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EL HERALDO DE COSTA RICA0. 05 00 Avisos PAGO ANTICIPADO SAN RAMÓN Tomás Herra. Si ella hubiese comprendido EL HERALDO de COSTA RICA vida; puede haber sucedido, ser nos que debieron acentuarse quisito de la elegancia sencilla, una realidad, y el observador mejor, se ahondan circunstan La colección de Páginas se lee el idioma musical de las aves, pinta del natural; el hecho es cias que no dejan destacarse y de una vez.
En cuanto lo habría dado gracias al canario, Fundado en 1889 por Pio Viquez solamente posible y entonces el moverse con soltura la idea correcto, iba insinuarle al es que la decía siempre: Amita artists crea.
Pero un buen te principal. Pero generalmente critor que no tuviera en menos mía, te quiero, te quiero, te REDACTOR ma eu manos desmañadas se el entor sale airos, tanto en la fijarse en ciertos pequeñeces, quiero.
RAFAEL MACHADO JAUREGUI convierte en una tonterís; al invetiva como en el procedi las cuales en algún sentido no Ella, aun sin entenderle, paADMINISTRADOR, contrario, el observador promiento: así en Blanco y Negro, dejan de ser piedras de toque; gaba sus píos amorosos con ca.
MIGUEL TAPIA fundo, el psicólogo, da con la originalisimo en su desarrollo, pero recuerdo lo que dice ricias y halagos, y por entre los nota palpitante, advierte el pan bondo como el recuerdo, intimo Vargas Vila en el prólogo de alambres de la prisión introduto utilizable allí donde menos como la tristeza, fatal como la un bellísimo libro de César Zucía un dedito soprosado, que el CONDICIONES se ve; nos muestra la vida de lo pasión irremediable; y va su meta: La gramática es el arte pájaro picoteaba suavemente Número suelto. CI Suscrición por mes.
La habitación de cuyo techo que aparentaba no tenerla. Así biendo a la manera de ura ola de los necios y de los ignoranComunicados) Precio convenDaudet saca partido de todo y que en la altura que alcanza tes. no opino yo lo mismo, artesonado pendía la jaula de cional. nos deleita con el relato de esse retoerce y estalle. El asun más dejo la gramática Pipi era un precioso camarín cenas que en realidad jamás nos to es una de tantas amarguras entro en el espíritu que con ancho mirador, por doode inspiraron interés Ejemplo naturales en la existencia, pero informa la obra. Es. tenía entraban con la luz del día, los Petite Chose, uno de los libros que no parecen naturales sino que ser. éste que flota en las aromas del jardín vecino. El AGENTES más encantadores Tal es la cuando ya uno llega al escepti ideas actuale, un mal de que prisionero, al ver cómo cruzaimaginación reproductiva, tan cismo. Amor, es una malicia está padeciendo el mundo; en ban por el aire los pájaros liCARTACO. Antonio Poveda esencial en el arte como la crea estudiantil, nota muy feliz; solo fermedad de análisis que ex bres, no los envidiaba, Con el HEREDIA.
Ro Rodríguez dora. Esta se ejercita en la in que (lablo según mi gusto per trae de todo un zumo de amar cariño de su dueña tenía él basALAJUELA.
PUNTARENAS Abel Franceschi vención del caso posible, com sonal) para que la relación ga gura, coyo efecto es una espe. tante para ser dichoso.
LIMÓN. Sasso binado el cual, se vacia en el nara en unidad y el sumario tu cie de rencor hacia algo hacia Pero un día, cuando le desLINEA LIMÓN. Víctor Tioli LIBERIA. Caamaño molde de la verdad. Quién viera una buena página más, yo alguien que se oculta en la som pertó el resplandor alegre de puede valorar en menos la im desprendería el principio con bra; envenenado filtro que lle la aurora, Pipi, que gorjeaba GRECIA. Elías Ramos ATENAS. Pascual Soto ginación creadora de un cuen este título: Sugestión del invier. Da el pensamieuto de desola saludando al sol, quedó mudo tista que la de un novelista!
