O FUE LA ISLA DEL COCO.
RELATO DE UN ESPEDICIONAR IO COSTARRICENSE ASI.
José Muñoz es de color giza. Nació y se crió en jose. Su unica aspiración empre la de explorar la del Coco, para buscar per mente el tesoro que dice la Ha dejó allá, en años ante del pirata Morgan, sede los mares que asoló las de Mosquitia y enterró en el producto de sus fecho Juan José Muñoz cuenta labras sencillas, pero pin cas, la exploración en buscodiciado botin a los lec de LA HORA.
per fin nos volvió fieras y Ja vi da se torno imposible. No obs tante esto seguimos buscando a golpes rudos de cincel. La ve hasta que en un momento de un getación es lujuriosa se pros El enganche.
dia cuya fecha no recuerdo, El bergantín. Abordo del Silver EL MUNDO SE ESTREMECIO ducen en una zarabanda de sel va las naranjas, los limones, las CON UNA NOTICIA.
Wave. La isla. En busca del Tesoro. EI Había sonado el metalphone.
papayas, el café, las guayabas, los cocos, los ricos marañones. campamento. El metalophone. La gruta Cómo fué? No podría explicarDespués que desembarcamos lo. El metalphone sono y los am misteriosa. El túnel acuático. El mundo se perímetros del aparato se moexaminamos de un vistazo la perspectiva recorrimos la am. estremece con una noticia del tesoro. Hambre. vieron. Mr. Klyton dió un limu plia y pio salto mortal, abrazó a Mr.
ermosa playa. Recibe Socorro. La visita de Mr. Crakers.
El fraesta playa el nombre de playa Leis, le dió un beso al cocinero de Wafers y tiene casi 75 me.
caso.
La vuelta de la expedición y lanzó un güi.
pipis que no se lo mejoran ni tros de ancho por 800 de largo.
Es una hermosa playa que ya en Desamparados. Corrimos to quisieran en muchos países te: Hasta que un dia, abriendo sel dos presos de la horrible emonerla. Se emprendió a poco la va en lo más alto de un monte ción y presenciamos el milagro: caminata hacia el interior, y descubrimos una gruta misteel metalphone indicaba la prebien pronto descubrimos, en la riosa. Mi compañero y yo dejasencia del tesoro. La noticia se misma playa, el campamento de mos escapar un grito de sorpre emitió por radio y el mundo en Mr. Gisler, un macho que tuvo sa y todos los expedicionarios tero volcó sus ojos sobre la exel optimismo de pasarse 19 años creyeron que nos habíamos con pedición perdida y con hambre buscando el tesoro y viviendo, vertido en dos metalophones hu para ver a los 23 nuevos Edmunt como un nuevo Robinson Crusoe manos, Aquella gruta debía ser dos Dantéses sacando las pie en un rancho de paja. Mr. Gisla guardarlota del Tesoro. Dos dras pliosas del señor Morler había acondicionado el sitio piedras gigantescas formaban la gan convertido en un magnifies lo mejor que pudo y de los es.
entrada, muy baja por cierto, la abate Faria. Nos abrazamos de fuerzos de Mr. Gislar nos apro cual estaba cerrada por otra pie alegria, lloramos, comentamos, vechamos nosotros dra de menor tamaño. Corrie gritamos y no nos socamos por EN BUSCA DEL TESORO ron todos a nuestro grito y se que el ron se había terminado la mañana siguiente se hireunieron los expedicionarios en la primera semana del mes cieron todos los preparativos pa frente a la puerta de la gruta anterior. La búsqueda fué ner ra inmediatamente dar comien misteriosa. Se hicieron cálculos, viosa, febril, trabajando de no zo a los trabajos. Nuestra priMr. Klayton consultó con Mr.
che. Golpe tras golpe hicimos mera labor fué la construcción Lekis, se dijeron cuatro cosas un hueco más grande que el del de varios ranchos en los cuales en inglés y nos ordenaron empu yolean Poás, pero a los siete pasar la temporada que se nos jar la piedra. Rodó ésta por la días de estar dándole al pico y esperaba. Asustados, temiendo gruta, que era como un tubo in Juan José Muños, el espedicio abriendo hueco, que ya oiamos que de nuevo Hegaran a impa clinado para abajo. Rodó la pie nario que relata a los lectores hablar a los chinos del otro lacientarles en su tranquilo reti dra y la oímos caer, tras largo de LA HORA, cele foiletin crio do, Mr. Klayton nos avisó que ro, asomábanse en la selva, con rato en el mar. Aquella gruta llo vivido por él.
