Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
REPÚBLICA DE COSTA ICA AMÉRICA CENTRAL EL ORDEN SOCIAL Semanario católico de intereses sociales, pero no políticos CON APROBACION ECLESIASTICA ANO VII HEREDIA, SABADO 31 DE OCTUBRE DE 1908 339 Santo Evangelio EL ORDEN SOCIAL otros siervos sus compañeros lo ran y nos escuchan, que todo que pasaba, se entristecieron mupara el hombre se reduce ser DIRECTOR: cho y fueron contar su señor todo lo que había pasado. Entonces rico á tomar parte en el banPresbo, Rosendo de Valenciano le llamó su señor y le dijo: Siervo quete de la riqueza, que conmalo, toda la deuda te perdoné por vida el Creador todas las criaEditor ADMINISTRADOR: que me lo rogaste; pues uno debías turas; y seremos nosotros bastu también tener compasión de tu tante simples, para creer que Luis Cartín compañero, así como yo la tuve de ti? enojado su señor le hizo entrelas tres cuartas partes de la huCalle del Carmen No. 31. Aparta lo No. 32. gar los atormentadores hasta que manidad, se resignarán miEste periódico se publica los sábados. pagase todo lo que debía. Del mis rar de lejos los reflejos del oro, La suscripción for trimestre vale 50 cts.
mo modo hará también con vosotros que no pueden tocar, y la mag.
mi Padre celestial sino perdonareis nificencia del festín, donde no el número suelts, os.
de corazón cada uno su hermano.
pueden sentarse?
REFLEXION ¡Oh! Nó, en verdad; no pue.
Un momento de verdadera de ser esto. fuerza de ver en contrición borra las deudas de todas partes a los hombres prein uchos años empleados en cipitándose hacia la riqueza; fuerza de oír exclamar que to.
El Evangelio de la Misa de esta ofender Dios. Por enormes Dominica es del capítulo XVIII, que sean los pecados los perdodos quieren ser ricos; así como versículos 23 al 35, según Sao Ma na el Señor al que reconoce su que cuantos los son quieren teo. En aquel tiempo dijo Jesuis sus culpa y se acoge su misericor. serlo más, un día se dijo el puedia. Pero Dios no olvidará los blo: Es necesario que yo discipulos esta parábola: El Reino de los cielos es comparado un agravios que le hemos hecho si también sea rico.
hombre Rey, que quiso entrar en no perdonamos a nuestros eneSi la humanidad de abajo es.
cuentas con sus siervos. babien migos. Por eso decimos en la tá viendo a la humanidad de do comenzado a tomar las cuentas, oración del Padre nuestro arriba correr en todas partes le fué presentado uno que le debía Perdónanos nuestras deudas con ardor a los altares de diez mil talentos. como no tuviese con qué pagarlos, mandó su se así como nosotros perdonamos Mammón fin de adorar en ñor que fuese vendido él, y su mu nuestros deudores. Con la ellos al dios del siglo, dirá fataljer, y sus hijos, y cuanto tenía, y medida que les midiéremos semente: También yo quiero se le pagase.
remos medidos. Cuán poco es adorar al dios del siglo. Entonces el siervo, arrojándose lo que nos han agraviado nuesEntonces del fondo de los sus pies, le rogaba diciendo: Señor, espérame, que todo te lo pagatros enemigos en comparación siniestros pensamientos que leY compadecido el Señor de de lo mucho que nosotros he vantan en su alma todos los aquel siervo, le dejó libre y le permos ofendido Dios.
vientos del siglo, el pueblo echa donó la deuda. Mas luego que salió delante de la sociedad, como el aquel siervo, halló a uno de sus conenigma de hoy, esta frase forsiervos que le debía cien denarios, el Dios del siglo y trabando de él le queria ahogar, midable. Por qué razón hay diciendo: Paga lo que me debes. pobres?
arrojándose a sus pics su compañe Por nuestros discursos, por He aquí lo que yo llamo el ro, le rogaba diciendo: Ten un po nuestros libros, por nuestras abismo del pensamiento popuco de paciencia, que todo te lo paga: acciones, por todo el movimien lar. quién no podría ver ré. Mas él no quiso, sino que fué y le hizo poner en la cárcel hasta que to del siglo, en fin, enseñamos que tal abismo, abierto fatalpagase lo que debía, y viendo los las generaciones que nos mi mente sin cesar, amenaza, atraré.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Este documento no posee notas.