Guardar

COMO ESCRIBIO RUBEN DARIO SU MARCHA TRIUNEA edución RUBEN EN EUROPA La Estancia Del Poeta En El Lazareto Argentino De Martin García hablando barco, rumbo a la isla de Martin García.
LA EMOCION DEL LAZARETO Madrid, noviembre de 1933.
Aquel año de 1895 el gran pocta silencioso y triste estaba en Buenos Aires, representando o mo cónsul a Nicaragua, su pai.
Habia estado ya dos veces en Europa. Una, en 1892, en Espa ña, con motivo del aniversario del descubrimiento de Améric.
Conoció en aquellos días a dom Joan Valera, a Castelar, a Miss néndez y Pelayo, a Zorrilla, Cánovas, a Núñez de Arce, Canalejas, a la Pardo Bazán. See hospedaba con su primera jer, en el Hotel de las Cuatro Naciones.
La otra vez que vino a Euro pa estuvo en Paris. Paris en su gran deseo, su gran presen timiento. So embragó allinu vida literaria y noctambula. As piró gozosamente el perfume de la gran ciudad soñada desde la jos y desde niño. Gómez Carr llo fué su camarada de boherai parisina. Con el conoció a Verlai ne, a Banville, a Moreas. Un dia marchó a Buenos Aires. En Buenos Aires había de escribu la Mareha triunfal.
La vida en el lazareto es monótona y dolorosa. Hacen cuarentena en él todos los sospechosos de enfermedad de peligro. Rubén se horroriza muchas veces ante los casos de miseria y de dolor que contempla.
Algo hay en el lazareto, sin embargo, que borra en el pensa miento de Dario esta visión angustiosa de la isla doliente: una cantina. una cantinera. El alcohol y el amor endulzan las es peranzas de aquel vivir solitario. El poeta siente por la muchacha de la cantina un amor rápido y llameante. Ilabia de ella de ella exaltadamente en ¿Qué LA VIDA DEL POETA EN BUENOS AIRES. En la capital argentina Ru bén va escribiendo para el din rio La Nación esas espléndidas semblanzas de escritores que más rde han de formar el volumen Los raros. Su vida es, como casi siempre, inquieta y desordenada. El alcohol y la noche son sus dos grandes ami gos. Trabaja sin calma y com Siebre.
Su porte es desaliñado. Se re.
tira a su casa al amanecer, des pués de haber bebido y escrito en algún café. El poeta no cuen ta aún treinta años. Pero su cuerpo giueso, su rostro anche, su barba rubia, sus ojos cargados de nostalgia, le prestan más edad. Su desaliño, su vida bohe.
mia le hacen tener pocos ami.
gos. Pero esos pocos, por cont prender el gran corazón y la gran inteligencia que se escon den tras aquel rostro feo, con leales, son fraternales.
NOVEDADES te parece?
ún la cant Continúan tiempo. Pasan las horas, įsta es la pri sus erónicas de La Nación. Aires. Le recuerdan que el dia una de la madrugada No poco tiempo después, al escribir 21 ha. de celebrarse en aquel ha comenzado a escribir, jubilaci a su amigo el médico, se refie. Centro una fiesta, y que para dico le apremia.
re a aquella muchacha Beliela cuenian con unos versos. Bueno, es necesario na con palabras de una melan prometidos por Roban.
bir! Aquí tiene papel, a ley entram cólica emoción.
Es verdad. Lo he promcli tinta. Trabaja!
de fond da y debo cumplirlo. pienso. Está bien. dieee LA MARCHA TRIUNFAL.
Voz aita: nada más, dóeil como en cuar Ten en cuenta le habla el grandote.
tirá ele La tarde del 22 de Mayo e) dietor Plaza ave no puedes per se sienta ante, la poeta y el médico, después de de un solo minuto. El vapor 119 Frente a él, el medico. de 194 dar un paseo por la isla, vues mañana por aqui, y ya no en su trabajo. En sus ven al lazareto. Sienten que ali pondrá otro hasta la semana de Medicina, el uno. El guien les llama a su espalda, sus versos. Tiene in el proyecto de Hoy hemos Es un mozo que trae un tele. Se enciran em despacho da una quietud sonors grama. El telegrama es para amarelo Rubén pasca negran silencio del lazareta dicial, del cu nes a los empl Rubén. El menudo papel tiem visamente. Va exaltándose por el lere palpitar apresuro bla unos instantes entre las mi las plumas sobre el papa en LA FORA dando con una momentos. Se detiene de pronto.
nos del poeta. Por el pensamien. Qué te parea? Evocar Roben una letra mere to rubeniano cruza esa interro.
rios de la ma vic:a, airosa, inclinada la información 11 una visión del pasado, un desfi gación que es siempre la llega le de sombras gloriosas, que derecha escribe: puntos que co da de lo imprevisto. Qué trae cizan como en una marcha yecto. Como rá el telegrama. Rubén lo abre, trlunial. Eso es! asi se va a Ya viene el cortejo. Ah! Es del Ateneo de Buenos esas informaci llegaar Marcha triunfal.
