Guardar

DIARIO DE COSTA RICA Miércoles de marzo de 1972 Editorial Tema de la publicidad no es simplemente comercial reimpulsados por sus actuales directores, quienes tuvieron conciencia de los deberes graves que asumían cuando decidieron hacerse cargo de la empresa.
El tema que hemos venido planteando, relacionado con la libertad de prensa, con la publicidad y con el mantenimiento de las instituciones costarricenses, no es ni puede ser un tema simplemente comercial. Si sólo de eso se tratara, no insistiríamos en agotar el asunto y en llevarlo hasta sus últimas consecuencias, cida respecto a la esencia y al valor singular que para el país tiene el hecho de que aquí opere la matización diferenciadora del pensamiento, base sobre la cual descansa el régimen republicano y democrático que vivimos y queremos seguir viviendo.
La libertad es un concepto integral, que exige una contrapartida en la que nadie ha de ser excluido. Cuando hablamos del imperativo de la libertad de prensa, sustentada voluntariamente por los publicistas y por los anunciantes, a lo que nos referimos es a un fenómeno de doble vía: que los editores tengan libertad para actuar, informando sin cortapisas y orientando sin condicionamientos; y que los lectores reclamen a sus periódicos y a los demás medios informativos, la entrega de la noticia y de la opinión con toda la verdad y sin mutilaciones.
Es fácil defender la libertad de comercio con el texto constitucional en la mano, y nosotros la defendemos; es muy cómodo alegar juridicidad cuando se afectan derechos adquiridos de los periódicos diarios, y nosotros, obviamente, la alegamos. Es de perogrullo proteger la libertad de sufragio, exaltar la trascendencia del derecho electoral, blasonar de la importancia del amplio juego de las ideas y de la libre competencia. Pero todos estos derechos y todas esas herencias magníficas, no existirían ni adquirirían vigencia real si no fuera que hay diversidad de opiniones, prensa libérrima, actitudes discrepantes y, en última instancia, vigilancia pública, que se ejerce a través del periodismo con todos los beneficios que él reporta a la nacionalidad.
No tenemos nada contra las publi.
citarias, pero deseamos que muchas de ellas no tengan tampoco nada contra los otros medios informativos que no son su preferido; no buscamos un enfrentamiento brutal, pero tampoco estamos dispuesto a callar lo que hemos dicho y lo que se puede decir; no nos expresamos con temor, con complejos ni con soberbias, y lo que manifestamos lo pregonamos con franqueza constructiva, porque alguien tiene que asumir una actitud y porque ella conlleva una sana intención, para abrir los ojos no únicamente a los publicistas, sino también a otros estamentos que tienen compromisos insoslayables con la sociedad que los cobija y protege.
Cuando decimos que en esto de la publicidad y de los anuncios comerciales, se involucra mucho más que lo material, afirmamos una verdad. Senalábamos en días recientes una historia triste sobre la cantidad de diarios desaparecidos durante los últimos 20 años, muchas veces por la incomprensión de los publicistas y en oportunidades por la insensibilidad de los sectores responsables del destino económico, político y social de la comunidad.
Es lamentable decirlo, pero muchos de los diarios desaparecidos durante los cuatro lustros anteriores, dejaron de ver la luz, en parte porque no tuvieron el respaldo de las publicitarias y porque el sector particular no siempre comprendió. cosa que hoy entiende mejor. el compromiso que tenía adquirido frente a la obligante diversidad y matización del pensamiento y de la información, como elementos básicos para constituir, fortalecer y mejorar las instituciones republicanas.
Conforme el país crece, es más comprometedor para todos. y en primer lugar para los periodistas actuar con verticalidad, con afán de servicio, con realismo y con la verdad en la mano. Las hipocresías producen perjulcios. No vivimos tiempos fáciles; la transición actual nos presenta desafíos graves, al tiempo que los que tenemos responsabilidades públicas, nos abocamos a ser leales con la nación como una unidad, o con sectores determi.
nados, y nosotros, en esta alternativa, asumimos una conducta de consecuencia con la república, que es permanente, raíz y médula de nuestra existencia y a la única a la cual nos sentimog definitiva y profundamente ligados, porque de ella dependen todos los demás bienes materiales y espirituales.
El monopolio del pensamiento y de la noticia, sólo males produciría a la república. Este monopolio, que en la prensa escrita diaria estuvo a punto de convertirse en nefanda realidad, no se transformó en eso porque La República pasó a manos de otros empresarios, y porque DIARIO DE COSTA RICA LA HORA fueron reabiertos y La experiencia dice que los políticos, dilatados sectores del comercio y de la industria, los intelectuales, los líderes universitarios, los profesores, los maestros, los ciudadanos, los profesionales y muchos otros grupos importantes en el quehacer público y privado, no poseen una conciencia lúJULIO SUÑOL Prácticas cntizsniversitarias alcanza ribetes de brutalidad, como en el caso del joven Luis Fernando Masís Alvarez, quien hoy convalece y podría quedar inválido.
Un joven estudiante universitario fue víctima de sus compañeros el lunes anterior. Como es usual en cada inicio de curso, otros educandos quisieron cortarle el cabello y por accidente grave y lamentable, le infligieron heridas en la cara y en los ojos, y hoy se expone a perder la vista.
El hecho no tiene precedentes. La indignación de sus familiares es natural. Lo sucedido merece repudio. ojalá lo que pasó sirva para que se termine con esta práctica que a menudo Aclaremos que todos los universitarios no actúan de esta manera. Digamos asimismo que no han de ser enjuiciados colectivamente por un penoso y repugnante hecho que está siendo condenado por los educandos conscientes que hacen mayoría. Empero, producida la primera víctima, las autoridades universitarias y los dirigentes estudiantiles están obligados a dictar las normas adecuadas a fin de evitar que acontecimientos como éste se repitan en el futuro. los responsables, por supuesto, deben ser ubicados y castigados, ya que se cayó en la esfera de la delincuencia que amerita una penalidad fuerte para sentar un precedente que frene métodos que desdicen de la conducta esperable en quienes ostentan el honroso título de estudiantes del Alma Mater, Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica.

    Notas

    Este documento no posee notas.