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PAGINA SEIS TA DON JUAN RAFAEL ARIAS SU RENUNCIA MI PREG Como ya estuba escarmentado de cir tanta cosa ajena u la verdad y de recibir tante golpe y extecadas florentíne, decidí preguntr a don Juan Rafael Aríns, ena misma mañana, qué hubía cobre el particular. Nadie ¿mejor que él cunocía dos secretos políticos de don Alfredo, puer era su más viejo amigo, pu Minjstro de Cubernación, quien tenla au cuarto privado en el Castillo Azul: tio me podía yo dirígir a mejor fuente. El señor Arías, glo titubenr, me contestó: Eso no es cierto. pero ante ami insistencia, marchó a la Casn Presiden «ial, y un par de horas después, recjbía yo por toda respuesta una muy anable cartita suya de despedida, recomendándorio ro faltar esa tardo al consejo de Ministros, perque presentaría en él au renuncia lrruvocable y mue encargaba por nuectra amistad que lo dierra mi simpatía apoyando la mceptucloón. Nutu.
salmente, los señores Secretarios de Estado don Julio Aconta, don Mariano Guardia y don Enrique Pinto, eusndo se dieren cuenta de una rgnunela sin Yazón alguna para ser aceptada, aunque trajera el carácter de irrevocable, se em peñaron todos en que no se debía dejer marchor así a un compañero que daba tanto brillo ul Gabinete, Acorduren que sia pórdida de tiempo fuéramos en cuerno Jon compañeras de labnrea traerlo en esa misma noche desde Heredia. fué necenario llevarle la palabra cariñosa del jefe de Estado pura hacerlo desistir de su empeño, Don Alírodu se guardó para sí el motivo de la jutelgca pulítica, pera esta reunión preliminar de nuertro viaje a JHeredin fué para mí un martirio, y en ella tuve el sentimiento de recibir entr entra, directamente Donzadas, unas puntiagudas saetas tan enndentes como Satan: Esto tiene que terminar pronto, el que quiera hacer politica que se marche, no has hombres indiupensablea para los puestos. todo dicho con mal disimulado enojo, pasmándoge en el cunrio de Consejo, y hactlondo ver al mismo tiempo que aprobaba nuestra determinación de ir inmedintamente a tracr al amigo, Ya supondrá el benévolo lector bajo qué elevada presión re encontrarían sns dos calderaa Presid y didato en cier io el muevo tiblu que yo Gabinete, echado, hacer mi indiscreta pre: zunta nl compañero de Se habrá fombién notado que yo no quí perder esta reunión de Consejo de Ministros, en la que no chtendría otra eri cosa que comemplar la is on lo tuás alto de su apogeo; desgraciadamento, no pudo ubxervar el semblante del señor Cuatro Quesada, porque ol asiduo compuñero se abstuvo «de concurrir, TMuen desee abriguba yo de dinitar ul señor Arias presentando también mi DIARIO DE COSTA. RICA En la nuche personal econ uno de lor emplesdos Je Hacienda que segula teíu pases, o lamar resolverme a tener un encuentro 122 du enero debía yo u a cuentas a uno de mis gratuitos ofens y en una y otra forma favorecer el Juego de min enemigos, eayendo en la trempa que me habían tendido, Las ahbuminables conspiraciones que se fraguaban en contra mín y que servían entonces pura tema de choxcarrillos en toda la población, tenían que per csrtigados.
La victoria tan completa que curenó nuestra obra, fué debida, primero, la Inteligencia y sungre fría de nuestros colaboradores, después a que don Ma ruel Castro, euyos despluntes engencraron el 27 de enero, rehusó secundar el ovimi anto de ataque que le proponía ul coronel Monge.
Deba confesar que nunca mo había antes dado cuenta del desprestigio del enbierno ante todas las clases sociales; y mo hay duda que esto influyó de maHera puderosa pura que ni militares ni policías quisieran hucer uso de sus fr ies para sujetar y dur cimiento a ese pedazo de nube que se disgregaba.
La palma de Isurel que generosamente me obsequió entonces el noventa y cinco por ciento del pueblo de Costa Rien y que con sagrado lazo ntó luego el ¿ctenta por ciento de sus sufragantes, la debo, pues, ul ningún valor politico que tenían don Alfredo González y don Manuel Castro Quesada, y al denuedo, repito, con que hicieron respetar la Constitución aquellus rilencionos cludadanca, El tiempo es gran depurador do mexquinas pasiones, y la flor que remetiora la conducta desinteresada y bizarea de aquel puñado de patriotas no se puede marchitar, ni tampoco debe ser agitada por el vlento La vorablo o mlverro de una política posterior.
