UNION CATOLICA.
3Por cierto San Carlos, fin de obtener de ellos las Carila. Pues ellos han estudiado 120tos FOLLETIN.
Chalet Corsic, que era el de Vír. Thiers.
porciones indispensables.
años o más que los curas.
que era Thiers uz sejero mus Recepción diplomática. Religión, que es de lo que escriben. Dime: Prudencio. Si; pero no han estudiado simpátios, y muy limpio, a pesar de ET TEEl zi del pasado Octubre, la una de la cirías tú consultar una enfermedad con PEQUEÑEGES. publicano: au mujer, una inergeis: asi, asi.
tarde, fueron recibidos en audiencia públic samos: bastante pasable. Pucs y la cunaun abogado a que te defendiere en 10 Por el Luis Coloma, dz. Mlle. Dosne, la niniz Egeria del Presica, por el señor Presidente, los Excelentisijuicio un médico?
dente. Era cosa graciosisima, verla coser mos señores Romualdo Pacheco y Richard Cecil. Claro que so.
los botones de la bate de son vrail fror!
Cutts Shannon, Representantes de los Es Prudencio. Se atreverían ellos cam! Continuación. Adolphe. Parecía el arte de liares de ir tados Unidos de América.
biar sus papeles, escribiendo el médico de Butrón hizo una profunda señal de asennotario acomodado.
El primero presentó su carta de retiro leyes y el abogado de medicina?
timiento, y la Duquesa, ya amansada del hizo la presentación de su sucesor, quien Cevila. Claro que tampoco.
todo y queriendo remediar su anterior. Era una trinidad deliciosa!
su vez entregó al señor Presidente de la con su ingenuidad de colegiala, desRepública sus credenciales.
Prudencio. Pues entonces por qué arranque, dijo vivamente: han de escribir ni el uno ni el otro de Re ¿Pero podías creer otra cosa. cribió entonces Currita con todos sus porLos discursos cruzados entre el Jefe de ligión? cogiéndole la muñeca en que traía la menores, una picantísima caricatura de los la nación y los dignos representantes de la pulsera de Isabel II, besóle la mano con esposos Thiers; una indecencia verduzca Cavila. Con que es decir, señor gran República y que se registran en la gran cariño, diciendo: publicada en Burdeos y recogida al punto.
Gaceta del 19 de este mes, revelan simpatía quedarme tan bruto como soy, pasar por Prudencio, que no tengo más remedio que Si fueras tú Camarera de la Cisterna, por la policía.
y cordialidad, signo de la perfecta amistad merecerías que se te volviese un grillete mi me proporcionó un ejemplar el un hereje un renegado?
que felizmente existe entre los dos países. Prudencio. No, hombre: tú puedes esta pulsera.
Duque Decazes, y no pude resistir a la teninstruirte todo lo que quieras sin pasar por. No me la habías visto. dijo con mu tación de enviársela por el correo, con una Hemos recibido la segunda parte del cha naturalidad Currita. Me la regaló la fajita, Mlle. Dosne. La cara que pontomo II de los Anales del Instituto Fisico 520ninguna de esas cosas, antes por el contraReina el último día de mi santo.
gráfico nacional, del Prof. Enrique Pittier, rio, recobrando tu fama de hombre de bien dría. Ella que es tan pulcra, tan comeMientras la de Albornoz hablaba, Isabel He aquí el indice de su interesante contenido: y de buen cristiano.
dida. Apuntaciones sobre el clima y geografia de CosCavila. Pues no sé cómo.
Mazacán, muy impaciente, cuchicheaba al á renglón seguido, sin transición ninta Rica, resultado de las observaciones practicaPrudencio. Pues de una manera oído de Butrón, diciéndole: guna, Currita se enterneció profundamente, das en 1889 por Pitrier. La Flora de Costa. Pero qué grandísima émbustera. muy sencilla: antes me has dicho que tú no al pensar en el gozo inmenso que la espeRica por el Dr. Polakowsky. Traducido del irías consultar una enfermedad con un ¡Pero qué modo de inventar historias. raba en Roma, besando la sandalia del Sanalemán por Manuel Carazo Peralta, y anoMentira, Butrón, mentira todo!. Si me abogado ni un pleito con un médico. no tísimo Padre Pío IX. Qué figurà tan gitado por Pirtier. Las minas del Monte del dijo García Gómez, que justamente en el es verdad?
gantesca la del Pontifice. Qué anciano Aguacate y de los Castros, por Melliss, Inge Cavila. Si señor.
Consejillo había dado cuenta el Ministro niero de Minas. Traducido del inglés por Manuel Carazo Peralta, y con notas complementaPrudencio. Pues del mismo modo de Ultramar del deseo de ella, y entonces aquel tan venerable. todas las señoras empezaron ponderar su adhesión al Santo quedó acordado el nombramiento, supuesta rias por Francisco María Iglesias.
no debes consultar las cosas de la Religión la aprobación de la Cisterna. Hoy, hoy Pio IX, prontas sacrificarle vida, hacienAcompañan este importante folleto siete sino con un cura.
