2 EL ORDEN SOCIAL Que dejar pasar impune este Sea lo anterior el proemio de tranquila de que hemos habladesplante, sería un pésimo pre. nuestro asunto: nuestra men do, ese amor casto; pero no el cedente que causaría escándalo te es tratar de la belleza en la deseo que tiende a profanar la en el pueblo cristiano: pintura; examinaremos las im. obra; así piensan los más escla.
POR TANTO: presiones que una pintura para recidos filósofos.
Por todo esto decimos que En virtud de disposiciones tener el atributo de belleza en pontificias y en uso de nuestras su sentido estricto, ha de pro las obras voluptuosas no son bellas, serán agradables porque facultades, acatando también ducir en nuestras almas.
la petición de miembros del Ve.
En primer lugar diremos que fomentan las pasiones: porque nerable Cabildo Eclesiástico y no se ha de confundir lo bello excitan los deseos; pero esas de varios señores sacerdotes, de.
coo lo agradable. La filosofía obras carecen de la verdadera cretamos la pena de excomunión sensualista llama bello lo agra belleza, sus autores o no tienen ipso facto incurrenda contradable, pero esto lo hace para gusto estético, se proponen. El Rayo, sus redactores y ser consecuente consigo misma. no la reproducción de la belleza, editores; contra cuantos coope No hay duda, dice Coucin. sino medrar con sus obras; tales ren su publicación; y contra que los objetos bellos son casi autores no merecen el nombre de los que se atrevieren leerlo en siempre agradables los senti artistas. La escuela sensualista adelante. La absolución de es.
dos, á lo menos no los ofenden, es la causa de las obras volup.
ta sentencia queda Nos reserque gran número de las impre tuosas, ella ha confundido la vada.
siones de lo bello se introducen verdadera noción de la belleza.
Este nuestro Edicto, debe en nosotros por la vista y por Poco ha, en 1902, la prensa leerse en todas las iglesias pael oído, y que todas las artes nos dio cuenta de un proceso rroquiales «inter missarum sosin excepción se dirigen al alma que se hizo en París cinco di lemnia el domingo inmediato por medio del cuerpo. bujantes acusados de inmorali su recibo.
Mas si una sensación acom dad, leed sus nombres: Willete, Dado en el Palacio Episcopal paña las más veces la idea de lo Gerbault, Boulet, Guillaume y de San José, los catorce días bello, no por esto hemos de de. según el cronista, también de agosto de mil novecientos ducir que lo agradable es lo Stenlein, ellos hacen responsanueve.
bello.
bles de sus obras al Estado y DR. JOSÉ ZAMORA. La observación y la expe la Escuela de Bellas Artes.
Vicario General riencia atestiguan que no todas Oid las palabras de uno de las cosas agradables nos pare ellos, de Willete: Señores: el Ante mí, cen bellas, y que entre las cosas responsable de que yo no dibuje MOISÉS RAMÍREZ, sino desnudeces pecaminosas, agradables. aquellas que más Notario Mayor es el Estado. En la Escuela de nos lo parecen, no son por cier Bellas Artes se me enseñó cul.
to las más bellas, señal cierta y tivar el desnudo, el casto desLa belleza en la pintura evidente de que lo agradable no nudo como decian inis profe.
La pintura, como la música es lo bello, pues si lo uno es la poesía, es una de las bellas idéntico lo otro, no deberían Luego, en los museos, en los artes que producen en el alma separarse jamás, y deberían esjardines, en las bibliotecas, he emociones misteriosas, inexplitar siempre en igualdad reci seguido recibiendo la misma enseñanza pagana que dan las cables; dulces como la nota ar.
proca.
diosas de mármol, las ninfas sin pegia que perdida en las ondas Nosotros estamos de acuerdo velos.
de la brisa, llega rumorosa cou lo expresado por el filósofo, Basta con estas palabras panuestro oído, tiernas como el cuyas palabras acabais de leer. ra demostrar lo que deseaba.
último acento de un poeta que En nuestro sentir, la impresión mos: El Estado y sus escuelas espira de nostalgia en el destie que la belleza ha de producir en sio Dios, tienen la culpa de que rro, bellas como la caída del sol nuestras almas ha de ser un de. los artistas pierdan el gusto esleite en un lecho de púrpura; emociolo, sin interés; creemos con el ñanza completamente pagana.
puro, espiritual y tranqui tético; pero sobre todo, la ensenes tristes, indefinibles como las filósofo citado, que la belleza de En las obras de Murillo de que experimentamos al despe be despertar en nuestro espíri. Rafael, podemos admirar la be.
dirnos de un ser querido, al tu, la admiración y el entusias lleza, ese ideal sublime de los oir el llanto inconsolable de una mo, el amor puro, mas no el verdaderos artistas, que desmadre. La pintura, he dicho, deseo de la pasión.
pierta en nosotros un sentimiencomo la música y la poesía, pro El artista pues, al pintar una to noble y un amor puro.
duce en nuestro espíritu todas obra debe proponerse excitar en PRÓSPERO DE GONZÁLEZ estas impresiones.
nosotros esa impresión dulce y sores.
Presbítero Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.