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EL PACITICO tesor al convicto y hacerlo útil a la sociedad después de su condena, sus guardiades totalmente le destruían toda ides do reforma y con su vengativo tratamiento lo borraban todo germen de mejor na turaleza que generalmente podría hallarse aun en los más viles criminales. bordo del SUCCESS Un convicto perdonado, después de probar su inocencia Prisioneros ciegos. Las tumbas en el agua. La mordaza negra. Cronica suelta La cadena interminable.
eran PARA MUESTRAS PEDIDOS. LA ULTIMA NOTA En estos días, vía Mata de Limón y por los empresarios señores Felipe Alvarado y Sajel Hoos, bap sido remitidos a San José 18 carros do mercaderías. ambos lados del castillo de proa que el Lord acompañante, se interesd las espaldas desechas y sangrando eran se ven aun las garitas de los centine en el caso, que hizo repetir. El resul so ntidis este suplicio para evitar Muy avanzados van ya los trabajos del las. En las torres de vigilancia había tudo fue la comprobación de la ino inflamación nuevo puente de madera que sobre el siempre dos hombres con rifles car. cencia del hombre, quien no solamente Río Barranca, construye en la Booa el El vestido estaba siempre marcado Ferrocarril al Pacífico.
gados para evitar cualquier atentado fué libertado sino también compensa con anchas flechas y números distinti de escape. Un buen número de cen do. Sin embargo, estos casos eran ais yos. El pelo se les tijeretemba a inter. Regresaron de San Jope don Teodoro tinelas se ocupaban en vigilar los lados y a largos intervalos, pues la ma. valos, y las piernas estab. siempre Ruiz y sa simpática chiquitina María presidiarios. Sus rechinantes mosque yoría de los altus empleados de penal bajo prisiunes La tragua entaba lujo ter, don Hector Esquivel y apreciable tes eran constante recuerdo de que de conmiseración.
cran duros e insensibles a las suplicas el castil o de proa, donde un convicto, familia, don Héctor Guevara Santos, Tohijo de Volcano, torjaba los grillos pa niente Coronel dop Félix Alvarado.
estaban alertas en caso de evación, y Existian sesenta prisi neros que ba ra sus camaradas, y los aseguraba con listo a apuntar bien y tirar al delin.
remaches calentados al rejo.
jo ningún pretexto se les permitiu ir a Partió para la capital doña Anita de cuente, según ordenaba la cláusula tierra. Sn único ejercicio y oportuni Los prisioneros de los pontones Maria Cristina.
Céspedes, en compania do 60 señorita hija VI de las instrucciones fijadas en el dad de gozar un soplo de aire fresco pueden decir cómo, cuando arbol mayor.
estaba restringido a una hora en cada transportados en una sola fila de un pasar Noche Buena al lado do su Al llegar a bordo un visitante era veinticuatro, en la que marchabin do lugar a otro. en cadenas, los más familia en Liberia salió la señora doma interpelado por el oficial de guardia proa a popa en la cabierta superior. débiles caían, y sólo los de com Mercedes Rodrignez de Cóspedes.
frente a la entrada de la cámara del Los excepcionalmente altos baluartes plexión fuerte podían aguantar las Comandante. Los guardas pasaban de les evitaban ver más que el cielo azul largas marchas hacia el casi impasable una cubierta a otra por medio de es australiano directa:n nte sobre sus oa interior. En Nueva Gales del Sur calas de hierro, colocadas vertical bezas y las blanche gaviotas volando iban una vez mil hombres en ila. La FABRICA DE GALLETAS mente, pero los prisioneros, embarasuavemente sobre el barco, pareciendo larga cadena pasaba por un anillo ata. LA NACIONAL zados por el peso de las prisiones cor mofarse de los prisioneros con sus pe porales, tenían que ser subidos y sadas cadenas La pernianencia en lado a cada individuo y cuando uno de escuridad les había arruinado la vis a estos cuerpos de encadenados se dei bajados en lingadas de cinco, a veces Gran surtido en lat frescas y La momentànea transición de sus ne.
dicaba para la reparación de caminos, peleando y discutiendo, pasando de considerábase suficiente un soldado exquisitas; mejor que las exgros cavernas al deslumbrante sol en la cubierta inferior a la principal por hora de suspensión de pevas, ba armado para cada ocho hombres, con tranjeras la escotilla de proa. El aparato en que ciales más efecto que la sensación ex instrucciones de vigilar que los hierros se les subía y la rueda y cabo que lo perimentada por un minero al sulir a no fueran limados y que los cerrojos manejaban existen a bordo.
la luz del día después de varias horas estuviaran seguros.
LUIS CASALVOLONE Para apartar completamente el de ро rmanencia en las entrañ. de la Cada una de aquellas celdas, si pu«Success» y evitar evaciones, se colo, tierra.
Agente exclusivo para dieran hablar, hablarían de alguna có a distancia de setenticinco yardas En estos paseos de comparative des sanguinaria matanza. Cada tornillo PUNTARENAS GUANACASTE al rededor de él, un cordón de boyas, canso, a menudo algúo prisionero del anillo tiene su recuerdo, cada cay cualquier persona que traspasara ese concebía gún atrevido plari de esca dena un capítulo de crueldad; hasta círculo sin el debido permiso o sin pe Difíeilmeut creían llegar al cor las mismas maderas que formaron el el santo y seña se exponía a ser ti dón de boyas, pero estaban n redu hogar de estos deslices humanos, año rada.
cidos a la desesperación, qne preferia tras año son estudiadas, con iniciales Solamente los presos de mejor com una tumba en el agua al tratamiento Una de las víctimas de El Pozo, DA portamiento eran confinados en las que recibían en aquel infierno dei y señales que hablan de tristezas pasadas. En la celda número 23 puede infeliz mujer madre de hijos pequeños, celdas de la segunda cubierta y salían océano Cuando alguno era cogido en aún verse el nombre de Harris y un su intanto, era in variablemente casti aun permaneco on Puntarenas arrima.
diariamente a trabajar en las canteras de donde salía la piedra para construir gudo, atándole a la cintura una bula diseño ordinario representando un buda. sin ropa con que cubrir sus carrer y la de sus pequeñuelos y sufriendo las de hierro de setentidós libras. Esta que.
el magnífico muelle edificado con tratorturas del hambre.
bola existe a bordo.