habia descubierto um corto cir ojos curiosos, infinidad de ani era un cañón que tenía por fon cuito en el metsiphone que era du e mar. Se acercó el aparato días. Las vituallas comenzaron males salvajes, tales como chan el productor de aquel meneo de chos montañeses, gatos, patos y no dijo nada. Mi compañero, a agotarse y entró la descon. agujas. Ipsefactamente le nom acuáticos, palonias del Espiritu Felipe Pérez y yo nos dimos en fianza. Todos se miraban con bramos la familia. Mr. KlaySanto e infinidad de animales tonces a examinar las piedras recelo, luego con miedo, después ton y el aparato, entregandonos dañinos de menor importancia. de la gruta, lanzando otro gri een desesperación. Se racionó la a la más terrible desesperación. los dos dias del desembarque to, pero esta vez ya no desper comida. Los machos hablaban El metalphone, con el circuito, se organizó, después de termitames la sorpresa de nadie. So mucho, pero nadie sabía lo que se meneaba hasta cerca del es nada la construcción de las ba.
bre una piedra había dos inicia decian con aquella jerga ingle tómago de cualquier expediciorracas y ranchos, la expedición les misteriosas y borradas por sa. Se nos comunicó que se pe nario, y eso que no teníamos en en buscu del Tesoro. Ilabía que los años: y una flecha. dirian auxilios. Un día, por fin, él ni agua.
ir chapeando monte para regisSeguimos chapeando siempre en apareció el hambre. No tenia trar palmo por palmo el terreno la dirección de la flecha y llega mos con qué comer y era pre EL FRACASO quebradizo de la isla. Sacamos mos de nuevo a la costa, donde ciso seguir trabajando. La deses Después de aquel alegrón, to nuestros cuchillos y comenzase abría peración era nuestra señora y dos nos tendimos boca arriba a mos la brega con la selva, tre ya nadie creia ni en el metalo mirar al cielo y a recordar quien pando por laderas y saltando por UN TUNEL SUBMARINO. phone ni en Mr. Klayton ni en iba a salir de diputado por nues riscos, con grave peligro de per Tenia este túriel como 150 me Mr. Morgan, que parecia haber tra respectiva provincia. Costa niquebrarnos o matarnos unani tros de longitud era oscuro nos tomado el pelo. El calor se Rica nos daba la sensación de memente en uno de aquellos hon como una sotana nueva. Fué pre acentuaba. Para comer recurri ser un país de maravilla. Recor dos precipicios. Caminábamos to ciso traerse el aparato que no so mos en las horas libres a la ca damos con simpatia los tranvías.
dos adelante, machete en mano naba nunca y pasario metido ceria. De noche sentiamos mie Teníamos frases encomiásticas y dándole duro y atrás venian dentro de un cayuco por entre do, con aquel cielo estrellado, para la labor de la policia, se nos los machos con el túnel, a riesgo de irse al fon lejos de Costa Rica, en poder de antojaba San José una ciudad do y no sacar de la expedición cuatro machos que a lo mejor alegra y bonita, digna de vivir EL MET ALOPITONE nada más que una esquela mor les daba por batir el récord de en ella y hasta nos parecían El metalophone es un aparato tuoria. Recorrimos el túnel copermanencia en la isla cuyo hon huenas las películas de Ramón que según dice Mr. Klyton des mo si se tratara del de Camba.
roso poseedor era Mr. Gisler. Novarro. Tres meses después de cubre la existencia de minerales. lache, y no sonó el aparato. Fui Empezamos todos a pensar en haber llegado, levamos anclas El metalophone debía sonar el mos entonces a la bahia del otro la familia y a silabear por si en el Silver Wave y cuarenta y timbre en cuanto estuviéramos lado de la isla, la Shaton, en la acaso el Padre Nuestro. Llevá ocho horas después de pasar cerea del tesoro. No hay que de cual hay una cantidad infinita bamos dos meses y medio en hambres abordo, desembarcamos cir que todos llevábamos parada de piedras marcadas con los nom aquella angustiosa situación, bus en Puntarenas, dedicando un sen la oreja y con el rabo tieso de bres de todos o parte de los que cando siekpre, cuando apareció tido homenaje a San Lucas, don puro miedo. Mr. Klyton camina han estado de visita en aquella un yate fondeado en el golfo de de los presos están frescos en ba al lado del chunche, exami isla.
la bahía de Wafers.
