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PRENSA LIBRE Cuentos del Domingo.
el recinto sin sol donde camina PRENSA LIBRE. blar la pólvora. Por desgra Derrepente la barricada se queII cia, con la Commune, como con dó en silencio, el último artillero Octubre el Imperio, los del Estado Mayor acaba de huir de ella soltando su Verticndo por el suelo de la ruta Domingo, 11 de Marzo.
no solían entrar menudo en postrer disparo.
El turco, por de su llanto la vena cristalina, en lóbregra capucha de neblina fuego. Fuera del servicio de su parte, no se meneó. Agazaemboza el viejo su cabeza hirsuta.
partes y de las paradas, el pobre pado y pronto saltar, caló baBajo la gasa que la tierra enluta turco pasaba el tiempo en la pla yoneta y se puso a la espera de como si fuese funebre cortina, za de Vendóme en los patios los cascos puntiagudos. La semeja vasta y pavorosa gruta.
model Ministerio de la Guerra en infantería de línea fué quién lleAl gemido que arroja su garganta, medio de aquellos campamentos gó. Entre el sordo ruido así desliza miserable Octubre EL TURCO DE LA COMMUNE. oído pasar bajo sus ventanas el rebaño de hombres que regresadesordenados, llenos de barriles del paso de carga gritaban los entre brumas fatídicas su planta: Como vencido en desastrosa guerra, de aguardiente, siempre en cata, ficiales: desEra un tamborillerito de tira ba rendido de cansancio y de toneles de tocino con las tapas. Rindete!
es un anciano que sus carnes cubre dores indígenas. Se llamaba armado; más tarde, los cañones con los grises harapos de la tierra, El turco tuvo un minuto de esKadur; procedía de la tribu del paseados, rodando desde la ma quitadas, francachelas al aire liSetbre. 1893.
bre en las cuales conocíase aun turpor, y luego dió JUSTO FACIO.
ñana a la noche; por último, el Djeudel, y formaba parte de aun brinco, todo el hambre del sitio. De con el fusil al aire.
quel puñado de turcos que se resomatén el bombardeo. toNOTAS NOTICIAS. Bono, bono, Francese. fugiaron en París con el ejército do esto, no comprendió nada masiado buen musulmán Kadur del general Vinoy. Había he más sino que continuaba la gue para tomar parte en aquellas orEn su inteligencia de salvaje, cho toda la campaña, desderra y que iba poder batirse nue gías, apartábase de ellas, sobrio figurábase vagamente que aquel Hemos visitado el estudio del inteWissemburgo hasta Champigny, vamente. puesto que estaban cu y tranquilo; hacía sus abluciones era el ejército libertador, el del ligente artista Valiente y nos complaatravesando los campos de bata radas sus piernas. la postre en un rincón, hacía su alcuzcuz general Faidherbe el del gene cemos en manifestar, que admiramos lla como ave de tormenta, con salió, con su tambor la espalda, con un puñado de sémola; luego, ral Chancy, quienes de tan lar mucho la vista de sus obras, el gusto estético que se vé en ellas y el coşus sonajas de hierro y su derbu en busca de su compañía. No después de tocar un ratito el dergo tiempo atrás esperaban los paka (tambor árabe. tan vivara tuvo que buscar por mucho tiem buka, se arropaba en su alquicel risienses.
jorido que estudia siempre con tanta Qué feliz era y cócomprensión.
cho, tan inquieto, que las balas po.
Unos federados que pasa y se dormía sobre unas gradas mo se reía carcajadas. enseñánde piedra, al calor de las fogatas doles toda su blanca dentadu dad un hermoso cuadro que le ha siPrecisamente trabaja en la actualino sabían donde alcanzarle. Mas ban lleváronle consigo al godel vivac.
cuando vino el invierno, aquel bierno militar de la plaza. Desra!. En un abrir y cerrar do encargado de su patria colombiana pequeño bronce africano, enro pués de un largo interrogatorio, Al amanecer de un día del de ojos tomaron la barricada. y ojalá que este notable artista exhijecido al fuego de la metralla, no como no podían sacar de él en mes de mayo, despertó al turco Rodeáronle empellones. biera esa obra tan espléndida antes pudo soportar las noches de limpio otra cosa sino algunos un horroroso fuego de fusilería. Aver tu fusil. de enviarla, para que la sociedad jograndes guardiás, la inmovilidad bono be ef, macache bono; el El ministerio era presa del páni. Su fusil estaba caliente toda sefina y especialmente los amantes del bello arte de Rafael y Miguel Anentre la nieve; y una madrugada general de día acabó por darle co: todo el mundo echaba co vía.