LA BOLA DE NIEVE. DS e Como regalo de año nuevo, nos ufrece Laia Guilnine un Jibro La América Lati y el imperialismo americano. Al tratar del movimiento Mevado a eaho en Costa Rica en enoro de 1937, dico que loa periódicos de Nueva York dieron exenta de que el Presidenta González Flores habín mostrado las pruebas de cómo habia xido derrocado pur su Ministro de Guerra vendido u una conque fía petrolera americana, para impedirle aceptar proposiciones más ventajosas cue le habían sido presentadas.
Según utras declaraciones del miarao don Alfredo, el desprendido y confiade neñor Valentine estas conlidndes lan debe tener de raza puso en mis mo vos cinenenta mul dolares (como guien no dier nada; más de descientos nl viones) para que con este dine utera destituirlo del poder. La fanta: sís es demasindo herbrusa para que la deje pasar fin hacerlo las honores que merece.
Convengamos, en que el señor Valentine, ul proceder os, actuaba impulsudo por uno de esos caprichos inexplicables puesto que coando se efectuó el tovimiento hucia ya más de den meses que se encontraba en Nueva York, con su vociq: ul señor Greulieh y con los papeles aficinles en regla, acordados por el Congreso y publicados en el Diario Oficial del 12 de noviembre de 1916 Hemos Vikiblén dé reconocer que nl durme los cuatro dinerillas que den Alfredo me receta, por su caído, el Congreso se venía también ubajo y seria rarcada la ingratitud del señor Valentine para con este Álto Cuerpo, el que en su desco de complacerlo no nceptó las abjeriones que el ex Prsidenie Gon. ález Flores había puesto al contrato.
Pero recordemos que don Alfredo González llegó a lus Esterdor Unidos mediados de febrero, con su sistema nervioso bostante plterado por el ñunto y contraricdades que había sufrido, con el natural sentimiento de acpararse de sus familiares y, pará culmo de raules, en lo máx riguroso del invierno; todas estna etreunstaneius udvezass lo habían dejado vin facultades para poder hacer un anúliris sereno de los intereses perdidos en el naufragio de sun rinbiriones políticas.
En este estado tan frágil se encontraba muestro ex Presidente cuando vió por primera vez la nieve, desquiciadora Impresión que fué origen del vértico rental que lo indujo a pecar, a hilvannr ton inndyertencia ese disparatado evento de duendes, rin preocupurse que con Ul desprestigiaba en el extranjero a tantos hijos del puls y ul país mismo. Vaxando nuestro hotbre per la biinareada ciudad, a Cin de sacudir la nostalgia y enfriar o! hetvor de la anngre, tropezó cun unes escolurea que con blancos proyectiles te hacían una guerriVo, y al recibir uno de ellos en plena faz, se dijo para sl el buen discípulo se Mas Nordau: du este cuerpo tan sólido que pipiriego me ha dejado sacaré provecho numentarndo sus dimensiones. Asi fué ideada la construcción del gran bolún que torció sin encontrar mauyor vesistencia, el erlterio de los MIOPES de la Secrctaría de Relaciones atenorez de Estados Unidoz, y que Juexo dió ancho campo a sua constructores paiditar y ra desse difamar no sólo a mi persona, sino también a)
Cungreso Constitucional y a las Juecus de mi tierra, lor que. erúpulos, según el renuncia. Asi le había munifestado un par de mesos antes don Manuel, como confirma el siguiente párrufo de una carla de óste ul entonees Presidente y sue ha sido publicada: Pellco mu escribe en un tono de desaliento y tristeza que de verdad me preocupa por ser nigo tán desxusado y que tanto disuena en e ter etedor y resuelto, Este no me euenta mula en evnereto sino vue únicamente me dices que tudo lo ve mby oscuro, muy feo y que está con vanas de salir corriendo. La crisis económica principlaba hucer sus estragos y el Gublerno sentía Hegor el enos. Si yo antena habia presentado dos renuncias por simples des serdos, esta vez tto quería hrjar el curapo y prefería mejor que me destituyuran y qué buscaran para ello la forma Jos dos Rembres a nulencs yu habia puliticamente encumbraido y de quienes me había exptado tan mala voluntad únicamente por su desmudid, dunbleión, por sus planes turbios, y que, sin ra.
von alguna extendían su feroz enoje a mi hermano Joaquín, persona que vivi sioimpre dejos de la política, dedicado a grandes empresas ng colas.
