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EL PACIFICO Periódico de Intereses Generales ADMINISTRADOR, PROPIETARIO CARLOS CLAVERA Ano IV PUNTARENAS COSTA RICA, DOMINGO 14 DE ABRIL DE 1901 475 Lectura del Domingo La vida fortuna; pero en cambic tenía yo de cas palabras, y aún recuerdo con sobra para los dos.
horror tan triste escena.
La víspera del día señalado para ni pobre madre la sacaron de consumar el sacrificio, no sé si de alli mis tres hermanas, que pocos la emoción natural en tales casos, momentos después volvieron a enTeoía yo veinte y tres años, una empecé a sentir un extrafio desva trar y me vistieroo, para colocarme necimiento en todo mi sér.
figura agradable y bastante diuero en la caja morturia con increible mano, Con estas condiciones la vuelta de paseo, un fuerte presencia de ánimo, pero olvidanpasaba la vida dulcemente.
wolor de cabeza se apoderó de mi, dose de cerrarme los ojos.
siendo vanos cuantos esfuerzos hice Fueron infructuosos cuántos meUna madre cariñosa y tres hermanas, constituían toda mi familia. para librarme de tan raro malestar. dios discurri, en tan duro trance, Entre las muchas amigas que fre.
Recuerdo que, estando al lado para hacer comprender, a los que cuentaban mi casa, se distinguía de Amelia, sentí de repente un me rodeaban, que aún vivía en este desvanecimiento y cai al suelo.
por su belleza una joven rubia, de mundo, pues mi cuerpo estaba más ojos azules, alegre y vivarucha, que pesado que una loza sepulcral.
Cuando recobré mis sentidos escon sus infinitas monadas y coqueDespués que salieron mis bermataba tendido sobre mi cama y ro nas y quedé metido dentro del aterías logró bien pronto trastornardeado de toda la familia.
taúd, entre cuatro blandones, pene.
me el seso.
Una ansiedad terrible se apode tró en la habitación mi bella pro ¿Por qué no confesarlo. Ameraba de sus semblantes y parecía metida con su prima. Me miró lia se apoderó de mi voluntad, de un modo tal, que pase de la categocomo si esperasen, con afán una con semblante indiferente, y cuanría de hombre libre la de esclavo importante respuesta de un señor do Estrelfa la dijo: may grave que estaba mirándome No te despides de él?
sumiso y obediente.
con marcada insistencia. Dicho Contestó aquella mujer ingrata: Bien es verdad que una sola son.
señor supuse que sería el médico. Para qué? Si aparenté querisa de sus labios llenaba mi alma Yo veía y oía perfectamente rerlo fue porque tenía dinero, y pade alegría.
En cambio, sn prima Estrella pa todo mi corpo estaba como si fue. Mi corazón no era suyo. cuanto pasaba mi alrededor; pero da más.
recía un poste.
Pálida, esbelta, ra de mármol, sin poder en absoluto Si en aquel momento me hubiese sin expresión en su rostro Siembacer ninguna clase de movimiento. podido mover, la estrangulo, de pre con la vista fija en el suelo.
Quise hablar y no pude. seguro. Qué desengaño tan cruel.
Nunca pude saber qué color tenían Ninguna parte de mi cuerpo obe. Bien pensaba quien dijo que la sus ojos ni cuál era el tímbre de su decía mi voluntad y un frío ex muerte es maestra de la verdad!
Su vista me ponía nervioso traño me penetraba basta los hue Estrella se qaedo para velarme y llegó a serme completamente reaquella noche. Estuvo durante larpulsiva las pocas veces que estuEl médico, después de un mogo rato arrodillada, rezando con vo en mi presencia.
mento en observación, me tomó el gran fervor, sin duda por mi salvaMis relacioues con Amelia mar.
pulso, entreabrió con sus dedos cion.
chaban viento en popa, y, quieras mis párpados, aprximó mis labios que no quieras, tuve que empeñar, un espejo, y volviéndose hacia mi Apesar del estado angastioso en por fin, mi palabra de casamiento madre y mis hermanas, dijo en to que me hallaba, no pude menos de Mi pobre madre, que no deseaba no sepulcral: sorprenderme al conteplar cómo otra cosa que mi felicidad, acogió. Este es asunto concluído; está resbalaban silenciosas las lágrimas con alegría quella boda que colmas muerto.
por el rostro de aquella mujer, que ba todos sus deseos.
Un miedo terrible invadió todo yo había tenido siempre por tau Mi futura no poseía bienes de mi sér al escuchar aquellas fatídi linsensible y fría.
Voz.
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