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EL DIA do padre.
10. EL DIA DOMINGUERO escondiese Ud, las piezas de en de encajes que pertenecen 18. les el espiritu pàllico parecia co.
cnje bajo su bábito, en la seguri tas señoras.
mo aletargado no tanto en el cam dad de que nadie habrá de atre. Veo que está usted de bro po de la política en el cual no ULTIMA RIMA verse registrar una persona ma exclamó el aduanero lan tengo la intención de entrar, co.
revestida del sagrado carácter que zando una carcajada. Pase usmo en todo aquello que el bien Ud. ostenta.
ted, pase usted estar social del obrero correspon Todos los viajeros se echaron a día. La crisis tremenda quitán Préstenos Ud. este servicioYo he soñado en mis lúgrubes noches, reir, y los encajes entraron en donos el trabajo empezaba a po exclamó la rubia y, al salvaren mis noches tristes de penas y lágrimas, Francia sin pagar derechos, en ner delante de nuestros ojos te.
nos del apuro en que estamos hacon un beso de amor imposible, medio de la general algazara prorríficas visiones así como en es rá Ud. una buena acción.
movida sin sed y sin fuego, sin fiebre y sin ansias.
por el chiste del reveren trechos callejonos sin salida y dia Las dos viajeras se habían ahubo en que muchos de nosotros Yo no quiero el deleite que enerva, cercado al fraile, que cercaban El fraile no había mentido.
llegamos pensar seriamente en el deleite jadeante que abrasa, contemplándole con miradas suRIOARDO MONROY la emigraci y hasta en otros plicantes y cargadas de efluvios y me causan astio infinito dislates no avioando vislummagnéticos los labios sensuales que besan manchan brar auxilio alguno que legítion. Ah señoras. dijo el cligio Mística mente pudiéramos implorar. Oh mi amado, mi amado imposible!
Pero de propto una voz patrióMi novio soñado de dulce mirada!
Lo que Uds, me piden po tietica se deja oir clamando en fa Cuando tú con tus labios me beses, ne que ver con mi sagrado Mi. Por JUAN RAMÓN MOLINA) vor de los trabajadores y una loz nisterio. Por lo tanto me es im bésame sin fuego, sin fiebre y sin ansias.
brillo ante nuestros ojos ense posible acceder sus deseos.
En los brillantes candelabros ñándonos un sendero hasta en Dame el beso soñado en mis noches, de plata, los cirios de cera páli tonces desconocido para casi to Aún admitiendo que mi carácen mis noches tristes de penas y lágrima da formaban como un bosque ar dos. Surgió desde el laborato ter pueda evitar un humillante y que me deje una estrella en los labios penoso registro ter dría que hacer monioso, donde forecían las lla rio de los grandes ideales la Li y un tenue perfume de nardo en el almal una declaración que no podría mas semejantes rosas de fuego ga de los obreros y desplegó ai prestar sin me lo que es lo El órgano sollozaba, se lamenta aire una bandera redentora en la JUANA BORRERO. mismo, sin co ter o pecado ba, gemía larga, ronca, profunda cual vimos escrito: El voto mortal. Cuando aduanero me mente, enviando eu música grave del obreros, para el obrero.
pregunte si llevo algún objeto de bajo los arcos de piedra del temEsta fué la mágica palabra que El contrabando declarar, contestaremos con aire pago. qué quieren ustedes que plo del Señor. Sobre el altar, en de improviso abrió hermosísimos de indiferencia, pero con mucha le contests? si al menos ha la eminente cúpula, en un fondo horizontes para los afligidos trade azul constelado de astros de bajadores.
En un coclie del tren expreso amabilidad: No, señor, nada, biese algún medio de evitar la absolutamente. oro, los Padres de la Iglesia alade mentira.
de las siete de la mañana, proceYo no sé qué misterioso en.
pasamos dente de Bruselas, hallábase un lante, como si tal coga. Sea usted misericordioso y los brazos y los ojos al cielo, en qué poder sublime viere ella zaban, en una beatitud extática, canto encierra esa frase, yo no sé. sin nos dejan pasar. caritativo, y sáquenos del apuro ademán de implorar la bondad unido, pero es lo cierto que ha beviajero y dos viajeras. El viajero era un fraile muy grueso, de pregunta la rubia. si los adua en que nos hallamos!
neros nos registran, en uso de su del Omnipotente. En el fondo cho saltar de entusiasmo los corostro encarnado, de luenga bar Denme ustedes meditar un del altar, en un círculo de gneru razones abriéndose la esperanza derecho, y nos llevan a la cárcel rato y consultar con mi concien bines de rosa y de ángeles blon de un porvenir menos inseguro.
ba, y de ojos vivos, que brillaban tras de unas grandes gafas.
como ladronas. Qué horror, cia.