Una hora de ejercicio por día era De lo recolectado ha poco en Pantarebajo de convictos, así como también el rompe olas de Hobson.
Otro castigo consistia en vendar los todo lo concedido al preso del «hueco nns, en ropas y dinero, nada se le dió a negro. Si un visitante se permite ella; todo se envió a El Pozo, donde los En la cubierta del fondo se halla ojos fuertemente a los reos en ce colocarse por algunos minutos en que quedaron por ro propio gusto. cisban los caracteres absolutamente des. Bión, y parecía a las autoridades una aquel antro, sentirá una sofocación de pouen, cuando menos, de un pedazo de esperanzados, hombres considerados. ingenuidad intentar todas estas tortu plátano, en tanto que esta infeliz desamras para corromper el espíritu del con miedo, que le hará admirar la compaparada de los hombres, vive de lo poco como totalmente irreclamables, y que victo La mordaen negra consist. rativa tranquilidad conque aquellos que buenamente quiera darle la caridad de un pedazo de un pedazo de palo en criminales sobrellevaban su sentencia pública, nas. Aquí también existían las celdas una brida, cuyas tiras se hebillaban al y en una postura que era en sí un refiNo dudamos que el producto de lo recode los condenados a morir, en las que rededor de la cabeza y el cuello, y en namiento de tortura. Ha mbrientos, lestado haya sido distribuído cou equidad, pasaban el corto intervalo en un re. la pieza de la boca de le abría un pisoteados y abusados como eran, lo porn una parte debió dejarse aquí para cinto de oscuridad, que la muerte pa agujero para permitir la respiración. maravilloso es que tantos de aquellos aun las consecuencias del desastre.
aliviar las necesidades do quienes sufren recia más bien un alivio.
Uno de los guardianes a bondo del villanos soportaran tal martirio.
El Gobernador Latrabe acompaña. Success) en 1853 y que hace pocos Es posible que muchos de ellos es. Nuestro querido y particular amigo el do de un alto personaje visitaba una años vivía retirado en su evilla de tuvieran envilecidos; pero el trata culto periodista de Hyrme, viojo comvez la prisión para oir las quejas y Richmond, recordando las osouras me.
protestas de inocencia de un indivi morias de torturas confesó que la mor según pruebas rendidas al Gobierno, colega local El Correo de la Costa.
miento que habían recibido a bordo, pañero de labores en esta boja, ha sido duo llamado Keir, sentenciado a muer. daza se usaba en el «Succeas) y aña te. Junto con un guarda se dirijieron dió significativamente que daba el bre a la desesperación. Constante azoLo celebramos muy deveras y compli.
mos con el deber de felicitar al colega por a la celda del sentenciado, y sobre la efecto de obligar al prisionero a some tan valiosa adquisición.
que aparecía su nombre y las particu terse a la disciplina del establecimien te, prisión en el hueco negro y otros laridades de su crimen. La macisa to. Otro tormento era el baño obli castigos era a lo que se echaba mano Regresó el jueves de la capital nuestro puerta fué destrancada y abierta; el gatorio. en el que se echaba a los para producir reforma.
Amigo don Agustín Guido, Administrador Como ejemplo de ing Diosa crueldad so enojadizos, fra de la Aduada de Pantarenas.
Gobernador cautamente avanzó hacia penados rezongones o cita el caso en que, habiendo reducido las Por 6l nos hemos enterado de qne el la oscuridad, donde el acusado, de gándoles luego la espalda con escobi llones de mango largo lara asearlos raciones de los infelicos, en tiempo del depósito de gasolina que el Gobierno manrodillas, rogaba fervorosamente fuera tieno en este puerto, será trasladado al bien. El baño era una especie de caja Inspector Price, se colocaba la cocina cer librado de sus innerecidas torturas.
Presidio de San Lacas.
En su casi histérica oración se arrojó profunde, y las abluciones propinadas lorías, y empezaba a froir un hermosa po dazo de carne por la punta, hasta bermia los pies de Latrobe, abrazándose agradable una especie de bauprés ator nar, para qne el olor llegara basta las Cigarros La Turpinita las rodillas, por lo que el guarda lo pillado en el interrior de la caja. Se oldas biciera agua la boca a los poempujó brutalmente hacia atrás a la rellenaba para cada diez presos y tres bros que desde días no llevaban a no EXQUISITOS DELICIOSOS esquina de la celda.
tómago un pedazo de carne. Otro infer.
de los de la cubierta seguoda se roa bal gastigo ora el molino de pimentón, El Gobernador fuertemente ordenó: ban en la bomba que intoducía agua que lo movía como especial castigo, un Los de fama en Puntarenas Permita al hombre deoir lo que de salada para martirizar más al delin prisionero, cuya nariz y ojos safrían ho ua; lo oiré todo: El convicto, repues cuente. Cuéntase tambien de convicrriblemente con el polvo quemasbe. In QUE ES LO QUE HAY FRESTE to, contd su historia con tanta suerte, tos que después de ser azotados, con dudablemente se ve que on vez do opalLA IGLESIA?
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