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666a GG Hora Citeraria LAS PUERTAS EL AMOR CULPABLE MANO EN EL ARBOL (El naufragar e dolce in questo mare. LeoPardi. Las puertas que Techinan Bon corteses, Anuncian cuando Be les abre.
Tratan de cuavisar las sorpresas horrendas. Muchas de Estas puertas educadas han ditado fieras verguenzas a nu merosas mujeres honestas.
En cambio, esas puertas mu ble alus, que se abren traidoramen e sin un murmullo, sin un cru Jido, aman la complicidad. Sin 808 puertas, muchos novelisoneranås de un capítulo espantoso.
tas no habrían podido terminar Tal vez no existiria Maeteras a Sox puertas para los ladro.
res y para los espiritus maligglos. media noche, por esus puertas puede entrar, dignamente, un fantasma. De dia, a veces, son cómodos. Pero de 20 che, entre la sombra, siempre se comunican con el misterio.
Las puertas que rechinan son plebeyas. Es indudable.
Fueror construidas por carpinteros irrespetuosos y desordenados en tardes de sol y de buen humor. Estas puertas gritan, ju run, llaman, y hay algunas que inician compases cancioneros.
Con ellas no se atreven los fan tasmas. hacen bien. Un jan tasma perdería todo su carácter, junto al chillido humoristico y vulgar.
Cierto dia visió a Jesus2 hombre profundamente des do. Señor, le dijo quejándiks, Yo soy el marido de la adúltera que perdonaste, Hiciste mal, Señor, porque no ha escarmentado. Sigue faltándome, y héleme uyui cubierto de oprobio an te los vecinos. Tanto la amabas, respon dió Jesús, que si dejo ejecutar Se la sentencia, nunca me lo ha brias perdonado.
El hombre bajó la cabeza. Ciertamente, murmuro late go; pero sigue pecando, Señor, y es menester castigaria. Puedes hacerlo sin faltar a la ley. Ya lo intenté, Señor, pero no pude. Conforme tus palauras de aquel día, mis pecados impidiéronme tirarle la prime na predra. como tú eres, SeFor, el único viviente bin pecado, vengo a pedirle que lo hagas en justicia. Mul recurres a mi. El esta do de pureza lleva la bondad a tal perfección, que todas las co Q8 se connaturalizan con lo pu To. así, basta que yo toque lus piedrus, para que tomen la misma blandura de ma carne. Su castigo os justo, sistió el hombre. Lo que entrene razón, concluyó el Maestro, es el cariño que perdona, no el agrario que reclama. Vete contento con tu dobilidad. El amor culpable es todavía mejor que el más justo de los castigos.
Daniel de la VEGA. Tone PREGUNTAS EN LA NOCHE Leopoldo LUGONES mientras la seca destruye, el Amor va construyendo. Qué bien rien las bocas, ebrias de besos; pero ríen los últimos los esqueletos!
Emilio CARRERE carde, me Para pensar un punto en 80m.
bra, con asidero y paz, en medio de la plaza ruidosa, he pues to mi mano en el árbol. Es un gran eucalipto abandonado, lle 20 de arriba abajo de desgarro, nes de seca corteza canela, que enseña por todas partes su du ro y lustroso muslo solo, verde, plata y rosa, por donde suber bajan hormigas, cochinillas, coquitas rojas con pintas negras. Arriba, en su alargada copa insubible, que el sol de mos yo hace armeria rica de puñales de oro traida y llevada suu vemente por la brisa loca, canta muy alto, casi en el cenit, un pájaro casi irreal. He puesto mi mano abierta contra el eucalipto, y en el acto me he sentido navegante de un piélago interno, Al Este, al Norte, alzándome inmensamcate en la proa, descendiendo a un fondo de mundo que va a no toner término, aprieta mi frente el embate de lo inexplorado re sistible. En torno, el total cielo nubarroso, que abarco desde mt mismo, azul y blanco, se recama aquí y allá, en el mediodia de lo ya único, como de hervores tesoreros de olas inmorta les.
El marco del infinito empie24 a trastornarme. Despego la mano del tronco, y como si des prendiera mi corazón de un po deroso contacto eléctrico, me quedo a oscuras, más a 08C4ras que nunca. Vuelvo a poner la, dueño ya de este resorte má gico, que en un segundo eterno me saca y me adentra, me hace mendigo o rey de la belleza grande. Sonrío, me despido de mi, sonrío. olvidado de todo, tirando lejos mi dia diario, a firmo más la palma contra el árbol, hundo los ojos por las ba jas nubes cumulantes, y voy, fe liz en el navio español del globo, náufrago voluntario, entre el semejante ajeno, de lo absoluto LATIDOS MUDOS DEL ALBUM DE ELENA OLGA CARADELIS Corazón sin amar, corazón muerto, que en lóbrega, prisión lates vacio, el mundo es para tá campo desierto, sin limite, sin luz, estéril, frío.