Dios mío, qué horror. dos, en una apoteosis de palmas Bendito el momento en que tal El buen hombre había cruzado El fraile cerró los ojos y cruzó de plata y de pendones místicos, principio quedó consignado en sus manos sobre una panza que fianza repuro la morena un tan majestuosa pansa. Lo principal es inspirar con nuevamente sus manos sobre su en un incendio de luces y de res el programa de la Liga de Obrese dibujaba perfectamente bajo el to alarmada por las observaciones plandoren, estaba la Virgen Maros Compafleros de trabajo hábito de pano burdo, ceñido por el talle con una cuerda, y, tranEl tren iba a llegar pronto a ria, atravesado el corazón por un Obreros todos de Costa Rica, vede su amiga.
quilo y satisfecho, dejábase me. Dos muchachas elegantes co.
la frontera y no había tiempo puñal resplandeciente; y sus id; venid presurisos a formar in pies, en las primeras gradas de mensa falange en derredor de esa cer por el rumor de las ruedas, o nosotras, que no tenemos nada que perder.
de venerables, no podemos inspiA los pocos instantes exclamó la capilla, veíabae las ofrendas, bandera. venid, sostengámosla como disponiéndose la conciliar rar confianza los aduaneros. el fraile, como iluminado por las coronas de laurel, los ramos todos con nuestras manos cayosas el sueño.
de esmalte, todo un jardin irisado pero honradas: venid echar los En los rincones opuestes esta Además, tengo la seguridad de una idea repentina. ban rentadas dos mujeres muy que vamos a echarnog temblar, Dénme ustedes lus encajes y artificial; y más abajo, sobre las cimientos del gran edificio de la frías baldosas, y más allá, bajo República, de la soberanía del elegantes, una de ellas morena y puesto que nuestra conciencia disy sea lo que Dios quiera. tará mucho de estar tranquila en La morena entregó varios pa la otra rubia. Pero al las arcadas, en la claridad de los pueblo, y del justo y legitimo in parecer, quetes al religioso, el cual se le grandes puertas, estaban humil terés de clase.
Diog zaban de la paz del alma el momento decisivo.
demente de hinojo los ancianos La patriótica simiente ha caido que saborcaba el buen fraile. Las. Pues en ese caso, lo mejor vantó el hábito y los metió en creyentes, las viejas devotas, los en férul terreno: ella ha germi dos estahan sunamente intran será echar por la ventana los en una especie de amplio bolsillo.
El tren empezaba a moderar niños y las niñas pensativos, la bado vigorosa y lozana, noso quilas. Venían de ver al prín. cajes.
numerosa grey, el rebaño místico, tros nos toca cuidar ese árbol, re Eso nunca.
su marcha.
cipe! Urdían acaso alguna constodos los fieles a las banderas de La morena miro cara cara al. Quievrain! gritaron los empiración bonapartista y contenían Cristo; y por sobre esa multitud darle del huracán para que libre gar su pié, podar sus ramas, guar sus maletas documentos compro.
fraile, al que luego se acercó y le pleados en adoración, luego que calló el Quievraini.
metedores? Nada de eso.
cresca fecundo hasta cobijar con órgano y que pasaron los rezos y la sombra benéfica de sus broles vaban París varias piezas de so Reverendo padre.
Todo el mundo bajó de los co las letanías, volaron dulcemente, todo el querido país que se llama Señorat berbios encajes que deseaban paches para la vista de la Aduana. alzándose lo lejos como una. Pertenece usted una orden Detrás de las dos jóvenes iba el bandada de alondras, los cánticos Corta Rica sar de contrabando El día antes de salir de Bruse religiosa que ordona, sin duda, fraile. caminando tranquilamente de un coro de vírgenes, cánticos las habían visto en una tienda va que en el mundo hay que ayu y con aire de indiferencia.
claros, puros, cristalinos, que bi NOTAS rius ejemplares de las magníficas darse los unus los otros. Tiene usted algo que decieron extremecerse de labores que se fabrican en Mali Amarás al prójimo como ti clarar preguntó un aduanero viejo templo católico, como si buBODA nas y no pudieron resistir a la mierno cortestó gravemente el la morena.
biesen resucitado los buenos tiem teutación de comprar algunas fraile. Nada contrató ésta pos en que la Fe terrible fortale. Tomamos y traduciinos de El pieza, cuyo inipoite no dejaba. Creo, reverendo padre, que Absolutamente nada anació las almas de los hombres. Demócrata, periódico de la Ciu: ce ser bastrnte crecido, podria Ud. pr stardos un gran Hió la rubia.
dad de Effingham e Illinois Es.
Mas para que la adquisición rv cio. Ha. Ud. vuestra Las dos jóvenes bablaron en tados Unidos, lo siguiente, que se fuese verdaderamente vent jos uversación ac los enca tal tono y con tal seguridad, que EN LA REUNION rrfiere a un costarricense, nues era preciso que los encajes pudie Jen?
el empleado las dij. de la Liga de Obreros ante tro amigo don amando Céspesen usar la frontera xin que bu De una ony vagº. Pasen ustedes noche el señor don Moi. des: biere necesidad de pagar los de porque estaba durmido. Después, di en lose al fraile, sés Sevilla pronun CÉSPEDES GILLELAND re Sos de aduanas. Sea como quiera, el caso es dijo: ció el siguiente Hay que tener, ante todo, que tenemos que pedirle Ue.
DESPOSOPIO PRIVADO EN EL BAR. usted.
verendo padre. discurso LEY HOME muela serenind, dijo la morena un favor. Quién, y. contestó el SEÑORES: su acompañante. Cuando 1109. Diga Ud. señora.
religioso guiñanu un ojo. De Momentos habían llegado paEl miércoles 23 de octubre pregunten si tenemos algo que Pues bien; desearíamos que claro llevar ocultas variae piezas ra nuestra Costa Rica en los cua En la mañana de este día, Lle dijo: gozo al Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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