Ya viene el cortejo que and pletas, damos (los claros e varios de los por publicarse De pronto, con una raye importancia tifica este segundo verso, ley.
el que anuncian. Ylel De donde queda de esta forma: tradas son de tes: Ya viene el cortejo; Ya ses Deducción Clos claros clar los sueldos cantidad de la hora y media Robe de servicio terminado la poesia. Atau Seorea el la pluma, se levanta, lee lo ya iden fua sos a su amigo. El médig miembros de abraza, emocionado. Rubén timbre muni pia luego los versos, y en la se colocará nana dal nuevo día 23 de to de todo ex yo. recoge la poesía elegún la cuan que hace alto en la isla, exceptúan de no de Buenos Aires. los procesos les dos días, la Mary tiones hecha triunfal es leida en la Público, el del Ateneo. quien la lee es fancia y los cisamente. Jaime Freyre dos pobres.
amigo que prestó a Rube En cuanto gaban en la eruda mañana diciales, los que el poeta decidió ir al lerán, cuando to.
de hechos cial, siempre UNA CARTA DE RUBEN autoridad cc DARIO los intereses fondo de Muy poco tiempo de un depósito Rubén está de nuevo en juicio que te nos Aires. Vive en la cals no gestionar valle. Pasa la desgracia pa rechos de la corazón, y escribe entonces dio de esa carta. dolor y nostalgia a a ser propic migo leal, al amigo frato Esta medida La carta diee asi: te porque EL MES DE LAS GANGAS adelantada Mi querido amigo: De prescripción inercia de to no le he ecrito una sola Por últim bra; de intento. Sabía, coras cial recauda quie las casas que esta seis por cid fiesta no hay que ir vestido chos de par SEDERIA.
luto, Fiesta como la suya, ET AMINES. RAYONES.
de rosas y besos, 10 debia tro Público CEFIROS FINOS, Etc. que ofrecemos a.
turbada por mis pesares, papel con son muchos.
notarios re PRECIOS INCREIBLES.
He sufrido, mi querido turas.
dencio, lo que usted no pa imaginar. Con decirle que LA ORGA TODO FRESCO, ACABADO DE RECIBIR puñalada no ha sido la mue PATRON de mi madre! así, solo, pletamente solo, he patike La Comi inmensamente Tan solo!
tar a la hora que se fué nuestro Jay lestia y la Freyre, piense usted!
manejo de por fin, esta noche, dientes a media noche, en una de las duras noches de mi vida, la mento enu cribo, a riesgo de darle 19 o de pena. Felizmente, adorah e Maria le da sier la vision de la dicin, y es la no lo dejará entristecer.
Coces he tenido que me dejado el alma dolorida. De Iles por una carta no pueden por 30 muehos. Pero si le que han sido cosas del cor y usted, que me conoce con teleetual, como médico y cu amigo intimo; usted, que cuales son los pesares de vida, comprenderá mi sufrimi 10.
Pasa a la Pág. DO EN TELAS AHORA QUE VIENE DICIEMBRE UN ENCUENTRO EN UN AMANECER gan en la Entre asos amigos está el doc tor Prudencio Plaza. Un gran antigo de los poetas y de los me sicos. Es director del lazareto de Martin García, en tia isla cerea a Buenos Aires, Un amanecer, el doctor Pla.
za se dirige al muelle de la ciu dad; media hora más tarde ha de tomar el barco para el lazareto. se encuentra, en la Pla za de Mayo, con Rubén. Rubin, cae viene de un café, donde ha estado bebiendo y escribiendo.
Rubén, que va a acostarse, cuan do ya todo en la ciudad despier ta de su sueño de la noche.
Se saludan. Se preguntan, res pectivamente, a dónde van. Rubén queda un rato en silencio.
De pronto pregunta. No te parece que yo tan bién debo irme a Martin Garcia. Naturalmente. Debes venir le responde el médico.
Quedan de acuerdo en ello. Pe To el amanecor es erudisimo, y el poeta, descuidado siempre, es tá sin abrigo. Queda en silencio de nuevo. Nerentinamente, co mo por arte providencial, aparece en la plaza Jaime Freyre, Un gran amigo del poeta y del médico. con un abrigo verdaderamente espléndido.
Se saludan. Enseguida, Jaime Freyre se quita el abrigo y se lo pone a Rubén. Al poco rato, el poeta y el médico están en el TIENDA LA GUARIA Dr de FELIPE FIAT frente costado este del Mercado ENFER Todo lo de Seda, Algodón o Lana, a Precios Sin Igual PAGINA DIEZ JUI LA HORA JUEVES de Diciembre de 1933.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

    Notas

    Este documento no posee notas.