Guardar

EL HERALDO DE COSTA RICA su escasez.
lo peIII EL HERALDO DE COSTA RICA. licía ni la soldadesca los que llevan las una riqueza producción insis no obstante, la paralización en los nearmas del orden sino la prudencia, el tente: gocios es más artificial y ficticia que buen juicio, la mesura, y el oído del En tesis general, el alza extraordi tad en unos pocos.
efectiva; pero se sostiene por la volun.
que manda abierto al consejo y grito INFORMACION CRITICA.
naria de los cambios se debe en pri.
de la opinión pública. Ama el bienLos billetes en circulación no son estar y la gloria; pero sobre todas las mer lugar que se sigue para ellos la excesivos; por el contrario, apenas basEl Gabinete Ejecutivo cosas, antes que fulgir sobre las rui ley de la oferta y la demanda. Hay tan para las necesidades de las tran Ahora está compuesto así: nas de su país, preferiria morir eclip pocos giros y excede del valor que sacciones, y sin las dificultades que se lo representan que debe Presidente el pagarse en sado bajo el cumplimiento severo de oponen al cambio por especies fraccio.
Señor Demetrio Iglesias Llorente sus deberes de hombre y ciudadano exterior, pues el cambio sube ya que narias pequeños billetes, sin necesi: Relaciones Exteriores Tiene ideas modestas; pero en cam.
papel sobre el extranjero no es más dad alguna, no habría obstáculo posiSeñor Pedro Pérez Zeledón bio no muerden su cerebro fantasías entonces que una mercancía que al.
tivo la circulación. Gobernación extraviadas. Es padre excelso; pero canza tanto más alto precio cuanta La elevación de los cambios tiene Señor José Astúa Aguilar antes que todo es padre justo. No mayor sea su demanda en relación con graves consecuencias para el comercio Hacienda Comercio acusa los suyos, pero no los defiende importación; pero es menester de.
Esto Señor Bautista Quirós de; y, si el momento llega, su voto lo por que se refiere al dese.
cir la verdad pese quien pesare: la quilibrio que aquí se nota respecto 5 Guerra Marina depositará en la urna con la mayor otros Estados vecinos, en los que el vida interior del país, la producción Señor Demetrio Tinoco honradez. No quiere los secretarios (con permiso) de Estado ni los aborrece: talvez ni tipo no ha llegado ni con mucho, la y por consiguiente al comercio de ex.
portación es altamente favorable, pues altura Esas personas que desempeñan la los toma en cuenta, sino para proce que entre nosotros. Hay ade.
es un estímulo para él, desde luego presidencia y secretarías del Ejecuti der en términos de tal condición, que más otras causas perfectamente detervo, según nuestro criterio (moderado. la conducta de esos altos funcionarios minadas desde luego que se examinen que por todos los medios se procura aumentar lo que ha de exportarse disvalen lo siguiente: corresponda los deseos del presi.
con criterio económico, y que son las minuyendo a la vez el consumo de Es un apreciable incombatible dente titularó al impulso que éste, que han producido el desequilibrio, y productos importados. Convendrá el sujeto. No tiene fianco atacable en como jefe, imprimió a la política. la necesidad de compensar con mayor Diario con nosotros en que es un error cantidad de moneda nacional una canla atmósfera política. No le infia la Aceptó un encargo, y lo cumple hoformidable importar pacas de heno soberbia ni le herrumbra la vanidad. norablemente; ni quita ni pone (trastidad fija de moneda extranjera.