Aver tus manos!
gel, tengan una vez mas ocasión de de Enero recogiéronle orillas diez francos y un caballo de óm rrer, huyendo. Maquinalmente del Maine, con los piés helados, nibus, y le agregó su Estado hizo como los demás, montó Sus manos estaban negras de admirar la habilidad del señor Vayerto de frío. Permaneció mu Mayor.
caballo y siguió al Estado Ma pólvora. el turco se las ense liente.
Las calles estaban llenas ñó con orgullo, sin cesar en sus El cuadro que aludimos, es una cho tiempo en la ambulancia, En aquellas escoltas de la Com yor.
Allá le ví por vez primera. mune había un poco de todo: de cornetas despavoridos, de ba. risotadas. Entonces le empuja bellísima imagen de la Virgen del Rosario, de tamaño natural, ejecutaTriste y sufrido como un pe chamarretas rojas, mantos pola tallones la desbandada. Esta ron contra una pared, y púm.
da con la maestría y buen gusto que rro enfermo, el turco miraba en cos, casaquillas húngaras, blusas ban desempedrando y haciendo Murió sin haber comprendido caracteriza al insigne artista de quien torno suyo con sus dulces ojos de marinero y oro, terciopelo. curría algo extraordinario.
barricadas. Es evidente que o nada de aquello.
tanto se ha ocupado ya la prensa de muy abiertos. Cuando le ha lentejuelas, galones. Con ALFONSO DAUDET. nuestro país y también la extranblaban, se sonreía y mostraba chaquetita azul bordada de amaConforme se iban acercando al jera.
șu dentadura. Esto es todo lo rillo, su turbante y su derbuka, muelle, la fusilería era más perMNO Del último número de Guatema. que, podía hacer, pues nuestra el turco acabó de completar la ceptible y mayor el tumulto. En la Ilustrada, reproducimos la comlengua le era desconocida, y mascarada. Contentísimo de verel puente de la Concordia, Kadur la señorita posición poética que lleva por título HIMNO.
duras penas hablaba el sabir, se en tan buena compañía, ébrio perdió de vista al Estado Mayor, María Pontón de Arce.
Un jerga francoargelina, compuesta por el sol, el cañoneo y el tráfa poco más lejos le quitaron su caballo: era para un individuo de Adorable y gentil hermosura Acaba de llegar una Compañía de de provenzal, de italiano y de go callejero, con aquella batahoképiz con ocho galones, quien cual de Milo la Venus idéal; gimnastas y equilibristas, titulada árabe, formada por palabras cam la de armas y uniformes, y per Compañia Franco Mejicana, dibiantes recogidas. como conchas suadido además de que continua curría en el palacio del Ayuntaapremiabá mucho ver lo que o en tu rostro de nívea blancura rigida por Mi. Jeovanis. El elenel carmín de la rosa fulgura co lo forman nueve gimnastas, casi en las costas de los mares lati bà la guerra contra Prusia con miento. Furioso el turco, echó con fulgores de luz sideral.
todos mejicanos, entre los cuales figuun no sé qué más vivo, más li lá correr con dirección al sitio del ra Margarira Jeovánis, que es una céKadur no tenía más que su bre, aquel desertor inconsciente combate.
Yo te admiro, mujer peregrina, lebre contorsionista y Julio Perea, distraerse.
Mientras corría iba De modesto clown de indiscutible métomó parte del modo más sim armando su fusil Chassepot por la magia que encierra tu voz; rito.
tarde en tarde, cuando se abu plón en la gran bacanal pari y diciendo entre dientes: Macaty garganta es una arpa divina Ayer dieron su primera función en rría en extremo, se lo llevaban siense, y tuvo una celebridad mo che bono, Brusián. pues paque las almas subyuga y fascina Alajuela.
