BEGTURA PARA EL DOMINGO JADO LA SOLEDAD OF Salve, ftranquila soledad augusta, Dulce consuelo del que sufre y calla, Angel que cruzas con quietud el mundo, Ainiga del misterio y de la calma! ti se acoge el pobre miserable aquel que siente torturada el alma; Te bendice el que goza y el que sufre, ambos te ofrendan, soledad, sus lágrimas.
Tú no naciste en el bullicio insano Que entre los hombres sociedad se llama, Ni entre la pompa de salones regios, Donde los vicios con el oro hermanan.
Sólo se te halla en las humildes grutas Que se entapizan con la fresca grama, Donde destila tembladora gota Que nace, brilla, y al caer acaba.
Entre los bosques, corpulentos árboles Arcos te forman con sus verdes ramas, verse templos en que son columnas Los rectos troncos de robustas palmas.
Tras de los velos que la niebla extiende Cuando la noche viene la mañana, Te dan perfume las silvestres flores, Que nadie aspira en la feraz montaña.
Es el silencio el himno misterioso Que en tus altares en tu honor se canta, el rumor leve de arroyuelo humilde, el ronco trueno de la gran cascada.
También te arrulla suspirante brisa Cuando a las flores con su amor engaña.
Cuando retoza con las hojas secas, Cuando sus quejas le refiere al agua.
Todo es solemne donde tú te encuentras, Sea en la choza infeliz barraca, en el palacio que ruinoso oculta Entre la hiedra su perdida fama. eres más grande, soledad, si vienes Cuando la luna con quietud derrama Sobre la tumba y la ciudad dormidas Tristes reflejos de color de plata, Cuando el Vesubio conmovido arroja De entre su seno la tremenda lava, cuando herida por su luz de infierno, Su faz la luna tras las oubes guarda.
Tú das la pompa y majestad severas esos desiertos que océanos llaman, Donde lo grande, lo profundo, inmenso, Deja extasiada con horror el alma.
Del Chimborazo en la nevada cima Sólo la huella de tu pié se estampa; La sombra veces del condor andino, La majestad de Dios, después. la pada. Se agita el hombre por hallar un límite Del ancho espacio en la región callada, allá en lo vácuo, lo infinito, aéreo, Más te contempla cuanto más avanza. atrás dejando el astro que en la noche Su luz tranquila por doquier derrama, Allá te admira, que la sombra eres Del Dios increado que animó la nada.
El triste amante que en ausencia llora Busca el desierto donde todo calla, allí pronuncia el adorado nombre Que entre su pecho con sigilo guarda; en tí confía, soledad divina, en tu presencia de su amor ensaya La triste queja y sus dolientes gritos, Vertiendo veces quemadoras lágrimas. Cuántos secretos poseerás tú sóla De esos que ocultos la tumba pasan, cuya historia para todos muerta Nos desgarra de dolor el alma. cuántas veces lastimado en lo íntimo Por brazo aleve que asestó mansalva, Como la cierva que al sentirse herida Corre los bosques lamer su ilaga, Corro ocultarme en el querido albergue Donde mi esposa con mi hijo aguardan, allí entre halagos en silencio arranco La espina aguda que clavó la infamia. me escuchas los supremos ayes Cuado la pena el corazón desgarra, Que sabes los secretos de mi vida, Que oculta, triste, y en silencio pasa; No me abandones eñ la tiimba, amiga, No quiero gloria. Para qué desearla. El recuerdo sincero de los míos tu sombra en mi huesa. eso me basta!
LA PRENSA LIBREPADRE HIJO Salió un homlire de las filas y eché andar para la alder. para se aproximó. Era cl mismo que mi casal. Ileguć. cra mis de me sufriera un reproche de Duclos. dia noche entré en ella, mc paré en El Emperador quería tomar a Tímido, andaba inclinada la ca medio y llamé muy bajito. Marii Ratisbona.
beza, molestado por una herida ja. ch. Marujal. nada, nada pasaban revista a las tropas cía sus ojos, lo cual le obligaba a llorar, inc sente en el suelo y pegue Sus generales, antes del asalto, en la frente, çuya sangre obscurc más que el canto de un grillo cu un Uno de ellos, creado barón del enjugarla continuamente con la crél con la mano diciendo: Imperio en Eckmuhl, era un joven mano izquierda. Llegado al ceni. Ah vientre hambriento, te la de unos treinta años, afable en el tro del cuadro, presentó armas, has tragado; trágame mí también!
vivac, severo en la marcha, buc y el barón Duclos, pálido, ordenó: María. Ay, María. repitió no con sus soldados. Llamábanle. Batir tambores. con cnroquecida voz.