Puedes consultar, pueda, todo, todo menos el alma, por tenerla por la mañana, es cuando debe de haber planchas, saber: Mapa demostrativo de las mi des exponerle cuantas dudas te ocurran, nas del Aguacate. Perfil de la carretera nacioido el Presidente del Consejo notificárselo ya de antiguo. comprometida con el diablo.
puedes leer libros buenos.
Carmen Tagle dijo que le había mirado Currita.
nal Puntarenas. Posición relativa de los vaCavila. Pero ¿qué sé yo cuáles son siempre como si fuese su abuelo; la señora rios criaderos. Perfil al través de los criaderos. luego, no bien cesó de hablar ésta, se los buenos?
de López Moreno añadió muy conmovida, Posición relativa de las vetas. Perfil de las apresuró decir en voz alta, con marcado Prudencio. Claro que no lo sabrás, que ella le enviaba todos los años una pipa minas, demostrando los trabajos proyectados. aire de triunfo: Otro perfil de los trabajos proyectados. Plano porque nunca has tratado de averiguarlo. Lo ven ustedes. Lo ven ustedes de doce arrobas, del riquísimo moscatel de general de los criaderos del Aguacate.
pero es la cosa más fácil.
Hoy mismo he cómo era lo que yo decia?. Lo mismo, lo sus soleras jerezanas; y la Duquesa, verdaDamos al señor Pittier las más expresivas gra.
visto anunciado un libro que se titula: mismo que está diciendo Curra, fué lo que deramente indignada, trajo a la memoria cias por el envío. Complemento del Indice Romano, sea me contó mí García Gómez.
los atropellos que cinco días antes se haIndice de los libros prohibidos por el Santo Currita, que tenía sobradísimas razones bían entregado las turbas, apedreando los oficio de la Inquisición Española.
faroles de la iluminación con que celebraVARIEDADES.
Cavila. Oh! Sr. Prudencio. qué para saber que Garcia Gómez debía de haban los católicos el aniversario del Pontifiber dicho cosas muy distintas, dió un par ha dicho usted! Inquisición! ila Inquisi de chupaditas al cigarro, que con tanto hacado del augusto anciano: sólo en el palación! Pues no faltaba más sino que viniecio de Medinacelli, rompieron veintidós faDiálogos de actualidad.
ra usted ahora con la Inquisición.
blar ya se apagaba, y dijo la Mazacán roles, y treinta y siete cristales. mienLos libros prohibidos y los Prudencio. Ja, ja, ja. Pero hom muy despacito. Pues mira; también tengo mi quejilla tras tanto, los Ministros y las autoridades malos periódicos.
bre. tú qué sabes lo que es la Inquisición?
Cavila: No señor, no ni lo sé ni contra. tue García Gómez. Porque como se solazaban en un concierto instrumental, celebrado en Palacio. Qué Gobierno aMinistro de Estado que es, entretiene sus Cavila. Sr. Prudencio!
lo quiero saber.
Prudencio. Hombré, no te enfades! Si Prudencio. Ea, pues ya lo sabrás ocios registrando toda ia correspondencia quél, y qué populacho tan impio y tan asque viene de París.¡Sí, hija mía, sí; no lo queroso!. Siquiera ellas veneraban la perotro día.
yo te dijera que eras mal zapatero, bueno sona del Pontífice, encendiendo faroles en que te enfadaras; pero te digo que no sabes Cavila. No señor; ni otro día, ni defiendas. En el gabinete negro se. abre toda la correspondencia antes de que llegue honra suya, y limitábanse tan sólo ape.
lo que no has estudiado.
ahora, ni nunca: no quiero oir hablar de la Cavila. Pero he leído tanto como usted.
drear a todas horas la moral divina del Dios Inquisición. su destino, y por eso pudo decir en el Prudencio. Bien, hombre, bien, Consejillo, que ayer vino para mí una cará quien aquél representaba.
Prudencio. Tanto como yo, no, porque pues no hablaremos: cálmate oye lo que ta de la Reina, que debió probar al Minisya sabes que, gracias a Dios, tengo una poEsto no lo dijeron, por supuesto, aquete iba a decir. Hay en Roma una Con. terio todo lo absurdo de sus pretensiones.
sición desahogada, no tengo necesidad de llas señoras; pero lo pensó sin decirlo, don gregación de hombres sabios en todas las Comprendieron todos, y Butrón el pritrabajar para comer, y puedo, como lo haCasimiro Pantojas, que atentamente las esciencias, quienes el Papa manda exami mero, qué carta aludía Currita, y exclago, dedicar dos o tres horas diarias leer cuchaba, después de haber desorejado nar los libros sospechosos de herejía. Si maron en coro general, que dejaba sobretoda una desdichada familia de conejitos de muchos y buenos libros, además de lo poco que estudié de chico.
