LA UNION CATOLICA Sg8 ca CO.
se hicieron terror del mundo todas en si El orden que la armada llevaba cra és cesado el viento le fué forzoso al enemigo ya, y la Capitana Doria: pero éstas se colas han consumido. Pensáis que basta te: La avanguardia guiaba Andrés Doria amainar, y poner mano al remo. Acome braron luego.
esto para su sed y codicia. Qué no han con 54 galeras de gallardetes verdes por tieron los unos los otros, y comenzaron Los turcos que pudieron se pusieron en intentado después acá? No se los escon senal, y con orden de tomar el lado dere la batalla con gentil denuedo y extraña huída, y principalmente se escapó Ochali dieron los apartados Indios. Cercaron cho al tiempo de combatir. Seguíale el porfía de ambas partes.
con sus galeras. Tardáronse otras dos ho.
Bengala, inquictando el más remcto ocea señor don Juan de Austria General de la Conocieron los nuestros la Capitana ras en acabar de coger los despojos, por no de Oriente. Apretaron Malta, gana Armada, con 66 galeras de gallardetes Real del Turco en los tres Fanales y ser el número de los enemigos tan grande ron Hungria y Rodas en nuestros tiem. azules, al cual tocaba el cuerpo de la bata muchos estandartes que traía: por lo cual (que según afirman algunos autores llegapos. Ahora olvidado Selín del derecho lla. Después Sebastián Venero General de su Alteza mandó al Cómitre, y al que go ban ciento y treinta mil) y tan valientes de las gentes, como si no fuera hombre. Venecia, con 54 galeras de gallardetes bernaba el timón, que derechamente fuese y ejercitados los capitanes que traían, y los envía tiranizar Chipre contra la amistad amarillos, que había de llevar el lado iz combatir con la Real del Turco. Traia soldados tan animosos, no fué posible dejar y contra el juramento que con la Repúbli quierdo. El postrero iba el Marqués de ésta seis galeras por popa que la fuesen ce de ser muy costosa la victoria. Aunque, si Venecia tiene hecho. Es necesario Santa Cruz con 30 galeras de enseñas blan bando de soldados, y en ella venían tres no fué don Bernardino de Cárdenas y Agusle hagamos resistencia, quebrantando su cas, que servían de retaguardia, y llegada cientos arcabuceros, más ejercitados, y tin Barbarizo, el procurador Veneciano, arrogancia, no nos ocupe ese solo camino la ocasión habían de ser socorro para la cien arqueros soldados muy valientes. Em que de las heridas que sacaron vinieron que para ganar el Sepulcro de Cristo nos parte más necesitada. Sin ellas estaban bistiéronse. ambos, pasado el humo de la morir, muy pocos hombres de cuenta falleha quedado. Por ventura Dios Nuestro repartidas diez velas para socorro de la ga batería, y habiéndose aclarado el cielo, y cieron. De los enemigos murieron más de Señor, que siempre mezcla la misericordia lera real del General, y de las de mayor por ser la contraria más alta, entró su es treinta y cinco mil. entre ellos ciento y entre la ira, nos despierta con este golpe importancia. Iba algunas millas adelante polón en la nuestra hasta el segundo ban. veinte Capitanes de cuenta, y cuatro Capi.
para grandes empresas. Vencida puede don Juan de Cardona para con tiempo Llevaba esta Capitana de su Alteza tanes de Fanal; y de los nuestros murieron ser esta gente: no desmayenios. Con el descubrir al enemigo.
cuatrocientos alcabuceros de los del tercio seis mil. Pusiéronse en libertad quince mil afecto de padre os ruego, por los misterios Llegaba nuestra armada, con este orden, de Cerdeña, cuyo Maestre de Campo era forzados Cristianos.
de la sangre de Jesucristo que concluyáis las islas que llaman de los Esforzolares, Lope de Figueroa, y uno de los Capi. Las galeras enemigas que vinieron poesta liga. Después convidaremos los 7 de Octubre, domingo por la mañana, tanes era Juan Vázquez de Coronado, Ca der de los de la Liga fueron ciento y setendemás Principes, que parece imposible no cuando descubrió la enemiga no lejos del ballero de la Orden de San Juan. Con ta, éstas muy sanas y, enteras, sin otras más.
