LA TOPA LITERARIA Una Carta Absurda Te qui1 mos horas anduvo un muchacho pre cuerdas. El que pagó un colón y UN CUENTO DE EN UN ABANICO Es la primera vez que escribo pesimismo, mi cinismo igo intimo.
Lo hago porque es duele tanto, y me transton para tí. Ya ves. para tí que no en un buen ciudadano lleno me conoces.
peranza, alegría y fe. Com Me quiere temblar la mano.
enormes ganas de volver Pienso si será que desea seguir el La Amada Inmóvil. Por to ritmo del corazón. Las cosas de gracias. Muchas gracias.
a dentro hay que echarlas afuera, Esta carta que de seguro Ei sol, ai aire. No me iba a desaa tus manos un día de tant hogar con el boticario de la esquiel atestado que presentaria na ni con el compañero de redadacción. Te lo tenía que decir a de vivías. Trataré le refrescarte Por Tú me hiciste optimista duran otro mundo para que vean éste fuiste buena.
ADOLFO HERRERA GARCIA te unos minutos. Hay una prue.
tí. por eso, después de meterle la memoria.
En el cine. Estabas con un aha innegable: compré un billete de Ya iba a firmar sin deri un pie de amigo a mi atrevimienlotería.
que te intriga tanto. Por to, te digo a tí a tí que no me brigo blanco. iTánto que te luce je mi torpe obsesión?
conoces que yo te quise durante lo blanco. Hacia calor.
Desde aquella ¿Ves que optimista estaba. noche hasta el Me sentí otro. Eso es: me sentí tastes el abrigo echando los rizos cuarenta y ocho horas.
No te lo digo yo. Tú lo sab.
martes no hice nada más que pen para atrás, mientras la redondez otro.
tu corazón también. Yk Me enamoré como en las pelícu negra de tus pupilas miraba hacia sar en tí. Lo comprendo claramente: es ridículo y es cursi. AYa no era el redactor policiaco. también aquel muchacho que las. Cuarenta y ocho horas esca arriba. Luego apagaron las luces.
Me senti cronista social.
muy bien, que tiene una hora me averguenzo. Me aversas. Este amorcillo, que no llegó Por un momento te busqué inútil. guenzo de lo contento que estuve soberbia y se para mucho ese milagro lo hiciste tú. No esquina de tu casa.
a la categoría de amor, si toma mente hasta que me dolieron los durante cuarenta y ocho horas.
en cuenta el tiempo, es un ojos. Después fuiste apareciendo porque tú hay que decirlo yalo sabías. Te lo digo porque tal (f) RODOLFO QUIJANO.
Amor con mayúscula si nos dete tú. Primero fue el lazo diminuto me tiraste, con el empellón de tu vez, entre las pocas virtudes que nemos en la profundidad que te abraza la cabeza. Después mirada, a los tiempos en que yo aun me ha dejado la vida, está el Fue un amor Se me olvidaba; e que no tenía ex fueron las pupilas y luego todo el silvaba tangos mientras corría al agradecimiento.
tensión sino hondura. Como los contorno tuyo.
Liceo con los Te lo digc para que sepas que llete de lotería compré no cuadernos bajo el pozos que hay en mi pueblo. Ya ¡Toda tu!
tú, sin saberlo, hiciste añicos mi ne premio brazo.
te digo: tu no me conoces. Igno. Yo estaba abajo. Si. Yo era ras que durante cuarenta y ocho aquel. El de vestido aul. ReLAS DESENCANTADAS guntando cómo te llamabas y dón no vió la película.
SALARRUE Piedad para las débiles, piedad para las dulces extraviadas Eran allá como las tres de la que, por amor muchísimo, cayeron madrugada. La luna, de llena, lam del vicio en la penosa encrucijada; Por ISMAEL SILVA CHAIX bía las sombras prietas en los piedad para las tristes manglares dormilones. El estero, a quienes, inconscientes o sonámbulas, Un poeta antiguo de lagunoso en su calma, era como un arrastró el vendaval de los sentidos, escribió en la seda de un fino abanico pedazo de espejo del día; del día precipitó la tentación humana, versos tan hermosos, que el aire al rozarlos ya roto. La playa lechosa, de cashasta llegar a ser flor de placeres quedábase extático sólo por oírlos.
cajo crema, se dejaba espulgar por carne de alcabalas.
las suaves ondas espumiferas, que Habló aquel poeta la brisa devanaba sin prisa. La is.
Piedad! que si cayeron de amor, en la tela del regio abanico; la, al otro lado del agua, se alargaba como una nube negra que flo.
no fue por corrompidas ni por malas: por eso es que el aire se agitaba suave tara en aquel cielo diáfano, micayeron como caen las anémonas y apenas movíase para repetirlos.
tad cielo, mitad estero. Las estrepor azaroso vientos destrozadas.
llas pintaban en ambos cielos. El (La desnudez. el hambre. cuántas veces Pasaron los años. 1 mar, a lo lejos, roncaba adormilade su fatal caída fueron causa. Las letras borrosas del mensaje lirico do por la frescura del aire y la ¿No merecen, por Dios, las pobrecitas ya ni se leían por la acción del tiempo, claridad del mundo. Un cordón de una flor de perdón para sus faltas?
mas, al agitarlo, aves blan pasó, silencioso y onQue así como la estrella el aire solemne aún volvió a decirlos.
dulante como una culebra de luna.
pone su luz vivísima en la charca, De la mediagua oscura salió a la y el diamante jamás fue menos puro Ante la bi playa un indio. Llevaba desnudo antes que del carbón se emancipara, Tencia llena de el torso, los calzones arremar.
entre las infelices pecadoras gados sobre las rodillas; se des.
que marchitó la crapula, Hube de nacer, perezaba, como queriendo echar NON se cuentan bellas almas escogidas el fardo del sueño. La arena, al hube de vivir.
