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2. EL ORDEN SOCIAL su zapato. Todo esto sucedió en Betania, la que Las mujeres hus mean muy de lejos el está la otra parte del Jordán, don de Juan esta peligro y tienen presentimientos rebeladores, ba bautizan lo.
capaces de adivinar el secreto más culto y CONSIDERACION descomponer el plan más arreglado.
Ensalza San Juan Bautista al Mesías, de crimen, es capaz de todo y a todo se arriesUna mujer manchada por la culpa el quien era precursor, y al mismo tiempo se ga. El bajar una grada en la escalera moral hamilla. Dios correspon de toda gloria; y propio de la criatura, aún la más sublimada, facilmente al abisnio. Por eso conviene edues lo dificit; después de una grada se rueda es el reconocerse siervo inútil y como menos car su corazón en la familia y en la escuela que nada por el pecado con que ofende su desde los primeros años de su vida, Creador. Somos nosotros humildes. Sufrimos con paciencia el que nuestros prójimos se muestren desconsiderados con nosotros!
El Requiem de Mozart ¡No pensamos que todo nos lo merecenjos. Ay! iqué lejos están todos stos sentimientos de la verdadera himildad, que, si es pura, Entre la muchas anécdotas de Mozart, ha de gozarse en el propio meno precio!
refiéres tha de los timos días de su vida y relacionad directamente con su célebre Requiem Para las Damas Poco tiempo antes de fallecer el celebrado compositor, se aferró en su imaginación la idea de que su muerte estaba próxi La mujer está destinada a los efectos dulces y tiernos. Sus palabras deben ser una ma, y en vano sus amig: trataban de con gota de miel en las amarguras de la vida; su iofundado como absurdo.
vencerle de que aquel pensamiento era tan sourisa, un rosado crepúsculo brillando por las sinuosidades obscoras de la inteligencia; zart un caballero rodeado de gran misterio, Por aquel entonces se presentó Mo su mirar, el casto rayo de la luna sin mancha, penetrando hasta los abismos de nues que negóse dar su nombre y que dijo al maestro: tro corazón y ciñendo con su aureola me lancólica y santa todas nuestras más febriles Una persona que desea ocultarse y y exaltadas pasiones.
que llora la pérdida de un sér amado, queriepdo honrar su memoria con un acto soModerar los ímpetas demasiado fuer lemne, me encarga le suplique Vd. que tes del hombre; herir con afectos tiernos su componga un Requiem. Querrá Vd. hacer corazón despedazado por exaltadas pasiones; me este señalado serviciu?
atraer la ambición sin límites ol estrecho pero venturoso nido del hogar, tal debe ser sn Mozart, quien a quella solicitul proangélico ministerio en la sociedad. Esas alas dujo una desagradable impresión, dados sus tan bellas se tronchan al aire que vibra por temores de morir, negó e acceder a las las alturas innaccesibles de la ambición del pretensiones del misterioso caballero; pero poder. Lo dolce. lo tierno, lo gracioso, for tanto le suplicó éste. que al fin accedió.
man otros tantos círcnlos donde su natural. En cuanto tiempo podrá Vd. termihermosura se lanza como un centro de gra nar su obra! le preguntó el de conocido.
vedad. Un mes le respondió Mozart, Mas por lo mismo que la mujer es así. Pues bien, dertro de un mes volveré tan dalce, tan pura, tan delicada, cuando la recoger su trabajo. Que precio le pone Vd. ambición se arraiga en su ánimo, tórnase. Cien dacados esta pasión en sentimiento más ciego, más El caballero los abonó al punto; y se impetuoso, más vehemente que la ambición despidió exclamando: de los hombres.
Hasta dentro de un mes.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.