no; Ah, las ilusiones, bosqueja ción. Hemos dejado de verlede terror de sorpresa. Frente Agentes generales de avisos y publicidad Más no sólo la concepción muy bien un carácter de mujer a la vida el lado brillante y nos la jaula, pendiente del mismo Alabarta Co.
determina el mérito del cuento: romántica y tiene magnífico fi place situarnos en pontos de techo, había una exactamento los detalles, abondando aquí y nal; Alegria de vivir (irodía. vista de donde sólo se observa igual a la suya, y entre los aallá, bacen que se destaquen termica con una de esas cou la sombra que invade el hori lambres dorados otro canario LOS AGENTES relieves admirables, viniendo tracciones amargas que en los zonte. Hemos sumergido la que le miraba de bito en hito.
que aún no hayan enviado los así constituír, por armónico sembluotes no se borran nuoca; cabeza en ondas muy frías. Ya Su sorpresa cambió en asom.
fondos que hayan recogido, les enlace, la belleza integra de u Fallo celestial, es un fallo que salvamos con wiedo los umbra bro al ver que el nuevo huésrogamos nos los envíen.
na cinceladura. Pero mu no daría un cura hipócrita in les del sentimiento. El cora ped del camarío se acercaba LOS SUSCRITORES chos escapa el átomo viviente tonso, leyenda de una morali zón de la mujer amada, si por los alambres para contemplarle del detalle, y no todos saben dad profunda, entre dua sonrisa caso palpita bajo nuestra frente, con tanta fijeza como él le mien los lugares donde no hay agen hacerlo germinar. Por él pue y un beso; Flor de hastío, agua nos asusta como si oyéramos raba, y al observar que imitaba te se servirán remitirnos por coreo lo que adeudan.
de juzgarse el talento perceptivo fuerte, demasiado fuerte quizá; adentro el martilleo fúnebre del sus movimientos, saltando de del autor, el grado de intensi. Maupassant tiene un caso se impío carpintero de Heine. De las cañas al bebedero y de éste dad de que es capaz al impre mejante; Noche Buena es una la flor ya no aspiramos el per al piso de la jaula. Trinó el sionarse de un asuu su acti evocación; pero sí bay nu ver fume, sino que, pensativos, la desventurado Pipi con dolorosa tud para la relación que se es dadero cuento de Noche Bue desbojamos pétalo por pétalo; y nogustia, y el otro pajarillo tritablece, por un fenómeno sutil na: Fatalidad. dejo de citar, las que antes simbolizaron la nó al mismo tiempo confundiéné intime, entre el alma de las no porque lo que callo no se ventura, ahora se llaman flores dose los dos cantos en uno solo.
cosas y el yo. Nadie más ex digno de tomarse en cuenta, de hastío.
Vivimos enfermos. Mi amada no me quiereSalvador Calderón, al despe quisito, por no decir maravillo aunque lo citado es para mí lo de tristeza y ballamos en ella gorjeaba Pipi mirando con trisdirse de Costa Rica para San so, este respecto, que Peter mejor. Porqué Calderón des un extraño deleite. Oh análi teza al intrusso, por lo que Salvador, dejó sus amigos un Altenberg: él confía la fuerza virtuó la armonía de su obra sis! Ob filosofia! Oh desola veo, le cuida tanto como mí.
amable recuerdo: su libro Pádel detalle el movimiento de la con la tota política Del album ción!
Tan lioda es su jaula como la ginas. Desde luego predispose obra, y es su propia fuerza de un viajero? Verdad que la ISAÍAS GAMBOA mía, y, como en ésta, puso ella, simpáticamente el formato, diEl cuento moderno, como la política en nuestros países y para recreo de mi rival, caña.
rigido por Próspero Calderón, novela, es psicológico. Entre aún en nosotros mismos se enCosta Rica, 1901.
mones partidos y alpiste menude quien hay dos fotograbados, los franceses, Maupassant es el tromete en todo.