Hombre modesto por natural tempe cendent te. Cuando el reelecto Entre nosotros influye en el alza de prensado, patatas, maíz y otros productos agrícolas pagándolos en oro; ramento, más procura ocultarse que regrese de sus hermosos y divertidos los cambios como también en la crisis cuando en el país pueden obtenerse, exhibirse. Ni las echa de sabio ni pre paseos, encontrará que de su casa no ģeneral que se padece, el desnivel exsume de estrella. Tiene conciencia de hasta con exceso, pagándolos en la traordinario en que se halla la expor moneda nacional.
se ha perdido ni un camafeo, ni una su fuerza moral y sobre ella descansa estatua ni un plato de su vajilla, ni tación con la importación. Saldar en Esa sí es la madre del cordero, la dinero efectivo en el exterior esa dife.
tranquilamente. Sabe que suple su un claro de su prestigio, ni una somcausa de que falten los giros, que hijo (que viaja de incógnito por Esta bra de su popularidad. ni una silueta rencia, con la necesidad urgente de abundan en cambio en países más dos Unidos, Francia e Inglaterra) y de la intención firme de mantener la hacerlo que tiene el comercio no le ocurre meterse en papel suyo, y reelección. Pero este número (1) que mantener su crédito y con él su acti queños pero más productores, y de se contenta con cuidar de que no se ponemos entre paréntesis, deseosos vidad, es lo que más contribuye a que los cambios vayan camino de las nubes.
mantener altos los cambios.
rompa el ajeno, que está encomenda de que no le alcance jamás nuestro do su vigilància. Es sencillo, casi lápiz, cumple con su deber, y no aña.
Por otra parte; es mer. ester no ol.
Cartago tanto como un paisano campestre, y vidar de ni quita la suerte.
ΕΙ responde que el régimen monetario domi Tila, esa dulce y delicada flor carama más el estar descansado bajo el honradamente de aquel santo santonante entre nosotros es el de plata, y taginesa, que bien podría llamarse árbol, que el que se le mire sobre la rum que le fué confiado; y, en cuanto que el metal blanco, antes en la pro Lila por el azul de su corazón y el celeste claro de su inteligencia; esa probrillante copa, expuesto las mecidas a las habilidades políticas, son los minis porción de 15 ár con el oro, en la acdel caprichoso viento. Es de origen tros los que despachan, y los que ren.
tualidad guarda la de 32 1. Da ya metida cuya limpia alma resplandece en las estrellas de sus ojos y en la noble y, sin embargo, por su genial dirán cuentas. Mañana seguiremos ésto un fuerte cambio que atendido al modestia valor de la plata y que debe cubrir sonrisa de su boca, tuvo anoche una y su característica bondad, con los Secretarios de Estado.
parece un plebeyo, no del vulgo, pero también el gasto de trasporte de mo. fiestecita en celebración de su cumII La República neda, seguro y comisión, debería ser pleaños. Convido sus amigos; y en de los que engrandecieron Roma.
Nos referimos a la de Guate si otras causas locales no lo modificasu casa se reunieron deliciosas compados, sería una democracia del tiempo mala y no la de aquí: Peque do un buen margen para el banquèro. tó viejo, porque El Heraldo, aunque ran de 140 150 por ciento, quedan. ñeras suyas y varios jóvenes; y no fal.
de los vencedores de Africa. Es hon ña diferencia hay entre ambas; rado carta cabal, y no hay manera tan corta como la que media enEl comercio obligado proveerse en espíritu solamente, allí estuvo pro.
de encontrar borrón enemigo de su de letras oro sobre el extranjero, tie. yectando su sombra y mitigando con tre este Heraldo vulgar nuestro, decoro en el libro de su historia, de y el de España, ponemos por ocasione la mayor demanda, y además ne que pagar el exceso de precio que ella el resplandor de los luceros.
largos años y al alcance de cual.