Duclos, mejor aún, el barón Treinta cajas percutieron a la sin soltar las riendas de cuerda, Duclós. Examinó desde luego vez un sólo golpe. El soldado se se enjugó una lágrima con su guante de cuero, la sacudió de soslayo, ugasus granaderos, antiguos vete estremeció, ebrio de felicidad.
chó los hombros y no pronunció ranos que habían visto las gran. Estuviste en Egipto, pre una palabra más.
des jornadas de Arcola, Rivoli, guntó el Emperador. Al bajarine del trinco lc dí bucija Castiglione, las Pirámides, Aus. Sí, señor.
propina: saludóme hasta el suclo, terlitz! Cuando llegó frente a tu cruz?
quitándose la gorra con imbas malas líneas, el general saludó al Ganada en Lodi.
110s; volvióse, y tomó un cansado Aguila y abrió sus filas. Du. Bien, repuso el Emperador. trotccillo sobre la helada sábana de clos avanzó, en tanto, seguido de Cumplid, Duclós.
la caile desierta, invadida por la su estado mayor, El general se aproximó las bruma gris del frío de Enero.
Así pasó su revista la prime tropas y con su voz de batalla, Botellas de barro, ra fila.
grito. El general conocía a todos sus. Granaderos y tambores! des para agua. Varias fcrmas.
hombres; contaba de treinta a de hoy reconoceréis como cabo de En la ferretería de MIQUEL MAÇAYA cincuenta años y los generales se escuadra al soldado Miguel Dubatían para tener á, sus órdenes clós, llegado el primero Ratis Filosofía a aquellos viejos que hacía veinte bona y herido en la frente, y le años esperaban la cruz y tutea obedeceréis en todo cuanto os ban al Emperador.
mande en bien del servicio y eje De sabios y profundos pareceres, Según muchos autores ti te vi en Mont Thabor, di cución de los reglamentos militaLa tierra brota flores ljo Duclós.
res.
Porque viven en ella las mujeres. Sí, mi general, era usted capi Redoblar tambores. esas hadas divinas tan.
Después, se apeó, abrazo al gra Deduciendo con lógica y conciencia tú furriel de Austerlitz. nadero, y se við llorar los dos.
Hacen brotar cspinas veces, Duclos enderezaba Barón, preguntó el Empera Con clara y precisa consecuencia.
una gorra de pelo. En mitad de dor. por qué ese valiente era Pero es el caso que ellas. la luz de sus ojos, la cuarta fila, detuvose enfrente simple granadero. Sólo nos hacen ver las flores bellas de un hombre, inmóvil le con. Lo ignoro, señor. Sinembartempló.
go, había tomado su retiro desde sagaces. ocultan sus ahrojos.
Por eso hay que fijarse.
El hombre era viejo. El gene la campaña de Italia. Yo le acon Al buscar sus encantos seductores.
ral, indiferente, contó los boto sejé el rcenganche. Puede heririne Si al dolor de punzarsc nes, manejó las armas, miró al una bala, y al menos, le tendré Igualará el aroina de las flores.
soldado de piés cabeza: mi lado. ZEGARRA BALLOX. Poca limpieza. dijo. Le conocíais ya. Arequipa, 1890. con el dedo indicó en la carEs mi padre.
tuchera una mancha de barro.
PEDRO BOXXEFOXT. EL CANAL. Por qué no te conformas con la Ordenanza. Tienes la honra DE de ser legionario y te presentas EL ALMA NICARAGUA con barro. Palideció el hombre; abrió la Diál. OGO ENTRE ABUELA NIETA. He aquí los juicios que emite boca para hablar; sus manos El Liberal de Madrid, sobre temblaban. Pero Duciós, conti. Abucla, perdí la calma.
la determinación del Gobierno nuando la revista, estaba ya lecuando mi perro murió. Habrá ido al ciclo?
americano de realizar la apertujos.
Hija, nó; ra de dicho canal.
los perros no tienen alma.
Nada tan curioso dice. ni Dió el tambor la señal de. ata. esa madrastra que iní tan triste para España, sobre que. Las escalas. llevadas para cuya túnica se echan suertes, me pega y me reconvicdc, asaltar la vía yacían en tierra. tiene alma?
como los estudios y observaciones Habiendo pedido Lannes 50 Sí que la ticne. que hacen con tal motivo los hombres para plantar estas esca ¿El perro nó y ella sí?
ingenieros, los políticos y los Pucs ¡ay! mi corazón no llega las, presentáronse 500. Mas, ahombres de negocios de la Gran entender, abuela mía, Bretaña.
penas salidos de la granja que les por qué el perro me quería guareciera, los cincuenta primeEse canal, cuyo proyecto ideami madrastra me pega!
ros fueron cincuenta cadáveres.
ron los españoles en 1528, y de Otros 50 cogieron las escalas JUAN PÉREZ ZLSIGA.
cuya ejecucion no volvieron acuicorrieron a los muros. La metradarse en cuatro siglos, está pro Ha los barrio.
