32 LA PEPVBLICADomingo 16 de Enero de 1996 EL PARTIDO SOCIALISTA FIJA SU POSICION ANTE LAS PROXIMAS ELECCIONES a los enemigos internacionales de nuestro pueblo, donde quiera que esas fuerzas se encuentren. desdichadamente, ellas se hallan presentes, en mayor o menor grado, en Liberación como en la Compactación Nacional.
El recién fundado Partido Socialista, independiente de cua. quier otro grupo politico de izquierda o de derecha, considera impostergable hacer un llamado a todos los ciudadanos conscientes, acerca de la responsabiliaad histórica que tienen frente al actual proceso electoral, y fijar al mismo tiempo con toda claridad su posición respecto al mismo.
Muchos de nuestros actuales militantes formaron parte del Partido Alianza Popular Socialista, que fuera ilegalizado por la conjunción de los intereses más negativos y bastardos, y con las sinrazones más absur las que se recuerdan en nuestra historia política, hecho éste imputable a todos los grupos e hoy se disputan el poder. Además estamos seguros de contar con la adhesión de todo ese inmenso sector de ciudadanos que están descontentos y se sienten desorientados, tan poca es la diferencia real que hallan entre los dos bandos en pugna. Constituimos pues, una fuerza de más de 80. 000 costarricenses, capaz de influir en el resultado de las elecciones, y sobre todo, en el panorama politico nacional posterior a éstas, actitud del señor Oduber en la OEA, defenciendo la poricica de intervención norteamericana con membrete de colectiva. Aunque el Partido Liberación Nacional cuenta con una gruesa capa de sectores o capas mealas, urbanas y rurales, que numéricamente predominan en el mismo, es lo cierto que cuenta también con el apoyo de importantes sectores del capitalismo nacional, que tienen influencia decisiva en la dirección del Partido; también encontramos en sus filas amplios sectores de empleados públicos entre los que hay algunos, especialmente los llamados técnicos, que han terminado convirtiéndose en agentes de los intereses politicos y económicos extranjeros. en los periodos que les ha tocado gobernar no han resuelto ninguno de los graves problemas nacionales. En cuanto a los sectores de avanzada progresista que militan en Liberación Nacional, debemos reconocer con sinceridad que éstos han librado importantes batallas contra las fuerzas que pugnan por la concesión, esfuerzos estos últimos que la gran mayoría de las veces han logrado sus propósitos.
Debemos además declarar aquí sin eufemismos de ninguna clase, que repudiamos cualquier intento de quebrar el orden constitucional, de donde quiera que venga, porque esto sólo podrá determinar un tránsito más doloroso de nuestro pueblo hacia la libertad y el progreso, y un éxito de las fuerzas criollas y extranjeras contrarias al interés nacional.
Llevados por estas consideraciones, queremos hacer primero un análisis objetivo, serio y cuidadoso de la situación política nacional Mantendremos pues, durante estas elecciones, una actitud de NEUTRALIDAD DIGNA VIGILANTE. Digna, porque con nosotros estarán todos los costarricenses honrados a quienes no satisfacen las fórmulas de gobierno ofrecidas; vigilante, porque todos juntos cuidaremos celosamente de las conquistas populares, para que éstas no puedan ser arrasadas ni por concesión en un caso, ni por convicción en el otro.
Nos enfrentamos pues, decididos, a las fuerzas criollas y extranjeras que pugnan por acabar con nuestras tradiciones democráticas y civilistas, con nuestros seguros sociales y nuestra relativa independencia, para sumirnos en la opresión que han logrado implantar en otras latitudes, para desgracia de esos pueblos, mediante la conjunción de esas mismas fuerzas, que se fingen defensoras de la libertad y la democracia.
El Partido Socialista seguirá denunciando concretamente al pueblo las maniobras de todos sus enemigos; nos preparamos para dar una larga lucha sin concesiones y sin compromisos.
