EL ORDEN SOCIALAMOR DE LOS AMORES Transcurrió un mes y Filol EL SOL mena (que así se llamaba la joHace muchísimos años, y en veo) volvió por segunda vez TIENDA NUEVA DE SATURNINO MELÉNDEZ la consulta.
un país cuyo nombre no han Esta tienda merece la atención Venía llorosa, calenturienta, del público por los precios tan conservado las crónicas, vivía un famoso médico cuya sabidu exclamó atropellando las pabajos que vende casi todos sus labras, ría era protentosa y su acierto infalible: la celebridad y presti Señor. señor. Mi padre objetos, entre ellos, manta ancha gio de que gozaba debíanse en se muere!
y gruesa, lienzo, céfiros zarazas. Ah. Tan enfermo esta que fueron 20 y 25 cts. las hay gran parte al extraordinario inérito de poseer secretos espe.
ahora 15 cts. dara.
tu padre?
cíficos de su invención y de rea Sí, pero por Dios no os de Surtido de frazadas de algodón lizar maravillosas curaciones tengáis.
y de lana; driles: casimires para mediante procedimientos mis Nada puedo hacer por ét; hombre y para señora; zarazas teriosos.
sólo tú podrás devolverle la sacrud;respas cones, pañuelitos de lud.
Ello es que aquel hombre sa ¿Cómo?
seda; objetos de tocador; muselibio curaba radicalmente cuan. Levantando aquella pesa.
nas de todos colores y todas clatos se sometían sin réplica su tratamiento, por extraño que ses: cartieles; gasas, etc. Pruébe ¡Corramos!
Precipitose Filomena la se una oez siquiera.
fuese, y de ahí que chicos y citada habitación, se aproximó Heredia, setiembre de 1908.
grandes, pobres y ricos, viejos a la pesa de plomo, y empuñan.
y jóvenes, acudieron en grando una argolla que tenía en la número a su casa, ganosos de LA ESPERANZA parte superior, hizo inútiles essu salud.
fuerzos para moverla.
Rogelio Bernini Cierto día fué consultarle Vencida por el cansancio no ¡Siempre contra El Celesuna hermosa joven acerca de la tardó en abandonarse su enfermedad de un hermano su dolor.
te Imperio!
yo que, según ella eétaba en. Oh, Dios mío! dijo solloEste afamado establecimien.
peligro de muerte.
zando ¿No habrá otro medio to de abarrotes y toda clase de Quedóse el anciano pensativo de salvar mi padre.
mercaderías, el más surtido de breves momentos, consultó lue. Ese tan solo, contestó esta ciudad, ofrece hoy con esgo un luminoso librote, volvió impasible el galeno señalando la pecialidad, granos de todos meditar y dijo por último: pesa. Arrójala por la ventana colores; quesos los más. La enfermedad de tu her y tu padre vivirá.
mano depende de un fenómeno Entonces. cierta es su sabrosos y de todas clasimpático al cual estás ligada. muerte.
ses precios de merca¿Quieres curarle? salió enjugándose las lá do. No deseo otra cosa.
grimas, mientras el sabio mo La cantina está separada de Pues entonces sigueme. vía la cabeza como dudando della pulpería. Es la más abuo.
Llevola una habitación desamor filial!
dante en licores extranjeros y amueblada, en cuyo centro se Dos días después murió el del país. Los libadores, se saveía una gran pesa de plomo. padre de Filomena. Para curar tu hermano hacer boca, con Esta sintió mucho tan irre exclamó es preciso que le parable pérdida, si bien no tar aceitunas, hielo o cualquier cavantes con una sola mano estado en consolarse al lado de un pricho de cibarita antojado; y pesa y la arrojes por la ventana.
nuevo pretendiente con el cual son tan educados y joviales, el. Pero. eso debe pesar mu se casó; fruto de este matrimo dueño y la servidumbre, que chísimo!
nio fué un niño hermosísimo en La Esperanza hay espe Nada más que nueve arro que hizo Filomena completa ranza de todo.
bas.
mente feliz. Dios mío. No tendré fuerTres años pasaron, y una LOS Sres. mantenedores de zas para moverla ni una línea! noche volvió por tercera vez Altares de Corpus para el presente Haz la prueba.
nuestra heroína la morada año, ofrezco venderles dos magnificos Altares, uno en madera y otro. Para qué. Es inútil! del médico; pero entró como en tela, pintura al óleo, ejecutado por volvió la espalda, murmuuna loca, mesándose los cabelos mejores artistas.
rando. Si mi hermano se muellos, dando lastimeros gritos, y PEDRO LIZANO.
con todos los síntomas de la Heredia, enero de 1909.
re. dqué he de hacer más desesperación. Concluir Tipografia de Cartin cian para que llorarle?
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