Aun así no tengo después de examinados con mucha deten salir bastante las sordas notas de la envidia: porcelana, y arrancado los rabos de una ción ven que tienen errores contra la fe. Te ha escrito la Reina. pretensiones de saber mucho; porque para parejita de bull dogs, fabricados en Bristol.
entonces anotan el título del libro y el nom. Sí, replicó. Currita; me escribe invi.
saber discurrir y disputar sobre una ciencia en esto concluyó Isabel Mazacán su cualquiera, se necesita haberla estudiado bre del autor en un cuaderno que tienen tándome para la primera Comunión del aparte con el Marqués de Butrón, y disculpándose con Cuirrita de no acompañarla desde sus fundamentos, y no dedicarse propósito, y que por esto se llama Indice. Príncipe Alfonso en Roma.
Cada medio año, la Congregación publica se quedó mirando de hito en hito a otra cosa; y la ciencia de la Religión no la visita de la Inclusa, por Habérsele ya helos libros anotados en el Indice, que luego Isabel Mazacán; cuyas misteriosas ganas cho tarde, se marchó, al parecer, algún creas tú que es más fácil que otra cualdan conocer las revistas y periódicos cam de acompañar a la Reina destronada en quiera. si no mira los curas; estudian tanto disgustada. Currita decidió entonces volverse a su casa, y el Marqués de Bucátorce quince años de carrera, y después tólicos, y aquí tienes por donde podemos aquella expedición, eran de todos conoci.
siguen estudiando toda su vida. Pues bien: saber fácilmente cuáles son los libros prohi das. Esta, que hacía largo rato sentía fu: riosos hormigueos en la lengua, se aprestó trón se despidió también en el acto.
bidos. Hay otros libros que los tiene ya así como tú no te atreverías disputar soltar algunas de sus crudezas. Pero prohibidos la Iglesia, sin necesidad de ver ¿Tiene Ud. coche, Butrón? pregunto acerca de leyes de medicina, tampoco Butrón, que no cabía en sí de gozo, al ver c! la al diplomático.
debes disputar acerca de religión, porque Cavila. Qué barbaridad!
que su pifia diplomática quedaba orillada. No, respondió éste presuroso, apro)no la has estudiado.
se apresuró detenerla, llevándosela. al vechando la ocasión que tan pronto se lo Cavila. Pero es que de religión todo el Prudencio. Aguarda, hombre, ahueco de una ventana, donde por algún ofrecía, de hablar solas con Currita.
mundo habla y escribe, y por eso todo el guarda: no juzgues tan de ligero. No satiempo dialogaron vivamente.
mundo puede leer y disputar.
bes tú dónde venden buen vino, sin necesi.
Pues le llevaré Ud. en mi beriina Mientras tanto, Currita, con la vaga miPrudencio. Pues es que a todos los que dad de probarlo?
rada fija en el espacio, como era siempre donde quiera.
hablan y escriben de religión sin haberla Cavila. Claro que sí, porque de su extraña costumbre mientras hablaba, no la calle de Isabel la Católica. Ten.
estudiado, sin saber siquiera el catecismo, masiado se sabe ya el que echa agua y el los perdía de vista, trazando al mismo go que hacer en la Embajada alemana.
les diría yo lo mismo que tí; porque que no la echa.
tiempo su itinerario. principios de Julio Justamente me coge el paso.
Prudencio. Pues del inismo modo pensaba marchar con Fernandito Bélgica, aquello de zapatero tus zapatos tiene se conoce a los que escriben buenos libros perfecta aplicación a los abogados. los para pasar un mes escaso con Mariano Currita bajó las escaleras apoyada en el médicos, etc. etc. que no teniendo pleitos y los que los escriben malos: por eso es Osuna, en su castillo de Beauraing; desbrazo de Butrón, encontrando al pie. que defender ni enfermos que visitar se de tán ya condenados los nombres de algunos pués, no sabía punto fijo donde iría es berlina, preciosa nroneria, verdadero juguedican escribir de lo que no entienden. escritores que están acreditados de impíos, perar el 15 de Octubre, fecha en que estate forredo de raso azul con botones de ter.
Figúrate tú, por consiguiente, cuántos dis y todas cuantas obras escriben están prohiba citada con la Reina en Marsella, para ciopelo, que parecía el delicado estuche parates; cuántas herejías y cuántas barba bidas: como por ejemplo, las novelas de emprender el viaje a Roma: quizá fuera destinado guardar una joya.
ridades dirán en una materia que no conoPaul de Kock, de Eugenio Sué.
Trouvillc. El verano anterior lo habia pacen ni aún por el forro.
Cavila.¿De veras. sado alli en una silla preciosa, frente ai L los. 99 وجود Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.