2. EL ORDEN SOCIAL de egresos de su presupuesto. De LA BIBLIA da de un carro, y que su volumen seguro encontrará algunas sucep exede al de la tierra en la proy otras literaturas antiguas en el siglo XIX tibles de reforma, porque son porción de un millón cuatrocienObra publicada en inglés por Townsend, tos mil uno.
gastos superfluos, porque son Profesor de la Universidad de Boston excesivos. Pues de esas partidas Las estrellas puede tomar la base Traducción para El Orden Social ahorrar; para Respecto a las estrellas y su por Manuel Pasos, Doctor en Derecho. composición, había las opiniones todo consistirá en hacer el sacrificio de un hábito vicioso y por El sol, su magnitud y composición (Continua)
más contradictorias.
ende perjudicial. Así logrará no Diógenes enseñaba: que las sólo cortar la raíz de un mal que Sostenía Philobao: que el sol estrellas parecían hechas de pietarde o temprano sería grave y no era otra cosa que un gran cris. dra pomez, y que constituian los abreviaría su existencia là amartal, y que su luz era el reflejo de respiraderos del mundo. Philobao de Crotona contendia, y afirgaria, sino también se proporcio las luces de la tierra. No es memará por medio del ahorro un de nester decir que esto es falso, maba: que las estrellas estaban pósito de reservas que le sirvirian puesto que, ya nadie ignora: que formadas de una especie de cris.
en los tiempos malos, cuando las el sol es un gran globo de fuego tal más puro que los diamantes enfermedades, la falta de trabajo cuyas ardientes llamas se levan Platón pensaba: que la materia tan centenares de miles de mi. la vejez le impidanı obtener el que constituía los estrellas era una llas de su superficie ordinario ingreso de fondos.
sustaocia ardiente con algo así coPor lo que toca al tamaño del mo gelatina Xenófanes enseña.
El sueño de muchos sol existian mil conjeturas Deba: que las estrellas se compoLos católicos de nuestros días cia Heráclito: que el diámetro nían de nubes inflamables que se tienen un gusto predominante y del sol no pasaba del largo de la encendían de noche y se apagauna tunción que le es propia: el planta de un hombre. Epicuro han de día. Ataximenes decia: sueño. Dortoir bien, dormir mue abrazaba todas las opiniones emi llemente, dormir mucho tiempo tidas respecto del tamano del sol, que eran como clavos afianzados en el firmamento cristalino. Otros a dormir lo más pronto posible; faese del tamafio que le vemos, o que estrellas eran placas de oro caná saber: que podía ser que el sol dice Plutarco, pretendían: que las tal ha sido hasta el presente su política, tal su filosofia, tal tam podía ser más grande, más pe dente, puestas como en los reta.
bién, según algunos, su habilidad. queño (1) Anaxagoras enseñablos. IIeráclito, y algunos de Seguramente hay excepciones ba que el sol estaba formado de los estoicos, sostenían que la iluconocidas por todos; pero tene algo así como una masa de hier minación de las estrellas depen.
mios por cierto que la generalidad, ro del tamaño del Peloponeso, dían de las exhalaciones de los la inmensa mayoría de los católicos entra en la categoría de los más menos. El Peloponeso lugares húmedos de la tierra. Los durmientes. No nos detengamos tiene una área apenas de ocho antiguos persas, por último, enseen buscar las causas de este fenó mil quinientes millas cuadradas, ñaban que las estrellas eren los meno de historia natural. Cuando Anaximandro debe haber pareci. dioses del universo.
una voz demasiado elocuente do extravagante para su tiempo; Los Cometas y la Via láctea un acto de persecución demasiado dijo: que el sol era veintiocho ve Entre algunos filósofos de los violento turba su paz, entreabre ces más grande que la tierra, y primeros tiempos tuvo partida un momento sus párpados y pasea que su circunferencia remejaba la rios la opinión de que los comeuna mirada apagada y espantada colosal rueda de un carro rellena tas eran las almas de los justos en por el combate que se libra por de fuego. Pero Parménides de viaje para el cielo; otros decían: encima de su cabeza. Luego, se oponía esta suposición, insis que eran ángeles consoyando las vuelve de lado, se oculta la cabe tiendo en que el sol era apenas del almas de los buenos que se diriza, bajo no importa qué grosero tamaño de la tierra tamaño de la tierra Sin embar. gian lugares de reposo y, savelo, para huir de la luz importu go, los hechos demostrados nos rios de los filósofos pitagóricus na, s9 impacienta murmurardo dicen: que el sol no semeja la rue.
enseñaban que la Via láctea era del indiscreto que la ha despertaun antiguo camino del sol aban.
do y se vuelve a dormir. 1) La ignorancia de Epicuro en ciencias donado por este Fisicas as proverbial y hacia alarde de win (Montalembert Nota il traductor Conti mari Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.