Lo que me hizo escojrer la mañana del sábado 27 fué el incontestable y iqpremiante ayiso que tuve tl cuer la tarde del 26, Se me infori de la ente reada que me esperabaz se iban necesitar con urgencia ruis embaentes servichos fuera del pulaz y esta ves era den Manuel el más empeñado. Corto habían ebservado que yo no era ya «l irmo de antes, aquél que per un quitame alli exar pajas enviaba la renuncia irrevorsble, se decidieron an geordar mi nalida, upoyados eh Ulas sen que dias atrás había yo dirigido u «don Sanuel reprocrándole su incalifícnble conducta con don Máximo, al que xmenizaba hasta con dentruirlo y eliminarlo 40 oponía a los plenen de reclecelón.
En una de estos acaloradas discuriones, hice yo ver al peñor Castro (Quesada que resolvia desde un Consejo de Goblerau asuntos que Enllarian toda la epinión pública en su cobtra, y que luevo sa marchaba tranquilamunto Washingtun a gozar del dolec farnientez tiabién le manifusté que yo no dmesu levantaran en protesta y que si Úl se sentía con valor trallacla a los que ¡cra hacerlo enmbiaríamos de puesto. En esa reunión, den Julio y don Mar vue durante toda ho, sin ulterarse porque come dixo no conuetas la inte men de enero había vonido maquinándose con inkistenrio echaron un balde de agua frla y lu reelección, y según supo, tan luego me retiró, continus den ¿ulio combatiéndola fuertemente.
CHINDO y JOAQUIN Demostrada a todas lucen está, y elaramente impreso en la conciencia de los costarricenses, que ea aquella úpeca de pactos y alianzas, en que la pala Lra de los hombres políticos ern un mito, no podía enrnox, ai a mis herrinnon el Coronel Guardia y Jonquín Tinoco ni a mí, el apoderarnos, duraate el 28 de abril y lus días que a erta fochn sueedicron ala el menor elstáculo pora ella y con la iprobación de muchos personua conxidorableg de una Pres edeneía cun el solo objeto de satisfacer la vana ambición de gobernar. Sabido es. también, que lo que desprocinmos en 1914, enntando con tados los suerdios y du fuerza del poder, tuvimos después que tomarle con astucia y revulver en nano pura salvar lu constitución de quienes querían perpeívaroe en eb poder, a imponer sucesor. Sópase, pues, que no súlo no lunmento el pasado, sino quel al tuviera que recorrer nuevamente el camino no tratarla de veriarlo nn ápice.
No había tiempo que perder, la mañana siguiente. íbado 27, se arrenlo. zu la que se pualiera, Mamando a unos amigos de reconocida honorabilidad para esponerles el envo, Si la suerte nos favorecía con un punto de apoya, el primer paso entaba dado y las propuestas de mediadores con el fin de cambinr de ixviradas da posibilidad del triunfo completo; mi hermano y ya, evo los pocos bierno, seguros estábumes no te harían esperar, Muy Tejos de nuestras salientes que nos acompañarian no podíamos azplrar a elre cos: Htema da patroté Pensar adueñarse del cunrtolde artillería fué y va que yo ne renalvá Mi orden a Jonqbía Pinnud, en el momento de partir para el de rineipid, fué de ponerte sitio la Artillería y Iinzarle desde el edificio Cosvoos y Telógrafos tur granadas de Aguilera, porque exte tiróteo era la úni. Principal, dende como dejo dicha, no ca forma pura apoderarme del Cu os. Tomado el Principal iría tenía ninguna persona que conociera mis props en sexilio de ellos, Repito que no era tan mentecato pura ponerme a buscar plementos dentro de los cuarteles, en los que tenía numerosos envrtigos y hatría sida difícil adivinar a quienes no le era antipático, La menor palabra, la más pequeña indiscreción de mio parte me hubiera perdido dejándome un el ivzyor de lox ridículos, Prueba de todo esto. por qné no han publicado la sumirta que huestres Iracundos enemigos mandaron levantar tin pronta como abandono el poder má amigo don Tunn? Simplemente porque ho encontraron; 27 27 fo, soldado e policía comprometido antes del Les hudá en el Instante de lo neción. Mi hermano puso en sutes del asunto el dia 23 dde encro solamente a las persunas citadas ya en la parte intítulada LA BOLA DE NIEVE. oro Om e00 JÉ 100 10510 do EL ORGULLO DE POSEER UN. onmor 1010 o Ono o0I0nIS onior su precio!
sE e LA Qs ar o Cada nuevo, cenmcque lego a Costa Rica es admirado por miles de personos que a todas hora pasan por la Costa Rica Motor Co, y su venta es inmediata, No deje Ud, dever estos nuevos Modelos OAKLAND que por su sólida estructura, su buen motor de seis cilindros y su belleza, no purmanecen per mucho tiempo en los salones de exhibición. El mejor carro de seis cilindros a Producto de la GENERAL MOTOR 1010 o 1010.
