Guardar

EL DIA ELLA sotros meditamos en el porqué Sección Cablegrafica sos.
una EL CANTO del GĄLLO como cualquiera de los hombres La locomotora sufrió poco.
EL DIA DOMINGUERO se olvidado de encender la luz?
Si estará encendida ia lamparilla de nuestra Magistraturu de El tráfico de tranvins quedó iny no la veré! De ser así estoy per nuestro Congreso.
terrumpido entre esta ciudad y dido por completo!
Puede también probar mal San Pedro, lo mismo que el de San José, 10 de julio de 1904 Lleno de terror llamé mi mu contenido odio hacia el señor carretas, pues la vía está obsjer, la cual me contestó con voz Fernández, odio que no se atre truída.
muy clara como la de una perso ve manifestarse de frente, y pa El maquinista de la locomona que hace rato (que no duerme: sión mal intencionada para el tora, Federico Muñoz, dice que Qué tienes, Bernardo! honrado Gobierno que nos rige. pitó al salir del cruce en la vía Estás segura que la lampari Sea de ello lo que fuere, el atlántica, y al llegar al cruce en la está apagada!
autor del injusto y apasionado la línea del tranvía.
Color de montaña Tus blondos cabellos. Si, hombre, si: artículo puede seguir dando noDe El Noticiero tus ojos radiantes, profusos, brillantes. No es cierto! Tú mientes! Es tas falsas y pensando en la cotus ojos obscuros de extraño color; despiden la esencia de un viejo licor toy convencido de que me he media de Alarcón, mientras node noche parecen embriagan, perfuman, quedado ciego!
dos negros diamantes, tus rizos vibrantes. Pues estás en un error! del canto inarmónico de los ganque brillan fugaces tus rizos que juegan. Levántate dije mi esposa y cual astros distantes como ondas flotantes, abre los postigos de la ventana.
La Guerra Ruso Japonesa rompiendo la sombra con tenue ſalgor! eu horas supremas de plácido amor. Para qué, si todayía es de noche!
Cual húmedas fresas Tus manos de seda. Levántate, te digo y abrel tus labios insitan, Cordón en Chef tu seno adorable, Choque entre el carro número Oſ rechinar los postigos y el sutus labios ardientes de filtro traidor; prometen dulzuras de amante estupor, Chefú, Refugiados recienbir y bajar de las persianas. del Tranvia y una locomotora en ellos las dulces y tu alma es un lago Ya ves exclamó mi comapa.
temente llegados de Puerto Arcaricias palpitan de olvido insondable, fiera que todavía no ha amaturo dicen que los japoneses han y cantan y vibran, un lago de amores formado un cordón completo al necido!
Detalles completos y alegres se agitan tranquilo, inmutable. Confieso que me tranquilicé contorno de dicha plaza, no dislos besos furtivos, de rico sabor! que oculta en su fondo un viejo Dolor!
y que di crédito las palabras de Ayer a las cioco y media de tando sus reductos más que mi esposa Vargas Dila la tarde iba para San Pedro del millas distante de los fuertes exDe pronto, en el silencio de mi Mojón el carro del tranvía nú teriores.
noche. el gallo, que había per mero 5, cuando al pasar por el Ataque naval. torpederos hundidos manecido mudo durante mucho cruce con la línea del FerrocaSan Petersburgo, No ditiempo, cantó al fin con voz fres rril al Pacífico, chocó con ce el almirantazgo el inforca y sonora.
locomotora El estrépito fué me del Almirante Togo, relatiCantó y comprendí que no vol grande: el carro del tranvía se vo al hundimiento de la nave vería yo a ver jamás la luz del día descarriló y la plataforma delan guarda de Puerto Arturo. Infor ¡Oh, qué sorpresa. exclamó blo inmediato, el cual me dijoque que comenzaba surgir; que la tera se hizo pedazos.
ma el almirante Skrydloff que la anciana al verme. Cuánto me la cosa era grave, muy grave.
lamparilla iluminaba la estancia La alarma de los nueve los cruceros rusos al mando del alegro de que venga usted. Hace Cree usted que perdere la visy que hacía dos horas que mi mu diez pasajeros, entre los cuales capitán Dezabrazoff encontracuatro años que no le hemos vis. ta! le pregunté.