parangón con la Isla del Coco.
nando el funcionamiento del apa Recuerdo que en algunas pie Aqui terminó la expedición. EL rato, que consiste en un cajón dras había nombres curiosos. MR. CRACKERS macho del chunche se fué, se grande, como un metro de alto Por ejemplo en una decía: José El dueño e inopinado visitan fué Mr. Lekis y yo con un pase por otro de ancho y otro de lar. Maria Zeledón, 1879, suponien te era Mr. Crackers, multimillo del Gobierno me meti en el tren go. Tiene varios amperimetros do nosotros que no se trataba nario y fabricante de las galle para San José que sale de Puny en las agujitas está el quid del señor Tesorero Visador de la tas de su nombre. Bajó, nos fe tarenas a las nueve de la maña del asunto.
Municipalidad. En otra el nom licitó por nuestra idiotez de bus na.
bre de Mary Pickford con la ſe car un tesoro que no aparecia, Pensaba traer un tesoro a mi LA GRUTA MISTERIOSA cha de 1931, y en una grande, tuvo elogios para el invento de familia y no le traje marañones Aunque el clima es fresco, sie con letras perfectamente claras Mr. Klayton y se marchó. Le siquiera. Habia comprado una te días después de estar cha se leia: Morgan, 1822, es hubiéramos pedido una galleta cajita en Orotina, pero como se peando sin que el metalophone decir anteayer. La búsqueda en pero resulta que no tenía nada me olvidó pagarla tuve necesi.
dijera nada, son suficientes pa la balia Shaton se hizo deteni más que en la fábrica y la fábri dad de restituirla al dueño. Lo ra aciguatar al más pintao, y co damente y palmo a palmo. Co ca estaba en Estados Unidos. peor es que mi erédito estaba mo no haciamos de sol a sol na menzamos con el alba y termi Desesperados, urgimos la peti cerrado. Venia de buscar un te da más que chapear y parar la nábamos al anochecer, pero el ción de socorro. Comenzó el ra soro y no traia ni el cuatro de oreja, nos cansábamos mucho. aparato no sonaba. Pasaban los dio a emitir El hambre los marañones.
ENGANCHE de chiquitillo tuve deseos ponocer la Isla del Coco co ia a relatar Muñoz de bra que cuando me enteré una expedición habia pedi.
hermiso para explorar aqueposesión de Costa Rica coé a hacer gestiones. Engan se como expedicionario es fácil que conseguir empleo Banco de Costa Rica o en la staduria Mayor. Las recomen pones me salvaron y formé he de la expedición eomo uno los costarricenses iban representación del Gobierno smo uno de los 25 que mar.
an e la conquista del precia botin, émulo del que Dumas nión bribe en la novela de Dantés.
BERGANTIN ros De buena manga y marinera ra tres palos y alto vela.
prines Se llamaba Silver Wave, sunto staba fondeado en el golfo.
indo llegamos al puerto, a.
tlgunes la nave, mecida suavemenYalea el centro del golfo nos pa ento.
a como la realización de un Jio de hadas.
El ejerincor BORDO DEL SILVER WAVE ntarios 10 de abril de 1932 desplema en sus velas el Silver y dejamos pis Puntarenas perdida en el cedera enso horizonte de la costa milita se hundia por la distanciasolun por el mar. Cayó la noche y incor bergantin tomó buen andar de poi de or el ardiente aire del océano.
as será nos secaba las gargantas.
me tendi sobre la tolda y e al cielo. Era una noche es.
llada de abril. Titilaban los eros y asomaba su cara re da la luna. El ambiente era Nido. Los 25 expedicionarios la empresa Coco Island TreCo. empresa canadiense, iba enviados por Sir Malcolm mpbell, el famoso corredor de idos, y llevamos como jefes a machos Mr. Lekis, jefe la expedición y Mr. Kalyton, frentor del aparato para desPrir tesoros. las 48 horas de He estaba amaneciendo cuan surgió en el horizonte un pun El punto se agrandó. Hora media después se perfilaba detalles: era ISLA DEL COCO Varias horas tomamos para pembarcar toda la impediKata que llevábamos, pues hay tomar en cuenta que no su Sente eran los aparatos geosicos sino también la comida, rada en cajas para prevenir alquier desagradable evento.
La Isla del Coco es pequeña.
dida, casi toda en acantilaAltos montes cortan a tala costa, y pareciera hecha ue el con Lunes 10 de Abril de 1933. LA HORA PAGINA NUEVE Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.