VIERNES 16 DE ENERO DE 1920 EL HOMBRE LIBRE PAGINA en Cuentos selectos e FABRICA DE ESCOBASPreguntamos Ona policia correcta Apartido 699 LA COLOMBIANA Teléfono 751 LA CARTA QUE NO DEBE LEERSE viudedad, tiene la culpa una Aunque no lo necesitaba miré la Completamente moderna y en explotacion la vida de toda mujer hay carta, la carta fatal, la carta que firma, De él. No había tenido siempre una carta como hay una no debe leerse.
SE VENDE tiempo de leer ni una palabra mirada y una sonrisa. díjome Una muda interrogación mía, cuando apareció en la puerta Fé Dirigirse al Apartado Número 14. SAN JOSE Eva María, mientras acompaña interesado por la historia, la ani lix. No sé lo que me sucedió; me ba sus palabras de mujercita pemó a seguir: aloqué, perdí el sentido de la dante tocada de literatura, con No hacía más que año y me.
realidad y en vez de dejar la car un vago gesto de melancolía. dio que nos habíamos casado Fé ta tranquilamente sobre la mesa, Vosotros los hombres como las lix y yo; apenas tres meses de con lo que, dada la poca curiosi.
Ea el nuevo Presupuesto apacartas las leis con impaciencia, nuestro regreso tras el fantástico dad de mi marido, ni aun me hurece una partida en la Secretaría El domingo pasado aos tocó ir sonréis a todo el mundo y miráis viaje de novios al través de Eu biese preguntado de quien era o de Fomento que reza: logeolero a Cartago a presenciar la coloa cuantas mujeres cruzan por ropa y parte de Asia, y cuando, de dársela a él, como una culpa. Auxiliar Técnico con doscientos cación de la piedra fundamental del Salón de Materoidad. la vuestro camino; no sabéis la in acabada nuestra instalación, eni ble vulgar, trate de esconderla. cincuenta colones de sueldo menportancia que esas cosas tienen pezamos a salir por ahí, en una Lo hice tan mal, fué tan torpe y sual.
par del placer que nos causó la para nosotras.
de les primeras fiestas mundanas burdo, que Félix lo notó perfec propósito de esa partida que esplendidez de la fiesta, tuvimos Eva María es un tipo delicio a que concurríamos, en casa de tamedte e ioterrógome. Cada vez ni el dispendioso Gobierno de que admirar la corrección y dissamente femenino, con su cara tía María Otranto, me encontré ciplina del Cuerpo de Policía de menos serena, negué, traté de los Tinoco pensó en inventar se un poco alargada, su boca banal, con Pepe Lucientes. Ya sabes evitar que la carta cayese en sus nos ocurre hacer una interroga aquella ciudad. Habitantes de esta ciudad como somos, conferoja y blanca y sus ojos grandes que toda la vida ha sido un teno. manos y al fin, para librarla, la ción a quien corresponda.
y tristes, cercados de violeta no rio de guardarropía, entretenido arrojé a la chimenea donde pren ¿Necesita el Ministerio de Fo samos que desearíamos de cora.
se sabe si por las penas o por el en conquistar casadas y, claro, dió.
mento de un Ingeniero Auxiliar zón para nosotros aquel cuerpo, lápiz Dorin. Tiene ese aspecto no iba a hacer una excepción en Como un loco mi marido Técnico diverso de los muchos ya que en el de aquí se observa deliciosamenta ambiguo que im honor mío. Te confieso que de arrojóse a salvarla y sacó up tro.
que tiene a su disposición en el todo lo contrario.
pone la moda y que hace a todas soltera me había inquietado un zo. Había ardido medio papel y Departamento de Obras Públi. Les indispensables reglas de las mujeres desde los diecisiete poco con su fama de irresistible con él la firma; sólo quedabancas?
urbanidad para conducirse en la años a los cuarenta, iguales. Es y que en el fondo, en ningún caso unas palabras de ternura y frases Qué significa ese lujo? Es que calle las tiene la policiía en replritualmente su nombre es casi que siempre me hiciera, había truncadas, sin sentido, y por lo se quiere gastar el dinero en for ferencia, lo que demuestra la la un símbolo, pues tiene de Eva la picado mi amor propio. Total: tanto propicias a todos los equíma inútil pudiendo aprovecharlo bor que allá ha hecho el Coronel curiosidad malsana que lleva a que no importándome nada, no vocos. Félix nô consiguió arranen aquello que más interese a von Bulow, como Inst. ructor del todas las perdiciones y de María interesándome nada, encontrán carme el nombre del seductor, Fomento?