jer me estaba mintiendo piado se hallaba la señora esposa de ron en el estrecho de Corea to por esta casa. No digo ni que si ni que nó.
samente para retardar el terrible don Pablo Emilio Pérez, fué naves enemigas. Los rusos se Al llegar al huerto le pregunté Pero le aconsejo que duerma bomomento en que yo me enterara grande, pero ninguno de echaron correr perseguidos la vieja: ca arriba y que tome el medicade la verdad.
ellos le sucedió nada. su marido de usted! mento que voy a darle.
por los japoneses quienes hicie El gallo volvió a cantar alegre Un motorista llamado Tobías. Pobrecillo. Hace dos años me curare!
run varios disparos sin efecto; y satisfecho como si hubiera rea Gamboa, salió lesionado en que está ciego. Es posible.
11 torpederɔs atacaron los rulizado una venganza, y como si Ciego!
Cuando se fué el médico me una pierna: el conductor Ma.
sos y dos fueron hundidos por supiera que yo me había quedado nuel Casasola recibió un golpe, éstos. Los rusos no sufrieron Sí, señor.
eché a llorar como un niño, conciego. Bernardo! gritó la anciana, vencido de que no quería deciry un brequero se rompió la cadaño alguno. Y, en tanto, mi pobre, mi sanra. Dile al chico que te ayude ba me la verdad.
ta mujer, lloraba mi lado como Inmediatamente después que Encuentro de caballería rusa contra jar! Tienes una visita.
Hice lo que el doctor me había una Magdalena artillería y rifleria Japonesa tuvimos noticia del accidente Desde la casa una voz triste indicado y no observé mejoría alSan Petersburgo, Se a.
respondió: relatado en las líneas anteriores, nuncia que el Emperador Nicoguna.
Mauricio Level. Quién es!
Vino después verme un curannos constituimos en el cruce de las partirá mañana para la re. El señoríto Juan, dero, el cual me preguntó en tolas líneas y, lápiz en maco, digión del Volga, para despedirse El anciano bajó al jardín y al no solemne: mos comienzo nuestras menu.
acercarse al recien llegado le dijo: de los y 69 cuerpos de ejér. Ha hecho usted alguna vez LEGACION DE HONDURAS das observaciones.
cito de Siberia que partirán. Almorzará Ud. con nosotros? daño a los animales!
De largo el carro y la loco El diario de. Con mucho gusto.
Acto contínuo me acordé del motora presentaban un panoraLO DE LA PRENSA LIBRE la tarde Peterbbursky Listok ¿Qué podremos dar, mujercita gallo quien había arrebatado su ma magnifico; el tranvía atrapublica un despacho de Liao mía, este caballero!
gallina vesado en la carretera forman Yang anunciando que libróse Tendrá que contentarse con Desde aquel momento no tuve IONORANCIA, PASIÓN MALA PE?
do cruz con su propia vía y con en Tatschekao un encuentro en una tortilla de jamón, un pollo, más que una idea fija, que diariala parte anterior levantada, como Haciéndose eco de un rumor, unas alcachofas rellenas, queso y mente me obligaba a preguntar los jinetes rusos al mando que en los cuernos de un toro, por del General Somsonoft con el frutas.
por el animal.
que ya no era rumor sino reali la locomotora que parecía fati ausilio de una batería do artille Un almuerzo exquisito!
El caso es, señorito Juan, que dad, La Prensa Libre del vier garse al peso del vehículo, y ría desalojaron de las alturas Qué pollo vas matar? preguntó el ciego su esposa, iba empeorando de día en día. tención no nos atrevemos ca izquierdo después de haber sal pesor del juego nutrido de ar tillería y rifería enemiga. La elección es dudosa. Son tado de la línea.
todos muy viejos y las gallinas ridadla malla de la lamparilla que ¿Qué datos tiene el colega Voluntariosrusos Un grupo de curiosos rodeapara juzgar, como veladamente lo ba al conductor, quien pálido Puerto Said, El trasporestán poniendo. No habrá más alumbraba mi cuarto.
remedio que retorcer el pescuezo sobresaltado y no ví nada. Al la Legación es dar cumplimien al ver la inminencia del encuenEn cierta ocasión me desperté da entender, que el objeto de aun de la emoción, ralataba que te Petersburg perteneciente a al gallo rojo.