En la próxima semana los tendresu cáma y le permitían tocarlo, mentánea. Por todas partes a ra él eran los prusianos quienes y las lleva otros mundos de amor. mos en la capital.
pero no muy fuerte, causa de clamábanle los federales y le acababan de entrar. Silbaban ¡Oh inefable beldad hechicera.
los otros enfermos. Entonces su festejaban al pasár él; la Coma Hemos recibido una hoja suelta, ya las balas en torno del obelis En tu frente de diosa quisiera pobre fisonomía obscura, tan des.
en la cual el señor don Rafael Pomunė estaba tan orgullosa de co, entre el follaje de las Tulle un laurel diadema ceñir. lucida y macilenta con la claridad rras invita a los devotos de San Franposeerle, que hacía ostentación rías. En la barricada de la calle cisco de Paula, lo mismo que al cueramarilla y rimarte una estrófa que fuera el paisaje de invierno de ello, lo pregonaba, lo llevaba de Rívoli unos vengadores de po de albañiles, para nna rifa que que ascendía de la calle, animá guisa de una escarapela. Vein Flourens tus plantas cantando morir.
tendrá lugar hoy a las 10 a. en el le llamaron: Eh, base, gesticulaba, barrio de San Francisco de Mata ReSan José de Costa Rica, 1893.
seguía todos los movimientos de su ritmo. Ya la Comandancia de la plaza al te veces al día le enviabán desde turco, turco! Eran sólo una dodonda, con el fin de allegar fondos para la construcción de los cimientos brillaban sus blancos dientes con Ministerio de la Guerra, al Pacena, pero Kadur valía por todo del templo que se está construyendo una sonrisa feroz, bien humeun ejército. en esé barrio.
decíanse sus ojos al tañar alguna habían dicho tantas veces que da, altivo y chillón como lacio de Ayuntamiento. Les De pie en lo alto de la barricaAbril alborada musulmana; ensanchaHoy, medio día, se verificará en sus marinos eran simulados y bandera, batíase dando saltos y Oh! viajero gentil: con mansedumbre, el kiosko del Parque Central, el sorteo ba las aberturas de la näriz, y sus artilleros fingidos. Por gritos, bájo una granizada de mede la Lotería del Hospicio Nacional entre el pesado olor de la am lo menos, éste era un turco de trallá. Por un instante, entre sobre tus hombros sonrosados posa de Locos, correspondiente al mes en bulancia, en medio de redomas verdad. Para convencerse de ello dos descargas de cañón, descohermoso manto de arrebol la lumbre, En la Tesorería de la Junta de Cay còmpresas, le parecía ver débastaba mirar aquella vivacidad rriósé un poco la cortina de hu. En el ambiente claro de la cumbre ridad depositados 8, 530 00, nuevo los bosques de Blidah lletejido con mil átomos destinados para el pago de los núnos de naranjas, y las moritas pizpireta de mono joven, y todo mó que subía de la tierra y le polvo multicolor de mariposa meros premiados.
el salvajismo de aquel cuerpeci permitió ver en los Campos Elisaliendo dei baño, con blancos agitas en brillante muchedumbre.
velos por antifaz, perfumadas con llo al agitarse sobre su caballazó seos masas de tropas con pantacon los caracoleos de la fanta lones rojos. En seguida todo Tú resplandor eglógico pregona La Com pañía Cómico dramática verbena.
el triunfo de lo verde que corona que dirije el señor Alcón, ha dado Así trascurrieron dos meses.
volvió presentarse confuso. la cima tropical de lauro nuevo; en Alajuela una representación.
En estos dos meses, París había Sin embargo, para la dicha de Creyó haberse engañado, y sino estamos mal informados, allí se Con anhelos de nubil desposada puso en escena La Pasionaria, orihecho muchas cosas; pero Ka Kadur faltaba una Hu guió haciendo disparos más ginal de don Leopoldo Cano y Madur no lo sospechaba. Había bierà querido batirse, hacer ha mejor con su fusil.
tus lujuriosos ósculos de efebo.
sas.
su nos.
derbuka para EMILIO Pacgeco.
una con sus dedos hieráticos de diosa curso.
rosa, Išía.
Si cosa.
siente naturaleza enamorada Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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