do y terrones de azúcar. Acaso uno de los cuales dibujo de maestro; suyas son las páginas Respecto del estilo, de lo exterle dé también para que lo picoChinchilla. En todo ban de más subjetivas. Yo me figurovo, de la forma literaria, en fir, PIPI tee su dedito color de rosa. Yo mostrado mucho amore.
el proceso psíquico porque pa el autor de Páginas és un ameQuince lecturas forman el saban sus creaciones: impresiono puedo ver eso, no puedo!
no modernista. Su vocabulario así, gorjeando, gorjeando sumario: el primer artículo es oado del asunto, lo sentía, lo tiene precisión, vigor pictórico Tenía los ojos negros y retristemente, recogió las alas, un ramo sobre una tumba, ra vivía, lo acariciaba largo tiem y aún llega ser gráfico. Esti dondos como dos cuentecillas dejó caer la cabecita y cayó mo de mustias flores de amar. po en so raro cerebro tocado de ma el valor de las palabras y de azabache; la cabeza peque.
gura, las cuales exhalan el locura, hasta que palpitante lo sabe elegir las que ponen en ña, con un moñito de color a.
Cuando su doeba entró, como perfume de los recuerdos; vie. arrojaba de allí.
nen enseguida trece cuentos y relieve la idea; mas le sucede naranjado; las alas casi blancas, todos los días, llamándole Pipor último una nota bibliográen veces lo que muchos es como la cola, y el cuerpo de pl, lloró mucho viéndole inerfica hablo ya de Páginas. Frato critores que tienen sus giros un amarillo pálido, sobre el que te y frío en el fondo de la jaula; de un talento reflexivo de en peculiares: llega a repetirlos destacaban en la abultada pe pero no supo nunca la causa de causadas ideas, y de un delica. Hago esta anotación no por pru chuga onas cuantas plomillas su muerte.
El cuento ha llegado casi dísimo sentido estético, ese libro rito de exigencia crítica, sino negras.
Un espejo colocado en el cacompetir con la novela: ésta, va bien en la corriente de la li porque no querría nada monoto Era feliz; todo lo feliz que marío mientras Pipi dormía, le lienzo amplio, reproduce de u teratura moderna. través de po en el ritmo sonoro de esas puede ser un pájaro prisionero. hizo creer, reproduciendo fielna vez grandes dramas, de los la lectura se descubre el tempe trases. La prosa de Calderón, En su jaula dorada no faltaban mente su imagen, en la existencuales toma aquél las escenas ramento mental, la sensibilidad desprovista de bipérboles de nunca los dulces cañamones y cia de otro pajarito tao dichoso palpitantes y rápidas, que en intensa, las sutiles aptitudes de antaño, rueda tranquila y suave el sabroso alpiste, hojas de riza como él.
sucesión de reducidos cuadros apreciación, lo que constituye como una linfa clara que deja da escarola de lechuga fresca, Le mató la envida, que finge forman la galería de la come al buen observador. No son ver el fondo. Hay libros que y algun terroncillo de azúcar.
la felicidad donde no existe.
dia humana. En el valer de temas vulgares los suyos, sino los arroja uno, interrumpiendo La dueña de Pipí era una MIGUEL RAMOS CARRIÓN.
la producción literaria el cuen trascendentales casi todos. La su lectura, por pesados, soporí linda joven de quioce años. ruto no está en relación de sus oota honda, pasional, predomi feros y lentos, otros por asfixian bia como los trigos, y con los pequeñas proporciones: exige na en el libro, y las escenas de la tes, porque semejan torbe linos ojos azules como turquesas.
talento no comúo; es piedra vida que allí se describen, tie en que la imaginación se marea.
Cuando se acercaba a la jau preciosa que requiere artifice pen vida. La concepción de Entre estos dos extremos está la del pajarito, llamándole Piespecial. Su asunto, como a cada cuento no deja nada que el término medio delicioso, que pi, éste aleteaba, esponjando hora se entiende, es un caso en desear, si bien en la ejecución produce una sensación de bien el dorado plumaje, y la saludatre los acontecimieotos de la se esfumao, las veces, contor estar, como el refinamiento ex ba con sus gorjeos más sonoros.
Siguore, signore. deux Páginas muerto.
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