la flota voluntaria rusa pasó hoy ruido que hice al volverme, mi en camino para Vladivostock, No, no, de ningún modo! ex mujer, que dormía mi lado, me la Cámara Está el que tal Pérez. le había abrazado por la llevando sú bordo 245 mariclamó Bernardo. Hay que respe dijo: tar las parejas. Déjale en paz! escribió al tanto de todos los a espalda, y que así habían rodaneros Qué te pasa! Necesitas algo suntos de nuestra cancillería. do al suelo en el momento del Llamada de reservas navales Oigame usted, señorito Juan, y No.
sabrá por qué no quiero que peConoce a fondo todos los nego choque. Pues duérmete, Bernardo, y cios referentes nuestras RelaSan Petersburgo, La norezca ese pobre gallo. Empecé tranquilizate.
Agregaba que se había oído vedad del día es el úkase del sentirme mal de la vista un día ciones Exteriores? Nada de eso. No tengo sueño. Qué hora es!
un clamor unísono de los pasa Czar, llamando al servicio activo que recibíamos uno de nuestros a No lo sé.
seguramente jeros, y que una señora con un todos los reservistas navales.
migos de París. Había llegado de improviso, y como las provisiones como me cuidas mal! Ni siquie mado señor Fernández Guardia siguiente. don Alonso Pérez, que la flota del Báltico no va a Tiene seguridad el autor del niño había saltado por la ven Constituye esto un mentis elo Ves le dijo bruscamente injusto artículo, de que el estitana. La lista de pasajeros es la cuente aqnellos asertos de estaban agotadas, decidimos ma ra has encendido la lamparilla!
tar una hermosa gallina blanca Pero.
haya sido enemigo del Gobier doña Margarita de Pérez, Li Lejano Criente.
que teníamos en el gallinero. Yo No, señora; está apagada.
no? No la tiene.
cenciado don Luis Cruz Meza, Pesca de un buon convoy japonés mismo fuí cogerla; pero cuando Mi mujer se calló un instante y Desde luego, parte de un pun Leopoldo Moya, Florencio Seme la llevaba, su gallo me saltó después exclamó: to falso para estampar la grose villa, Gerardo Blanco, Segundo te se sabe que el general MistLiao Yang, De buena fuená la cara, batiendo las alas y ar Tienes razón! Dispensamel, ra suposición de que el Gobier García, José Salvatierra y la mando un verdadero escándalo. hijo mío! Quieres que nie levante!
chenko captaró un gran convoy no trata de captarse simpatías; señora del salto por la ventana, japonés, compuesto, principal Me libre de la acometida, y al ca No vale la pena le contesté y con eso, lo que prueba es que cuyo nombre no pudimos consbo de cinco minutos no me recormente, de arroz, pero hubo tamno me hace falta.
vive en Babia, que no conoce a tatar.
daba ya de lo ocurrido.
bién cabezas de ganado.
Permanecí despierto, oyendo los honorables miembros de este Los daños que sufrió el carro Por la noche, al ir acostarme, el péndulo del reloj y fastidiándo Gobierno, incapaz de semejan.
Buena salud de la tropa russ son de consideración: el con noté que me dolían los ojos, pero me de un modo horrible. Induda tes procedimientos, y que tam troller saltó contra la puerta causa del calor que es no hice caso y me metí en la cablemente echaba de menos la de poco conoce al señor Fernández y golpeó al motorista, arrojan sofocante la tropa marcha de Al día siguiente, en el mo bil luz de la lamparilla que esta Guardia, honorable por mil tí dolo a la carretera. Varios a noche.
mento de ir mi trabajo de la ba acostumbrado.
tulos, que jamás bajará la cabe migos lo axiliaron, y lo llevaron Fuerte temperatura branza, me pareció que la niebla de pronto se me ocurrió una za por una Legación, en el su su cuarto en el alto de Cuesta Se ponen en práctica con invadía el campo.
idea. Cómo mi mujer tan hacen puesto y falso dicho de su ene de Moras. El doctor Calneck mucho rigor los reglamentos saComo mis ojos no se curaban, dosa y tan exacta en el cumpli mistad; avezado las tareas di le hizo las primeras curas y nitarios.
decidí llamar al médico del pue. miento de su deber podía haber plomáticas y competente en ellas, sanará en breve. En todos los campamentos para Yrkutsk.
ma.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

    Notas

    Este documento no posee notas.