AS oa OLOT Lloro Jueves, de Mayo de 1928, decir del señor Gonzñlez Flores, fueron también venales.
ed Volvamos nquí a luz 00, 000 que el extravagante y pencroso señor Valentine puso en mis bolsillos por medio del Klu Klux Klan para ucometer la en ¡resa, Como supongo que nu se crecrá que me exigió Sindor, nl que puso tuter cue contralara la distribución de ellos, cube pensar que el caso se prestobir para que yo mo embolsura íntegros, puesto que quien no tuya escrópules pura recibirlos en esa forma, tampoco los va tener para guerdáracios. Cuánta desvuriol ¡Qué de disparutes enejerra exe bolón tan frio y tan fácil de liquidar al calor de la: verdad en nuestra Uropical Uerral 1Qué daño hizo el mareo y nuestro ex mandutario! Cómo le preyaró Due go su cerebro ul asesor de épocua fenecidas pura continuar azuijonéandole en la persecución de nueves runibox y rehacer fortunas.
Si por acuso don Alfredo plensa sinceramente que él está en do jueto sul creer que medinron dineros para levar a enbo el movimiento del 27 de nero de 1917, uo permitiría neonsejurle que pidn ul actual presidente da pu blicación de la sumaria que se mandó levantar sobre sucesos en la época del Licenciado Agullar Barquero y In que mús tordo, el 16 de egusto de 1920, ordenó la Cámara de Diputadon comu ejemplar castigo de los que medinran y resulturan culpables en el contrato Pinto eulich, pulrastro, kufún den Alfredo, de la evolución política que lo quitú la reelección o le impidió una Imposición. Es de uponer que los uutores de In Ley de Nalidades y de tantas otras ridicules burrabusidis nombraron para instruir ete pro: cesv una comisión nuda afecta ml persona.
Sostesigo, para el que quiera creer por mi honor, que na hay ol un sólo ndlitar que haya recibido dinero alguna por haber nytidido a da acción del 27 de enero. Con dun fuerza muntengo mis primeras declaraciones de que tumpoco tenían ellos conocimiento de mls proyectos y de que nfaguno puede deelr que mi hermane o yu les hayamos hubliulo antes del dia y hora del qnlsmo movimiento, con excepción de las siguientes personas: un cabales ro que estaba en la secretaría de mi cargo, el keñor Agellera, a quien cacurEmo preparara en su cams los pertrechos, den Juun Quesada, héroe del Pozón, desinteresada y noble amigo, amado de Guápiles el 22, misma fucha en que aucemtá el ofrecimiento del distinguido aborado dortor Rivos Váxquez, hecho el día en que eayó de 2u puesto el coronel Pinand; el con ingente que este araigo, herido por el trato que ne no dalla, puzo mb dis.
posición, consistía en doce permanas emplemlas en una empresa 2032, entre ños generales venczolanes Borrerule» y Rodríguez.
El so ha escrito yu en más du tres idioman y que no debe ser Ju a es una página, buena o moda, de la historia pubria, sobre ln que da por mpa vienclas vi decirea de los perjudicaden, Si no fuera mucha impertinenció de mi parte, pedirla al general Pinsud u al coronel Solórzano, mabos perid. de las tambi unbedores de eóme dixtus, recanocidos ¿man Jetrar, y ve denarrollaren lbs hechos para apoderarse de ls artillería, que dieran su impresión al respecto.