Nunca podrás ornar con frases huecco la triste historia del debor humano, aqué son tus ilusiones? Flores secas. Qué son tus esperanzas? Humo vano.
Sigue marcando ritmico latido, que la vida automática acompaña, fuiste trono, volcán, búcaro y nido; hoy eres, corazón, sólo una entraña.
Sombras Vi en mi sombra tu sombra, vi que irradiaban tus venas, la luz del misterio.
Te vi tan cerca que todo se puso mudo, mi alma ya no pudo decir la palabra que tanto ansiaba.
convulsio ce provo de en PREGUNTAS EN LA NOCHE en víspe y, a BU¿Habrá dolor en la vida en visto remota de los luceros?
na en la Habrá corrientes de amor ativo, por turbiones de deseos?
el que Estrellitas de la noche, co incen lampadarios del Misterio, a electo en cuál de vosotras viven thoru mis pobres muertos?
Por mi vida pasaron igual que un sueño, cual la sombra del humo Ministre undo le por un espejo, perfecta En ias lejanas estrellas enos duabrá ciudades de ensueño, cuente magnificas Babilonias ella prey Ninives de portento?
enta, cul Sa las ruecas de los siglos icos que us Eloines tejieron us esti Romas de arigusła soberbia, interesesy Atenas de encantamiento?
elecciona Vanidad de la historia, y se ve wocablo hueco, la Chi escrito con el polvo Politi de los Imperios!
en todas que IdHabrá en esas diamantinas de nues lágrimas del firmamento toral es blancas tiaras papales, mantos y dorados cetros?
a la má Se constelará de gemaa la gloria de los Imperios expre habrá áureas apoteosis mlar; por de los principes soberbios?
ay que Su irrisorio epitafio osamente azará el tiempo: es confa Aqui yace el efímero electoruido del viento.
también e se tie Hay carne sensual y triste encias dien los remotos luceros; variat almas de los que se han ido tivo do de los que aún no vinieron.
ar, sin Log telares de los siglos ko, a im vidas y vidas tejieron; cias, ca Irán pre Rica.
del la ma propone is de or Soledad bruna a la les de noche arcana.
re iniciati Butena la una.
por la cadas.
Cuán oportuna la luz lejana, que en la ventana aribes vierte la luna.
mañar Silencio gravo tiene la clave de la armonía. es que la sombra mutiloba estrellas y enredaba sortija en torno a mi boca.
AUTO PAISAJE Crecieron rosas frescas en la vejez de olivos.
Aceite contenido, untuoso sobre el aire, Las abejas, lubrificadas, eran tic tac de maquinaria.
Tado el paisaje giraba con la rueda dentada de la cuina.
Mas los restos del auto de carreras se hacían vegetales.
Hormigas en las llantas.
Mariposas calientes sobre el cuentakilómetros parado. en el panal del radiador había tres amapolas. HEH Todavía el espejo retrovisor, guardaba la sonrisa anterior del chofer. Un mirlo suave, bajo la lluvia, olía a gasolina.
Se morían las rosas cargadas de leitómetros.
Agustin de FOXA Por eso calle.
Te di un besa y me envolvi en tu sombra.
eto. gs Mercedes Viaud Rochac Juan Ramón JIMENEZ Lea este DIARIO JDA RAMONA Desordenado cuento celeste para tus ojos colegiales: quance años: anémicos estudios den tos de piano; flores en el mes de Maria; rezos cansados en las ojeras de la monja; corredores: cantos que se quisieran oir; palabras nuevas que se qui siera palpar, llantos y risas sin camino; en los rostros mayores sombras y gestos. y el secre lo y la amiga. y la promesa disecada en la flor entre las páginas de un libro y lo que no, sabe que se quiere camino a todo el mundo en las alas de un pájaro.
Desordenado cuento celeste para Ida.
Blanca del PRADO rect En la campana Será su perfume y loción favorita ADAMS El Depar Pídalo en todas las tiendas. farmacias Chiclets anuncia lo interpreta la más secreta melancolía.
al proce CANDY EWING GUM a 150 mi Habans een Ja West, Eduardo CARRENO LUNES de Julio de 1933.
LA HORA PAGINA TRECE 33.
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