Una eterna aurora cendales tendía ser hollada por los anchos pies que, a pesar del baldón, brillan intactas!
descalzos, mascaba el silencio. Mi en cada minuto y en cada lugar; ró las estrellas con los ojos irunPiedad para esas almas sensitivas Ayer fue y las alas de oro de mi fantasia cidos. Se espantó los mosquitos, que, pudiendo volar, pliegan sus alas; tonio, un cruzaron las nubes de la lejania, miró el agua platera y regresó piedad también para la carne misera cántaros, por entre los cielos, la tierra y el mar.
al rancho.
que el vicio mancilló con torpe saña.
dan Rubén Son ya mero las tres, vos. El viejo cisne Hugo ma doña Hube de vivir. Nos vamos?
las abrazó en la gloria de sus cántigas; Norman hube de pensar.
Una especie de aullido de pepor algo el buen Jesús, el Gran Maestro, los brazos El sol, padre eterno de todas las cosas, reza le contestó.
Luego, la voz redimió y perdonó la de Magdala. ría de la remontándose iba por el cielo azul; atecomatada del compañero res Compasión para todas, para todas del Carmen y seguí hartos rumbos: fuerzas misteriosas pondió: esas desencantadas.
Para e lleváronme en torno del cardo y las rosas. Ai veya, mano.
ante cuyo dolor cae mi verso las rosas con alma, los cardos sin luz. Amonóos.
como una inmensa lágrima.
bienaventur Los indios, hurgando en la Hube de pensar, sombra del capdizo, escogieron ILDEMARO URDANETA ENFERMO hube de sentir.
los utensilios y fueron trasladán.
Miréme en el cielo de sus claros ojos dose al bote. El bote dormía, enSe encuenti y al mirarme en ellos me encendi y temblé; callado, mitad e nel agua, mitad fermo en la por ella los frutos se pusieron rojos, en la arena.
sahumaban los frescos y castos manojos iba y venía husmeando el viaje.
Hacemos cord y el beso soñaba con la fina tez.
Por efectos del silencio del agua. Ay! lector, aunque te asombres mejoría Pele de la luz, del cielo bajero, el mun con tan raros procederes, Hube de sentir, do todo parecía palpitar cabecear se han propuesto las mujeres EL BAILE hubimos de amar.
un barco en marcha. Los a votam como los hombres.
Color y fragancia nos dieron las flores, a cocuyos, despenicados en la in.
Sumamente mensidad, arrullaban la cuna de plumajes y trinos el ave nos dió, Yo bien sé por experiencia do resultó el la noche con su triste oieo, primavera el cielo, el astro esplendores, que en estos pueblos remotos, 12 de la nocl oíeo, oíeo. que sonaba intermiAbró en los quietud el remanso; y fueron mefores tente, como la paletada blanda con plata se obtienen votos Athletic Club.
la noche y el día, la estrella y el sol.
del remo que va, va, va. sin para cualquier Presidencia.
prisa y sin ruido.
Hubimos de amar. Ya va ser parada diagua, Los hombres que aqui se van por el Kit Ka hemos de morir.
vos.
hacia triunfos que perfilan.
un ruidos La gélida sombra menguará la llama. Ya paró, mano.
sus votos nunca los dan dos a los org que nos ilumina, la vida se irá. Aligere, pué. porque siempre los alquilan.
Samos much nunca más oiremos el ave en la rama, Desplegaron el bote a empujoa noche del ya no más veremos la luz que se inflama nes y pujidos. El bote coleó, li.
Yo que a la razón me asocio en cada lucero que brotando va.
bre, descantillándose tantito y resostengo con entereza, REGRESO volviendo la plata de la luna en que dar el voto es torpeza Hemos de morir, desparpajos. Hundidos hasta las cuando no se hace negocio.
El sábado hemos de triunfar.
piernas, aún empujaron. Luego del caballe se metieron dentro y se dejaron 10 y sus hij Seremos eternos, más allá de todo, llevar por el tranquilo del agua Las mujeres que se enfilen dos fuerzas, dos ansias, un himno triunfal.
parada. Era el cambio de marea; en las cívicas jornadas, Seremos dos astros errantes, a modo as corrientes que entraban al que no lo DEN ni a mentadas atento sal de dos ilusiones en la eternidad!
estero, fatigadas de ir buscanporque es mejor que lo ALQUILEN.
do mundo, descansaban un moManuel SEGURA Pasa a la pág. DOCE ANATOLIO VOLIQ, LUNES PAGINA CUATRO LA HORA LUNES 18 de Junio de 1934.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica CANTO DE ETERNIDAD APIOTECT NACIONA amigo de Un chucho priet. EL VOTO FEMENINO SE como fiesta que Noche Tropic 37 Tomás Ortuñ Castro de renovamo