Cuerpo en referencia, a quien el fervor meiancólico y apasio. dole mil veces peor que mi Félix: pero por otra parte, todos mis Qué negocios técnicos o ad. felicitamos por el éxito con el pado.
menos guapo, menos elegante y esfuerzos no sirvieron para conministrativos puede tener el Mi que ha visto coronados sus con nisterio de Fomento que no de tinuados esfuerzos. Bastante debe En la vida de toda mujer menos inteligente, al verle ante vencerle a él de mi inocencia repitió hay una carta, la carta mí, me turbé. Debis de notarlo salió de casa como loco. Toda la ba consultar al Director de sentirse en Cartago la próxima que no debc leerse. Desde dona con su costumbre de galanteador noche vagó por Madrid sin gabán bras Púbricas y pueda resolver separación del Coronel von Boeste funcionario o uno de sus low, quien vendrá dentro de Inés hasta la Helena de La Rá de oficio, por cuanto su fatuidad ni paraguas, bajo la lluvia, y al faga. la perdición, el dolor y la exasperóse, y, como si fuese cosa volver, tenía cuarenta grados de empleados por delegación suya? pacos días, a ocupar un alto muerte nos llegan siempre por hecha, empezó a decitme tonte fiebre y la pulmonía me lo quitó Algunos en esto ven la repeti. pnesto militar en donde, de serías. Mucho más cortada de lo para siempre.
ción de algo que pasó en el Muuna carta.
guro, teniendo un campo mayor una lágrima rodó por la pin nicipio cuando precisa mente Hizo una pausa y después que fuese menester al verme en de acción, desplegará en modo prosiguió con una vaga excita mi primera aventura; aunque me tada mejilla de Eva María al re quien es hoy Sub Secretario de eficaz sus iniciativas.
ción: Fomento era Gobernador de la defendí, no lo hice con toda la cordar la carta que no debió reci Ya que de Instrucctores de bir.
Provincia.
austera digoidad que debía, y Verdaderamente, los homPolicía se trata, veríamos con Antonio de Hoyos VINENT Qué habrá de cierto?
gusto que a los actuales se les bres no podéis comprender. que seguramente le hubiese des 500000 00000000000 diera órdenes terminantes y oja¿Cómo vosotros, que vivís en la engañado; la cosa es que, estú lá el plan a que deben ajustar calle, habéis de sentir la emoción pidamente, sin voluntad de mi la inquietud de la carta que romparte, el muy sinvergüenza de su instrucción, pues francamente bió creer que yo era terreno conno vemos la labor de estos empiendo barreras viene a buscarSe complace en avisar a sus clientes y al público en general, pleados sobre los cuales pesa la nos en el cálido refugio de nuesi qaistado, y al día siguiente tro saloncito familiar donde leía Limpióse Eva María una lá. que ya ha recibido y están a la venta, los zapatos Americanos, grave responsabllidad de una mos a Bourget, rezamos o borgrima, y con voz un poco empa. elegantes, y confeccionados conforme los últimos estilos para policía correcta y disciplinada.
caballeros.
damos una pantalla china? Y, sin nada siguió: Pronto también llegará un lindo y variado surtido para. Perdóname mi emoclón, embargo, para nosotras es un UN OBSERVADOR señoras.
acontecimiento insólito y antes pero el recuerdo de la pérdida de de decidirnos a abrirla damos Félix me angustia siempre: en 500000000000000000000000000000000000000000000000000 muchas vueltas al sobre y nos in fin. Bueno, pues al día siguiente 0000000000000000000000000000000000000000000000000 Aviso terrogamos asustadas. será de estaba yo sentada en mi boudoir Tome siempre la famosa junto al gran ventanal de cristales Tiras de papel de centímeSonreí sin poderlo remediar, y cuando Estéfana, mi doncella, tros de ancho por 71 centímetros Eva María me riñó indignada: entro con una carta. Tuve, te lo de largo. No, no te rías. Ya vés, de la jaro, el presentimiento de que no SE VENDEN en la Adminis.
muerte del pobre Félix, de mi debía leerla pero. pudo más la Imitada por Todos Igualada por Ninguno vida manquée, de mi prematura curiosidad y rasgué el sobre.
tración de El Hombre Libre. 00000 0 hoy ha podido por primera vez hacer una co. El yacía por tierra, ella de rodillas inte nada. No ha sido sino un instante de fraqueza, mida regular. El enfermero estaba muy satisfe rrumpió Marcos, que daba señales de agitación, ya ha pasado y ahora lo quiero saber todo. Us Nieve sobre las huellas de usted verla si así lo tiene a bien. Lo esperacho. Ahora puede usted verla sin peligro. Pue. de rodillas y elevando las manos.
ted mismo lo ha dicho: tengo el deber y también El padre Sopnier, se detuvo sorprendido, el derecho de saberlo.
Por Henri Bordeaux ba a usted desde esta mañana, pero no ha ve pero no hizo pregunta alguna.
Obedeciendo, el monje reanudó su relato, penido usted. Continúa. Así es en realidad, dijo después de alguna ro con mayor lentitud, como un cortejo que asMarcos, a pesar de todo, no contestó. Mira vacilación. Ella nos había visto y d:bía gritar ciende la pendiente.