IV quiera. Es el Jefe del Ejecutivo, y no ejemplo, aunque no sea exacto. la equivalencia que representa el que Tenemos el gusto de llamar la se siente; es la mar, y no se mueve la Mas dejemos apreciaciones irri branto de la plata por su depreciación atención del público al aviso del chalupa ni el botecillo pescador; no tantes, y al grano. La Republi actual.
doctor Fernando Iglesias, médidecimos que las grandes naves, por ca de Guatemala trabaja como vienen aquí ahora las campanitas co cirujano de la universidad de que el Estado no las tiene. Bueno, debe ser; conste que no habla que oyó sonar el Diario: como los giNápoles. Con esta ocasión, nos conciliador y de fogosos afanes pa. mos de la Nación que se llama ros son escasos, el agio y la especulatrióticos, su empeño mejor dicho su así, sino del periódico simpático ción se ceba en ellos; pero no son los apresuramos demostrarle al jogran deseo es que los dioses fundan que llena ahora nuestro intento. sino los Bancos, los banqueros, los pacomisionistas. qué más quisieran ven profesor, nuestro entusiasmo las energías de este país, limpias de Copiamos de ese intenso órgano por su vuelta al país, donde le preocupaciones de las unas contra las de la prensa centro americana ponible imponen la ley. No está tan drotes gordos los que acaparan lo dis esperaban palpitando los afectos otras, y las arrojen despejar la ruta de familia y, halagüeños, los caridel porvenir como una sola hacha. Su unas cuantas ideas, que son muy lejos todavía para que se haya olvida ños de la unistad.
corazón es recto, y su inteligencia, si aplicables a la situación econó do, la época en que, sin razón alguna, Cast, rási no brilla en los negocios públicos, ni mica de Costa Rical El Heral por la misma que existe ahora para En un lugar comprendido.
en las lucubraciones políticas como un do salva los bancos de este que suban los cambios, bajaron en lo sin nubes. Su voluntad no quema, sino al Anglo, que, por ser Ansol atrevido, resplandece como un cie país, no sólo al de Costa Rica, pocos días treinta y más enteros! Eb no recordamos bien si entre Sántonces los cafetaleros debían lanzar al chez y Curridabat entre esta sino que calienta y acaricia. Descubre glo, francamente huele israeli rable, interesaba la baja para forzar siempre lugar por comercio una masa de pape! conside estación y la de San Pedro, pero su mirada la condición de su país, y ta.
donde Pero la verdad es que los la pasa tiembla ante el anhelo de lanzarlo por dos bancos de este país, pueden rios. Hoy este juego se ha hecho im perder sus ojos un diputado; fedespués la reventa a los tipos ordina vía férrea, estuvo en un triz de sendas anchas más de lo necesario pa gloriarse de no ser motivo de la posible por haber errado la mayo lizmente. cambio de un golpe ra que sus ruedas no hagan serpeos crisis violenta en que nos halla ría de los créd ni quiebres peligrosos. Prefiere una stranjeros, y estar recibido en una mano, pudo aparpolitica de seguridad, aunque parezca mos, y menos de las bruscas al las cosechasidas desde antes de tar las puntas peligrosas que le sable sin pavón, una que se distinga zas y bajas de cambio que arrui almacenadas: Pero en grande pequebuscaban el rostro.
por su azul brillante, y que corta y han nuestra agricultura y nues na escala culación continúa rompe y rasga y echa a perder las so tro comercio.
luciones lógicas que deben salvar los bierno está arruinado desde tiem Quiéneste dos responsables, pues, la vía, esos son los que ahora esLo que es el Go el agio ne te mostrar la cabeza podan sus cercas y arrojan las ramas inconsideradamente sobre intereses nacionales. Su deseo es que del alza: las cosas no son concelos ciudadanos discutan tranquilamenpo inmemorial, porque gasta mu bibles mbargo están a la vista.
tarían respondiendo del daño, si te, y que no haya razón para las gran cho más de lo que debe gastar, y Movil tales es de necesidad y por su mal se hubiese quedado el des embestidas; y que no sean la po.
porque no sabe abrirle caminos I también de onveniencia particular, y diputado enteramente oscuras.
Esos que Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacje e Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

    DemocracyEnglandFranceSpain
    Notas

    Este documento no posee notas.