Baúles de metal, duciendo en el Reino Unido risiMoraud volvió la cabeza: varios tamaños. En la ferretería de sima alarma; siquiera allí los Duclos, exclamó, llamad MIGCEL VACATA. partidarios de la alianza anglolos de Austerlitz!
americana lo conceptuen muy. Soldados de Hoenlioden, de ventajoso desde el punto de vista MARUJA estratégico.
Iena. Granaderos de Eslau y de Friedland. permaneceréis in.
Será, según dicen estos últimos, POR IVAX TOERGIEXEF.
móviles ante el enemigo. Sóis un nuevo camino para las Indias, franceses, el Emperador os consiempre amenazadas por la maltempla, y es preciso tomar esa Petersburgo, acostumbraba, al 50 concepto, nada mejor sino que Hace tiempo, cuando vivía en San querencia de Rusia, y en tal plaza! Ninguno de los regimien mar un trineo de alquiler, emprender esté en manos de una potencia tos se movio: solo un granadero conversación con el cochero.
salió de las filas.
Me agradaba en especial charlar aliada, cuya lengua y cuyos idea.
les no difieren de los de la MetroDuclos palideció.
con los que hacen el servicio de nopoli, E¿Nadie seguirá ese valien che, pobres labriegos de las cercate. dijo.
nías, que vienen a la capital traPero los comerciantes y los No le quedó tiempo para prose embadurnados de ocre y tirados por otra manera: yendo carricoches de mala muerte, economistas discurren de esta guir. Los regimientos lanzáronse un jamelgo, ganar el pan. la ren Gracias al canal, una vez que impetuosos.
ta para el amo. gritó El viejo granadero disparaba les.
se abra la navegación, los EstaCierto día llamé uno de estos ta dos Unidos se hallarán de 1200 Era un mozo de veinte años, 1900 millas más cerca yá su fusil en la cresta de las mu fornidu y robusto, de azules ojos de los rallas. Comenzó la danza enton colorados carrillos. De su remenda puertos septentrionales de la Chices, y las tres horas, los cañones da gorra calada hasta las cejas, se pa, la Corea y el Japon, que Inaustriacos enmudecieron. la pla escapaban las sortijas de su rubio glaterra; 2700 más de los puerza estaba tomada. General, dijo el Emperador cubría duras penas sus anchos Sur; 1300 de Melbourne, y sobre.
Duclos, formad el cuadro. Cuál unos 3000 de la Nueva Zelandia.
Parecióme que el bello rostro imes vuestro efectivo?
Podrán, pues, cstablecer una berbe del cochero estaba triste y comunicación mucho más directa Unos 500 hombres. mis sol sombrío; charlámos, y noté que su dados son los que más han su voz resonaba dolorosamente.
y rápida con quinientos millones frido. Cómo tan triste, hermano? le de habitantes del Celeste ImpeNapoleón dijo en voz baja al pregunté. Tienes alguna pena. rio, del Japón, de la Australasia, gunas palabras al general. Al pronto no respondió: de Malasia, del Ecuador, del. Si, Barino, tengo pena. dijo Perú y de Chile.
al cabo. una pena tan grande que Esto implica una formidable Las tropas habían presentado no hay otra como ella; se me ba rivalidad para los hierros, para armas, siguiéndose un solemne muerto mi mujer.
silencio.
Según eso la querías mucho.
los algodones, y en general para toda la industria inglesa, que aAllí estaban los que el general El mozo, sin volverse, agachó la cabeza, hora parecía destinada a un ehabía revistado por la mañana. Barino, là quériá. Vá va cumplir norme desarrollo, merced a la deno ya brillantes como en la para el octavo mes y no puedo olvidarla. manda creciente con que solici.
da, sino sudorosos, ensangreatà Es una cosa que me roe aquí en el co tan aquellos pueblos los producdos, heróicamente bellos. Pase6 razón, y acabóse y yo no entiendo tos naturales y manufacturados su mirada de escuadrón escua por qué se murió: era joven y sana. de la civilización occidental.
drón, y de improviso, la espada En veinticuatro horas se la llevó el Inglaterra, pesar de ello, sien alto, habiendo encontrado sin cólera gue más que nunca inclinada a duda lo que buscaba. era buena tu mujer. En nombre del Emperador. Ay, Barino. suspiró honda estrechar la alianza con sus antigritó el General. Avance el sol mente el pobretín. éramos tan ami guos colonos, y en esa tendencia, iniciada por Chamberlain yan dado que ha subido primero a la Desde que supe aquí. pues. doptada por los conservadores mural a. Ique la habían enterrado, al momento históricos de lord Salisbury, Tu que DAVID GUARIN.
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