La situación dentro de la Unificación Nacional es aún peor, pues alli tienen cabida, pero esta vez de una manera franca, los politicos más entreguistas y reaccionarios, las compañías extranjeras, la ANFE, los funestos grupos fascistoides de Marshall, Starke y otros, fuerzas nefastas éstas que dan su fisonomía a ese grupo político, pues las masas progresistas del Republicano Nacional sólo han sido utilizadas para llevar a los puestos claves a sus más encarnizados enemigos, como se demostró en el caso de la posposición del Lic. Villalobos Arce en el primer puesto de la papeleta para diputados de la provincia de San José. Estas masas están siendo utilizadas de una manera realmente escandalosa, para llevar al poder, al cabo de 20 años, a aquellos sus enemigos de clase, que se opusieron violentamente a las reformas sociales de 1942, por las que tantos de sus integrantes dieron su sangre y sus vidas.
Es evidente que existe enorme interés de parte de los monopolios internacionales en el tado del actual proceso electoral; deten los intentos de golpes de Estado, se espera poder colocar en el gobierno de la República a un grupo que tenga como suya propia la política de esos consorcios, restrinja s libertades democráticas, haga retroceder las conquistas sociales de los trabajadores, incremente la entrega de la economía nacion 1, y participe en organizaciones antidemocráticas y contrarias al interés y soberani nacionales, como la unión política y el ejército común centroamericano, base material para implantar una sola tiranía en el istmo. Todo esto responde al contexto de la politica exterior de los Estados Unidos en el Caribe y en el mundo, que marca sin ambages una inclinación hacia los gobiernos tiránicos y entreguistas. Esa política de fuerza, signo de desesperación, se ha manifestado con gran claridad en Centro América, donde sólo nuestro país mantiene un cierto margen de libertad que por todos los medios y la proscripción del PAPS es muestra de ello, se trata de restringir.
Todo esto saca a la luz, con toda claridad, la ineludible necesidad de que las fuerzas democráticas y de izquierda del país, observen una actitud de franco repudio frente a los dos grandes grupos políticos tradicionales; porque nuestra actitud no puede ser otra que la de denuncia abierta a las concesiones y al entreguismo desvergonzado que perjudican los intereses del pueblo.
Por todas estas razones, los ciudadanos que verdaderamente deseen la solución efectiva de los problemas nacionales, ya se encuentren en uno u otro Partido, más tarde, o más temprano, tendrán que convencerse que sólo en nuestras filas encontrarán la verdadera solución de estos problemas.
Por eso es necesario también, que todos aquellos que están dispuestos a defender y fortalecer nuestras instituciones democráticas y los intereses de nuestro pueblo, se encuentren en uno u otro grupo político, intervengan activamente para eliminar el párrafo final del articulo 98 de la Constitución.
Hablar claro y marchar en linea recta en defensa de la soberanía nacional, frente a la avalancha intervencionista que se quiere volcar sobre Costa Rica. ESA ES NUESTRA CONSIGNA.
Es probable que esos fines contrarios al Interés del pueblo, los consorcios internacionales los alcanzarán, mejor que en ningún otro caso, con el triunfo de la llamada Unificación, ya que esa es la línea politica incorporada a su programa. Pero es así mismo evidente que el sector dirigente de Libera ción especialmente en función de gobierno, sigue una política también de entrega y concesión abierta. Baste recordar la genuflexa No apoyamos a ningún grupo politico tradicional, pues la esencia de nuestra propia linea politica consiste precisamente en combatir sin vacilaciones a las fuerzas que propugnan por el retroceso social y económico, la mutilación de nuestras libertades democráticas y sindicales, la entrega de nuestras riquezas a consorcios extranjeros y la renuncla de nuestra soberania nacional frente San José, enero 15 de 1966. Marcial Aguiluz Orellana Presidente Comité Ejecutivo Partido Socialista, Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.