no es garantía de conversión lo que se necesita sino efectividad de la misma, y ya que según: ley económica (perdonen Sres, prácticos) mil veces comprobada por la práctica: todo aumento de moneda sobre la cantidad que requiere un mercado, produce una baja en el valor de dicha momeda. e o o. TOMAS SOLEY GUELL, México, 18. 2To4a la prensa publica hoy el siguiente artículo ármalio por el Presidente de la Repúbiica. Loa ejéricros actuales constituyen el fardo más voluminoso y pesado que so porta sobre sus espaldas la humanidad.
El desarme de las naciones considerado en los pasados tiempos como un ideal únicamente cuyo servicio muchos grandes hombres pusieron sus esfuerzos, ha pasado en la actualidad: a convertirse en una necesidad ingente e inaplazable por constitulr los actuales ejércitos el fardo más voluminoso que soporta sobre sus espaldas la humanidad, el porcentaje de brazos que trabajan y que produce éste perdiendo fuerzas cada día, debilitando sus energías y agotando su paciencia sin guardar proporción con el porcentaje de bocas que consume y que no desarrolla sus activida»
des sino para la destrucción en todas sua formas; bajo estas condiciones se ha groducido un desequilibrio tal, que de no conjurarse nos Mevará irremisiblemente a la catástrote; la última guerra mundia!
ha dado como único y costoso fruto el convencimiento de que el periodo de la fuerza bruta ha pasado y que las grandes conquistas de la humanidad están reservadas a la moral y paciencia, y de que necesario volver a las actividades que entreñan estas dos grandes tendencias el inmenso conjunto de energías mentales y fisicas absorbido actualmente por los ejércitos; por eso no habrá un solo ser humano que no aplauda sin reserva la idea del desarme, es decir, la reducción de los ejércitos a un número indispensable pará gar rantizar el orden y la tranquilidad de sua respectivos pafses; hay, sin embargo, con referencia al desarme, tres puntos importantes que investigar. Primero: Si la existencia material del desarme ee campadece con la etapa moral por que atraviesa la humanidad.
Segundo: Sí el camino que se ha tomado a juzgar por lo poeo que ha trascendido al dominio público es el más corto para la realización de tan nobie En.
Tercero: Si los representantes de los países invitados a discutir sobre este tema pospordrán los intereses de los paises que representan a los intereses de la humanidad; por lo que respecta primer punto, es indisentible que al suprimir la fuerza bruta tendré que darse a lí moral su verdadero aleance y valor, aceptando sus dictedos como fallos para definir y respetsr los derechos de todos y ción eno de los El Desarme tratado por el General NOTICIAS DE MEXICO (De nuestro servicio exclusivo)
cisarse mientras no sean considerados ast mismo iguales los derechos de todos los pueblos que integran la familia humana; es necesario, pues, para que el desarme al realizarse no signifique un nuevo fracaso, que el nivel moral de la actual generación sea lo bastante elevado para. permitirle discernir y respetar los derechos ajenos, limitando sus exigencias a los propios con referencia al segundo punto; el hecho de que no se baya invitado a un considerable número de nacionas a tomar, parte en confereacias tan trascendentales para la humanidad, entra donde, además del desarme o limitación de los armamentos, se discutirán otros puntos que introducirán verdaderas innovaciones en el derecho internacional de cabida a la presunción de que no existe por parte de los Congregados a discutir tan importantes asuntos, 12 intención de usar procedimientos perstasivos para que sus acuerdos sean aceptados por los países que han quedado excluidos de ése congreso. en cuya caso el anhelado desarme se entorpecerá ho pudiendo Mevarse a cabo antes de imponer los acuerdos del citado Congreso a los países que no quisieran Someterse a. ellos.
sobre el tercer punto y con el deseo más sincero de incurrir en un error, ya que tantos beneficios induciría para la humanidad, Soy de opinión de que los intereses de los países all! representados ocuparan el primer término en el tapete de las disAsradecimiento al Dr.
Orar?
Eago públicos mis sentimientos de lgratitud Yiva y eterna para el Dr. Overes, por haberle arrebatado a la muerte mis tres bifas Marina, Lía y Dora, atnezdas ergelmente por la terrible ebre parstífica, Des.
pués de varios meses de Incha constante y espantosa, dominó la ciencia de ese médico esforzado, solicito y generoso.
Médicos como el Dr. Ovares alivian a la humanidad y honran a ee profesión, Sen José, 14 de nuoviémbre de 1921, río Urbiskto documento es propiedad de la Biblioteca NapigaglsBiosel LayuódicAmición Ena DR as del Ministerio vleitadd Espino o jas e a qa Obregón eusiones; ahora vivo el problema bajo su aspecto filosófico histórico, tendremos que dudar de que aun conseguido. el desarme limitación de los armamentos, se alcan cen las finalidades morales deseadas, ya que no hemos de atribuir a las armas las desgracias que han tenido su origen. en los malos instintos de los hombres; las armas han sido una necesidad de la guerra, y nunca: la guerra: una necesidad de las ármas; en todas las épocas, desde que la humanidad ha podido cumplir en la historia su pasado, encontraremos que para la guerra lo único qu ese necesitan son lós hombres; las armas se improvisan, el momento de la lucha, y si fuere dable suprimír todo aqueilo que el genio de la destrucción ha inventado durante los Glti. mos siglos, verízinos a los hombres tallar us armas en piedra y luchar entre el Suerpo a cuerpo, retornando a log tiempos primitivos; por lo demás, si atribuimos.
los inauditos estragos de la guerra a las armas modernas, tendríamos que tomar en cuenta y condenar también los moder Sistemas de comunicaciones que son fac tores decísivos en las luchas facilitando a las naciones los medios de conducir rápidamente a través de las distancias ejércitos formidables para llevar ea muchos ca Sos a países menos fuertes y tengamos, en fin, que condenar mucho de la bueno que a la elvilización tíene, atribuyéndolo inge nuamente un mal que radica única y exclusivamente en la conciencia humana; si la humanidad ha llegado a la doloroza conclusión de que se ha descuidado en ab soluto la paralela que debieran haber Bo guido, el programa material y el Drográr m2 moral y que nos encontramos en tma etapa de adelanto material e intelectusa que no hace sino Proporcionar a nuestros instíntos más y mayores medios de deg trucción, quizá sea tiempo de que esta. verdad, por amarga y dolorosa Que sea, encuentre eco en la conciencia colectiva y busquemos en la moral y en la cienela el último refugio y el faro protector parade.
rísir sobre nuevas rutas las actividades humanos, confesando la maguiiad de HRestros errores, reconociendo que todos los seres humanos así como los pueblos, tienen los mismos derechos y los mismos deberes y que los privilegios los erezron en of CN. f su favor los primeros que dispusieron de la fuerza bruta, mutila e Mutilando con ella los déTechos de los semejantes quizá con esta Duáiéramos llevar a las futuras generantoLes a un estado de cosas men 08 Angus toso. an

    Notas

    Este documento no posee notas.