les mueva causa tan pia.
golfo de Lepanto.
ellos estaba don Bernardino de Cárdenas, de cuarenta que echaron fondo inuy malMovidos de tan sabias y vivas razones Mandó entonces el señor don Juan que don Miguel de Moncada, y otras personas tratadas. Prendieron tres mil cuatrocientos los diputados comenzaron luego tratar de las seis galeras que traía fuesen adelante, de mucha calidad. El fogón guardabadon y setenta Turcos, sin dos hijos del Bajá, y condiciones con los cardenales nombrados las cuales antes de embestir las armadas, Pedro Zapata con una escuadra, y el es otros algunos de rescate. Los despojos de por el Pontífice. Nacieron muchas dificuldispararon la mucha y gruesa artilleria que quife don Luis Carrillo, hijo del Conde de dinero, brocados y sedas de diferentes cotades que la vigilancia y paciencia de Pio llevaban, con que la armada enemiga reci Pliego y los que estaban en guarda de la lores, fueron muy ricos. Murieron en la Quinto pudieron vencer, y fue nombrado bió notable daño. Su Alteza salió en una persona del señor don Juan, eran don Ro batalla los Bajáes, Virreyes y Gobernadores por él mismo, en representación de todos, fragata, y anduvo ordenando la batalla de drigo de Benavides, don Luis de Cardona, de los Reinos y Provincias siguientes: Ali el príncipe Juan de Austria, hermano galera en galera, con tanta destreza, con don Juan de Guzmán, don Felipe de He Bajá, el General, Gartán Bajá, Jafer Bajá, de Felipe Segundo, como general de la ar ser la primera de mar en que se había vis redia, Ruy Diaz de Mendoza y Juan de Azam Bajá, hijo de Barbarroja, el que fué mada cristiana. Corcluyóse esta santa liga to (no teniendo edad más que veintidós Soto, Secretario de su Alteza. El Co Rey de Argél, Dardagambal Bajá, Garaá 20 de Mayo de 1571, y jurose solemneaños. como lo pudiera hacer el más diestro mendador Mayor don Luis de Requesens they, hijo de Ochali, Gidor Gobernador de mente en el Consistorio, y cinco días desy ejercitado capitán del mundo; y habiendiscurría por todas partes, animando los la Isla de Chío, Malamut Edibey, Goberpués se publicó con universal alegria. do animado los soldados, representando que peleaban, nador de la isla de Matelino, Mustafa CeLa Majestad Católica dió luego orden les el premio de honor y riquezas que gaCombatíase valentisimamente con ex lebí, Pagador General, Perbigaza, Goberde lo necesario para la empresa. el ge narían venciendo, y la eterna gloria que traña furia de la una y la otra parte, sin nador de Nápoles de Romanía, dos hijos neral della don Juan de Austria pasó en conseguirian muriendo por si fe y Reli. que por espacio de dos horas se conociese de Cara Mustafá, un hijo de Siroco, CaraItalia por el mes de Agosto, y recogiendo gión en tan justa empresa, volvió su ga por ninguna de ellas la victoria. En la cosa, Alcaide de la Belona Ceraxio, Solisus galeras y las del Pontífice, se fué al lera capitana, muy contento del ánimo y mayor porfía de la batalla mandó el Bajá mán y Caset Grandes Capitanes, y Mahupuerto de Mesina en Sicilia, adonde se havaleroso denuedo que en todos había coque una de las galeras que traía de refres met Bey, Gobernador de Negroponte, sohía de hacer la reseña del ejército, y habían nocido. El enemigo se hallaba muy puco de gente escogida, con que iba ceban brino de Barbarroja.