Por su parte, no experimentaba ante aquel ba con fijeza, como a un intruso, al otro per llamándonos, pero no la escuchábamos. Yo les El cuerpo del otro estaba frío. Ella se dejó espectáculo sino una sensación de repugaancia sonajs, que permanecía en su rincón, con as hice señales para infundirles ánimo y empecé alzar un tanto y le dí de beber. Lloraba y reia intolerante. No se daba cuenta ninguno de pecto un tanto embarazado. El prior compren. descender hacia ellos. Mis compañeros tenían simultáneamente. Hubo que cltarla, pues la aquellos comensales de la pesadilla en que él dió aquella interrogación tácita. Presentó al la cuerda.
caerd que la enlazaba a su compañero no se se debatía y que temía dejar traslucir a cada padre Sonnier que había descubierto a las dos Abrevió los detalles de aquel descenso peli había reventado en la caída. Luego emprendiuno de sus gestos. Pero quién es el que sos. víctimas y salvado a Mme. Romenay. Marcos, grose y llegó sin demora al encuentro mismo. mos marcha, transportándola con todas las prepecha la presencia de una agonía interior, aun siempre taciturno, hizo una inclinación, pero Ya muy cerca, escuché sus quejidos, una cauciones imaginables. El cadáver no era de entre aquellos a cuyo lado pasa ésta, aun entre no dió las gracias. el prior prosiguió, dejan. especie de gemido continuo como el de los pe urgencia.
aquellos que se creen observadores puntuales? do sentir dulcemente su autoridad: rritos recién nacidos. Exhausta ya, se había. ella no protestó contra el abandono?
La sangre corre por las venas tan acelerada y El padre Sonnier le pondrá a usted al co desplomada sobre el cadáver de su compañero, preguntó Marcos.
con tanta intensidad que se diría va a filtrar rriente de su misión. Por eso le he hecho venir. formando con él un solo cuerpo. No. por qué? He visto en mi vida no popor los poros y a destilar en hebras rojas por usted tiene derecho, más aún, deber de impo. Callese usted, exclamó Marcos con tono cos accidentes. cuando se logra libertar a los el rostro Pero nadie se da cuenta de ello. Los nerse a fondo de los acontecimientos.
de súplica, ocultando el rostro como si no pu sobrevivientes de una cuerda. aun cuando corazones desgarrados no se adivinan. Ni aun. hizo una señal, una orden, al religioso, diese soportar aquel cuadro evocado a sus ojos. queden allí los amigos más caros, los parientes aquel. os que los desgarran se dignan muchas el cual no reveló esfuerzo aparente por evadir El religioso, ante aquella explosión de dolor, más queridos, nadie protesta. La muerte sepa.
veces comprender lo que han hecho.
la: prefería sin uda a las palabras las duras pidió excusas. Sudaba como si hubiese estado ra. Bajamos al Hospitalet. Ni un momento, a. Papá, preguntó la niña tirándole por la batallas con los hielos y las rocas, el asalto a empeñado en la más ruda faena fisica. Aquel excepción de dos o tres síncopes, llegó a perder manga. qué hacemos ahora? Estaba lloviendo las vertientes erizadas, el paso de las más pér humilde Hércules de la montaña se encontraba el sentido. Al principio crei que deliraba, sus mientras comíamos, pero ahora hace sol. fidas grietas del glacier. Pero puesto que era en presencia de la más árdua tarea: la de ha palabras me parecían incoherentes, incompren Irás a pasear con Mme. Acher al lago. preciso marchar, marcharía: cuando el jefe lo llar palabras tenues y delicadas, propias para sibles. Decía: Es preciso que venga desPero sin acercarse demasiado.
ordena, no se discute. Al principio rehizo casi hacer soportable la verdad sin ocultarla, sin pués: Le suplico que lo llamen. No es cierto coger flores, si las hay. Tal vez se en punto por punto el relato del periódico. Pero disfrazarla. Poco apto para las circunlocuciones que ustedes lo llamaran antes de que yo muera?
cuentren al borde de la nieve.
un testigo que habla, es algo más que la letra y desprovisto de recursos oratorios, resultaba No pensaba en el que había quedado allá arriba, Cuando Marcos entró, el prior no estaba so muerta del papel impreso, es el pasado mismo naturalmente brusco. En aquel conflicto, invo y en esto consistía mi engaño. Al día siguiente lo: otro religioso, más joven y más robusto, de que resucita: de la arista del Velán, que tuepa có el auxilio del prior: por la mañana, estaba más tranquila. Me puso color encendido como se ve entre los que viven ba él con la caravana de socorro, al notar re. Padre mío, ayúdeme usted. No arierto a al corriente de. la separación de ustedes. Me expuestos al aire de las alturas, le acompañaba, cientes desprendimientos de piedras, se había decir las cosas como se debiera, y usted ve to dió el nombre y la dirección de usted suplicán Nuestra enferma, empezó el padre Dornaz inclinado, distinguiendo en el fondo, sobre su do el mal que le estoy causando.
dome que le llamara por telégrafo para verle por sin cui arse de aquel testigo que paralizaba a estrecha cornisa, a los dos desdichados, deteni El padre Doraaz iba a intervenir, cuando última vez y obtener el perdón de usied.
Marcus, continúa su admirable resistencia. Ha dos por verdadero milagro en mitad del des. Marcos, repriniéndose, interpuso: pasado la noche descansando como un niño y censo casi vertical. No, no, se lo suplico, no me oculte usted Continuará él?
CERVEZA TRAUBE 4040404040404 26 Nuestra Novela Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.