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REPÚBLICA DE COSTA RICA AMÉRICA CENTRAL EL ORDEN SOCIAL Semanario católico de intereses sociales, pero no politicos CON APROBACION ECLESIASTICA Año Heredia, sábado de septiembre de 1906 034 N227 EL ORDEN SOCIAL de hallaremos con qué vestirnos? Como hacen los paganos, los cuales andan ansiosos tras todas estas cosas; que bien sabe vuestro Padre la necesidad que de ellas tenéis. En fin, buscad primero el reiDIRECTOR: ho de Dios y su justicia, y todas las demás cosas Presbítero Rosendo de Valenciano se os darán por añadidura.
CONSIDERACION EDITOR ADMINISTRADOR: Estos dos señores quienes es imposiLuis Cartin ble servir un mismo tiempo, dice San Juan Crisóstomo, hom. 21 in Matth, son SECRETARIO: Eduardo Chaverri Dios y el dinero el mundo; y la razón de Calle del Carmen 31 Aparlado Nº 32.
no poderles servir es porque el ano manda robar lo ajeno, y el otro dir aun lo propio; Este periódico se publica los sd el uno quiere que seas casto, y el otro que bados. La suscripción por trimestre seas impūdico; el uno te incita al regalo y vale 75 cts. el número suelto, 10 cts. la buena vida, y el otro te ruanda la abuti nencia y mortificación; el no te inspira el amor de las cosas presentes, y el otro te las SANTO EVANGELIO manda despreciar. cómo podrás ejecutar on mismo tiempo cosas tan contraria. El de esta dominica es del capítulo VI, versi aún se podrá añadir a las palabras culos 24 al 33, segúa San Mateo. En aquel tiempo dijo Jesús sus discipulos: del Saoto Doctor, como sello de la maldad Ninguno puede servir a dos señores; porque, de este tiempo, que ano de aquellos een res tendrá aversión al woo y amor al otro, si se sujeta mandará nmar y reverenciar en todo sitio y deis servir a Dios y las riquezas. En razón de es ocasión al Corazón sacratísimo de Jesús, pe.
to os digo: no os aconsegéis por el cuidado de haro el otro preferirá servir libberta des de llar que comer para sustentar vuestra vida, de dónde sacaréis vestidos para cubrir vuestro cuerper dición, y vi tiéndose la libras de Satanás po. Qué, no vale más la vida el alma que el ali su dueño manchará y persiguirá las imágemento, y el cuerpo que el vestido? Mirad las aves del cielo cómo no siembran, ni siegan, ní tienen nes de aquel adorable Soñar. Decidámonos graneros, y vuestro Padre celestial las alimenta. nosotros servir bajo la bandera del Rey ¿Pues no valeis vosotros mucho más sin compara inmortal de los siglos.
ción que ellas? ¿quién de vosotros, fuerza de discursos, puede añadir un codo a su estatura. acerca del vestido, já que propósito inquietaros? LA CATEDRAL DE SAN PEDRO EN ROMA Contemplad los lirios del campo cómo crecen y florecen. Ellos no labran, ni tampoco hilan. Sin em(Concluye la descripción bargo, yo os digo que ni Salomón, co medio de todel Presbo. Dr. Schaefers)
da su gloria, se vistió con tanto primor como uno de estos lirios, pues si una hierba del campo que hoy Dos escalas de mármol conducen al sees, florece y mañana se echa en el horno. Dios así pulcro del gran Apóstol San Pedro. Este la viste, cuanto más vosotros, hombres de poca fe. Así que no vay his diciendo acongojados. Dón lugar se intitula la Confesión de San Pedro.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.