de acudir los confederados con todas las jante con viênto en popa y. con gentil brio do su Real Capitana, embistiese por popa Túvoše la victoria por milagrosa. Los fuerzas. Habia en Nápoles recibido el Sr. de acometer pelear, y venían sus baje la recia batéria que la suya deba por la Capitana nuestra, para divertirle de esclavos turcos confesaron håber visto ánD. Juan el bastón y éstandarte de la liga les partidos en très escuadrónes, aunque.
de mano del cardenal Grambela, bendecido en forma de media luna.
proa. Acudió esto muy tiempo el geles con espadas desriudas sobre nuestras uno y otro de Pio Quinto. Su Santidad El General Al Bajá traía el cuerpo de Marqués de Santa Cruz; porque advirtien galeras. Por esto en la sala real del Vatido cano se pintó San Pedro y San Pablo, y le envió una embajada con Monseñor Odes. la batalla con ochenta y cuatro galeras: arrancaba para esto la galera eneque un ejército de ángetes que por la armada calco, en que le pedía diese batalla al. eneMahomet, Virrey de Negroponte, llevaba miga, arremetió ella con la suya y la rindió antes que pudiese hacer el efecto que de la Liga peleaban contra el poder del migo, interponiendo cuanta autoridad tenía al lado derecho en compañia de Siroco Vi llevaba pensado; y aun pudo el Marqués infierno, y se batieron medállas con la de parte de Dios, y asegurándole la victorrey de Alejandría, con ochenta galeràs::y meter gente de socorro (como lo hizo) en misma pintura. También, según los más ria. Prometióle también su Alteza el pri el lado izquierdo tenía Luchali Rey de Ar la Real de su Alteža.
mer Estado que ganase al turco, fuera de gel, renegado Calabrés, y gran corsario, quierdo y derecho no se peleaba con meEn los lados iz cursados de aquellos mares, fué. contra la: naturaleza de ellos la mudanza del aire, los capitulados en las condiciones, de tener con otras ochenta galeras.
nos furor; pero toda la importancia de la que siendo favorable al enemigo, al tiempo.
cuidado particular de su aumento, y de reVenían en socorro de estos tres escuacibirle en lugar de hijo.
batalla erà la que se hacían las dos galeras del acometer se volvió contrario, aunque: drones otras muchas galeras, galeotas y Reales; adonde los turcos acudían de nue allí después de medio día suelen esforzarle Ayunó el ejército por orden del Pontifivelas menores: de manera que traían dosce tres días, recibiendo todos los sacramen.
vo de las galeras que tenían por popa. los vientos de tierra. Con esto cegaba el cientas y treinta galeras Reales, sin las de Era esto de manera, que por muchos tos de penitencia y eucaristía; y con benhumo los turcos, y el sol que al nacer más fustas.
que caían no se conocíà la falta, porque daba en rostro los nuestros, estando en dición les otorgó el ounció de Su Santidad Ya que llegaban tiro de cañón mandó luego suplían y sucedían otros en sus pues más de la mitad del cielo, cuando comenlas indulgencias que concede la Iglesia su Alteza enarbolar un Crucifijo y varias tos. Tres veces fué ganada y: rendida zaron a combatir hería en los ojos los los conquistadores del Sepulcro de Cristo.
imágenes de la Reina del cielo, Maria, es hasta el árbol, y otras tantas por la multi contrarios. Pareció del cielo la seguridad.
Proveyó los bajeles de frailes de Santo Dotrella del mar, y con fervorosa devoción tud de los túrcos y. su valor, fueron los de ánimo de los cristianos, y el poco cuimingo, capuchinos y de otras Ordenes y puestos todos de rodillas, hicieron oración nuestros expedidos délla. Ya se iba dado que de huir tuvieron, pues el señor de sacerdotes seglares; los cuales con continuas amonestaciones corregían los sol suplicando la divina Majestad no diese inclinando la victoria los cristianos, por: don Juan para hacer mayor plaza en qué que muchas de nuestras galeras iban rindados. todus dió Agnus Dei y Rosarios lugar que los pecados de la cristiandad pelear desbanco su galera, como si morir fuesen parte para dar esta victoria los diendo a las enemigas; y en la Real del vencer fuera el fin de aquel dia.