En cusnta al principal, los coroneles Santos y Oloyn tuvieron oportunidad de contemplue desde el principio cómo pasó el cuartel a pues vanos, Nadie mejor que elles puede complacer la ensioxidad del que te sienta influido por Jos volátiles argumentos de don Alfredo, enticndare que al ne nombrar a mi primo don Guillermo Tinoco, que me prestó 1any eflenz ayuda, nl a dox otros compañeros de pi hermano y míos, no lo hago con la intención de eerrales la puerta para que no exterlericon us upibiones, puesto que muy al contrario, toda la luz que so haga sobre ebtor.
hechos será muy beneficiosa.
lie produetría satlafacelón ojr ese relato detallado de los hechos por la juventud quo colaborá cormigo, porque asf el pax jusgaria com perfecto conocimiento de enusa ni hubo de parte de ella esfuerzo desinterozado y fina ustucla, e bien solerna room ha predicado en dos Estudos Unidos y stuiere Costa lica, con sufisticos argumentos, el ex Presie sosienienda en Gonzálex Florts.
dente Si el señor González Flores quiere dir sus PRUEBAS (incluyeado Jus fra.
vundos en Wushington (1) que leyó en el Corjreso) para que las estustie ur Sidud, cocomitó de honor compuesto por personas ale insospechable impareb mo gerian lex Lirencindos den Lula Anderson, don Alejandro Alvarado (uisos, don Alwito Hrenos Córdoba, deu Alfoneo Jiménez Hojas, don Tomán Fernáudez Rolandi, don Cinu González lucavado, don Rientio Fournier, el ingeniero don Santos León Herrera, doy Kobrrto Smith y den Otilio Ulute, me somotería ml fallo de estas. chores ent sn a ellos mismos mi do tensa. En entendida que sí la mitad de estos caballeros se excunita, mu inch igunimente ante ln centencia de los cinra ñeís que buadadosemente se quieran prestar a dilucidar el asunto y mo ruear al señor Uonmilez del error. Lo único que pido es que sea don Alfredo quien solicite ase gran tte vicio inn Íntesros jueces, bi a ello s0 Hegnra, pidase a don Diego Povedano o a don Roberto Brenes Mesón, emizos Íntimoa dol señor Valentine, vi nombre de la persona a quien correspondía ese uno por ciento de que habla don Alfredo; el menes les autoriza por exi quite para que digun si es comisión fué para a; pílase igualmente a los 43 diputados de entences.
que declaren «4 uno de ellos a guien yo recomendara la aprobación del contento poteulero Pinto Grenlieh; y a los Bancos que delderon haberme entr codo con cantidad, len levanto el secreto profesional pura que puedan eostesarlo, En el oido suseeptiblo de den Atíredo zumba la cifra cincuenta midi quee po sópase que estos fueron colones y que quien ere los alió dué el Ministawr de Hacienda, de acuerdo con el consejo de Gobierno y mús de un mes den pura de ocupar la preridencía pora que obsequiar e aquellos que nos sue daron y de cuyon versicion hubía que prescindir, Se seguia con ello la vieja costimbre de que el nueva gokierno prera las deudas contraiódas durante la empaña, Hay que reronuesr que dicha sumo os inferior o quivatente la que se regaló «uno de los tantos genernles Invasores.
Srpúi. declaración de dan Alfredo tpágina 11S del lino a que me he ru fxerido) la evulución pulítlea echó por tisrra propusiciones mío ventafoba aue le hubion vido prescotadas, Solamente recuerdo ln que meturá su obsesión de combatir la que yu esteba tramitándose en el Congrero y que des.
pertó on Loles nosotros algún interés personal, El ingeniero du Roberty pi que disfrutaba de simpatlas en el goblerno, prapurs en nombre de una caso potrolera ahizo parceído ul contrato Pinto Greulich. egin me core don Alfiodoz pero presentaba nuestra vista el aliciente de hacerse car ro de la deuda republicana, Pude mua subtonientes del partido, tente o menos alete mil colanes tes nuestra comproaise con el Banco, de y cuda uno, excepta el del señor González Flures que nscendla a quince mil por ser él tun te de la deuda del pi róvlico El Republicano. cuya imprenta, terminada de Jucha, habja denmesecilo, Pera no recuerdo que Laluera cunuetido a da consideración del consejo de gotieiia ninguna ctra sueva proposición.
Cuando don Alítedo dispuse partir para enesuzar las miradas del dicta dor ameriento hacía nuestro suelo, lHevándole un nuera aperitivo, lo enconw6 todavía con el bocada fresca que de Nienvagaa de nportara Weitzel y que condinianturuns ¿de respeto de Costa Rica y el Salvador, Bryan y SFhamorro. Los aron, he ebrtento, que a pesar de ba His arso entences qredicando pura hermosas doclrinas libertad Europa sus y de renpoto Ula Per vue nimas intervencionioten, y que sirvieren pora da enepaña. cómo se periodística del Hezala y.
el Ticayune verá en los anexos, párr 81 y 85
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