benditos, que con gran fervor en su nomenemigos de su nombre, sino que mirándo Turco había muertos más de cuatrocientos bre recibieron. Prohibió el embarcar nuNo quiso Dios nuestro Señor tener susjeres; y demás desto mandó căstigar de les; de manera que la fe de Cristo fuese nos con piadosos ojos favoreciese sus fie genizaros, sin los heridos, que eran en número excesivo, mostrando fiáqueza los popenso al Santo Pío Quinto mucho tiempo: muerte lós blasfemoš.
ensalzada. Los Comisarios de su Santidad y así con embajada suya le avisó al instancos que en pie quedaban, algunos de los Antes de embarcarse hubo controversias publicaron las indulgencias que el santo cuales se echaban al agua, pensando esca El día de la victoria, domingo siete de si convenía dar la batalla o no, y se propu Pontífice habia concedido los que mu par la vida nadando.
Octubre, después de medio día, se paseaba soʻlà causa en Consejo mayor, adónde enrieren peleando.
Llegó en esto por popa don Lope de con el tesorero, y súbitamente se, apartó traban como treinta personas, las más calidél y abrió una ventana mirando al cielo Hecha oración, y dicha particularmente Figueroa, y derribó el estandarte. Real del ficadas, y más diestros capitanes de todo el como suspenso. Cerróla de ahí;á un poco, en cada galera la confesión general, absuel Turco, y un soldado de los suyos dió una éjército. Contra Andrés Doria, que no creía y dijo al tesorero: Andad con Dios, no es tos todos por los Religiosos y Sacerdotes estocada al Bajá sin saber que fuése el Geprudente acometer, se levantaron los espa seglares culpa y pena, como a gente rieral, aunque de un balazo estaba ya matiempo de negocios, sino de dar gracias ñoles el Marqués de Santa Cruz, Alvaro que estaba en el artículo de la muerte, lamente herido. Habiendo conocido quien Jesucristo, porque nuestra armada en este Bazán y el Conde de Pliego pidiendo que mandó su Alteża tocar las trompetas lä era le cortaron la cabeza y poniéndola allá punto ha vencido. Ibase, y volviendo la se presentase batalla, confiados en el valor batalla, haciendo la señal para acometer.
cabeza vió al Pontifice postrado delante de en una pica, con grande aclamación apellide los soldados y advirtiendo que tal era Fué cosa maravillosa que en un punto daron. Victoria. Victoria! y enarbolaun Crucifijo que tenía siempre adonde esla orden de Pio Aprobóse este parecer se alzó el viento, que le tenian próspero ron un Cristo en la popa, en el mismo lutaba (y por eso le pintan con él en las maen coriformidad de la mayor parte, y con los enemigos, y daba en los ojos los gar adonde derribaron el estandarte.
nos. Por parecerle al tesorero cosa granesa resolución salieron de Mesina los 16 nuestros, que era notable estorbo por Con esto desmayaron los enemigos, y ve, y en que se disminuiría la autoridad del de Setiembre, habiendo hecho alarde y re remar las galeras contra el viento.
santo Pontifice Pío Quinto no salir cierQue de ahí en adelante todo fué rendir bajeles, seña general, en la cual hallaron 000 esdó el mar en calma, tan quieto y sosecasi sin resistencia. En algunas partes se to, lo disimuló como hombre cuerdo, 90pañoles lucidísimos, de los cuales, Soo eran gado, que pareció cosa de milagro, y que habían mostrado los turcos muy valerosos, tando sólo por escrito el día y la hora, y caballeros y personas de oficios de calidad; el mismo mar queria ver de propósito los y tenían presas diez y siete galeras de Vé averiguó ser el mismo en que los nuestros 12, 000 italianos, 00) tudescos, y otros dos más poderosos ejércitos del Diundo necia, una de Malta, que peleó con extraalcanzaron la victoria. Pero un cardenal, 2, 000 advenedizos.
contender sobre su posesión. Por haber ño valor y porfia, dos del Papa y de Sabo que cerca estaba, lo entendió todo, y lo te.
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