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Hombres de Para vosotros Iglesia; Hermanos en el Episcopado, Sacerdotes. Religiosos Religiosas!
Para vosotros miembros de nuestro Laicado y Fieles todos!
sinceros de otras Religiones para que se desarrolle el amistoso diálogo iniciado con ellos y para que juntos podamos colaborar por la paz mundial ante todo deberemos pedir a Dios para nosotros mismos humildad y amor, con el fin de dar a la profesión limpida y constante de nuestra fe la virtud atrayente de la reconciliación y el carisma fortalecedor y grandioso de la paz. terminamos con este saludo de bendición: la paz de Dios que sobrepasa toda inteligencia guarde vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús (Fil. Vaticano. de diciembre de 1974.
Paulus P. VI.
Hay que en 20 LA PEPUBLICA, Lunes de enero de 1975 No basta.
aquellos trabajos que todos juntos podemos llevar a cabo para que nuestra (Vlene de página 5)
generación mejore (Constitución Gaudium et Spes, 82. sabios, estudiosos de la historia de es precisamente con vistas a los Pueblos. Nós también, inerme en medio de las rivalidades del esto por lo que nuestro mensaje se mundo, pero fortalecido con la despliega en torno a su punto caracteristico e Palabra divina, lo hemos inspirador, dicho: todos los hombres son afirmando que la Paz en tanto vale hermanos. Finalmente, la cien cuanto aspira a ser interior vilización entera ha admitido este antes de ser exterior.
Hay que desarmar los espíritus, si es que principio fundamental. Por lo tanto, si los hombres son her.
queremos impedir de manera eficaz el recurso a las armas que manos, pero surgen todavía entre hieren los cuerpos.
ellos nuevas causas de conflicto, es necesario que la paz se convierta proporcionar a la Paz, es decir, a en los hombres todos, las raíces una realidad operante y orientadora. Hay que hacer la espirituales de una forma común paz, hay que producirla, hay que de pensar y de amar: no basta, inventarla, hay que crearla con escribe Agustín, maestro ideador de una ciudad nueva, no basta ingenio siempre vigilante, con para asociar a los hombres entre si voluntad siempre nueva e inla identidad de naturaleza; se hace cansable. Por eso estamos todos persuadidos del principio que necesario enseñarles a hablar un mismo lenguaje, es decir, informa la sociedad a contemporánea: la paz no puede ser comprenderse, a poscer una cultura común, a compartir los ni pasiva, ni opresiva; debe ser misnios sentimientos: de inventiva, preventiva, operativa.
lo Vemos con satisfacción que contrario, el hombre preferirá encontrarse con su perro antes que estos criterios orientadores de la con un hombre extraño (cfr. De vida colectiva en el mundo son Civitate Dei. XIX. VII: PL 41, universalmente reconocidos hoy 634. dia, al menos en líneas de prinEsta interiorización de la Paz es cipio. De ahí que nos sintamos en verdadero humanismo, verdadera el deber de dar las gracias, de civilización.
hacer el elogio, de animar a los hombres responsables y a las instiAfortunadamente está ya tuciones destinadas actualmente a camino. Madura con el progreso promover la paz en la tierra por del mundo. Halla su poder de haber escogido, como primer artículo de su programa de acción.
persuación en las dimensiones este axioma fundamental: sólo la universales de las relaciones de to.
paz engendra paz.
da clase que los hombres están estableciendo entre sí. Es una labor lenta y complicada, pero que, Dejadnos pues. Hombres todos, por muchas razones, se impone repetir de manera profética el por si misma: el mundo camina mensaje del reciente Concilio hacia la unidad. Sin embargo no ecuménico, hasta los confines del horizonte: Debemos empeñarnos podemos hacernos ilusiones: al mismo tiempo que la pacifica con todas nuestras fuerzas a concordia entre los hombres se va preparar una época en que, por difundiendo, través del acuerdo de las naciones, pueda progresivo descubrimiento de la prohibirse absolutamente cualquier tipo de recurso a la guerra.
función complementaria e terdependiente de los Países; de. la paz ha de nacer de la mutua los intercambios comerciales; de la confianza de los pueblos y no debe difusión de una misma visión del ser impuesta a las naciones por el hombre, por lo demás siempre terror de las armas. Los que gobiernan a los respetuosa de la originalidad y de lo especifico de las diversas cul pueblos, que son garantes del bien turas; a través de la facilidad de común de la propia nación y al los viajes y de los medios de mismo tiempo promotores del bien comunicación social, etc. de.
de todo el mundo, dependen bemos notar que en la actualidad enormemente de las opiniones y de van consolidando nuevas los sentimientos de las multitudes.
formas de recelosos Nada les aprovecha trabajar en la nacionalismos cerrados en sus construcción de la paz mientras manifestaciones de toscas ri.
los sentimientos de hostilidad, de validades basadas en la raza, la menosprecio y de desconfianza.
lengua, la tradición. Hemos de no los odios raciales y las ideologias tar también que permanecen siobstinadas, dividen a los hombres tuaciones tristisimas de miseria y y los enfrentan entre sí. Es de de hambre, surgen potentes exsuma urgencia proceder a una presiones económicas mulrenovación en la educación de la tinacionales. cargadas de anmentalidad una nueva Tagonismos egoistas: se organizan orientación en la opinión socialmente ideologias CXpública.
clusivistas y dominadoras. Hacen Los que se entregan a la tarea su explosión conflictos territoriales de la educación principalmente impresionante facilidad. de la juventud, forman la sobre todo las armas mortiferas, opinión pública, tengan como gracapaces de hacer destrucciones cavisima obligación la preocupación tastróficas, aumentan de número y de formar las mentes de todos en de potencia, imponiendo de este nuevos sentimientos pacificos.
modo al terror el nombre de paz. Tenemos todos que cambiar Si, el mundo camina hacia su uninuestros corazones, con los ojos dad, pero a la vez aumentan puestos en el orbe entero y en con חו terrorificas hipótesis que proyectan un horizonte con mayor posibilidad mayor facilidad.
mayor terror de choques fatales, los cuales. bajo ciertos aspectos, son considerados inevitables y necesarios, como si los reclamara la justicia. Llegará el día en que la justicia no sea hermana de la paz, sino de la guerra. Cfr. Agustin, ib. No jugamos a las utopías, ya sean optimistas o pesimistas.
Queremos atenernos a la realidad.
la cual, con esa fenomenologia de esperanza ilusoria y de lamentable desesperación, nos advierte una vez más que algo no funciona bien en la máquina monumental de nuestra civilización; ésta podría explotar en una indescriptible conflagración por un defecto en su construcción. Decimos defecto y no falta: es decir, el defecto del coeficiente espiritual que sin embargo admitimos que está ya presente operante en la ceonomia general del pacifico desarrollo de la historia contemporánea y que es digno de todo Tavorable reconocimiento y aliento; no hemos asignado a la UNESCO nuestro premio que lleva el nombre del Papa Juan XXIII.
autor de la Encíclica Pacem in terris Pero nos atrevemos a decir que hay que hacer más, hay que valorizar de esta forma y aplicar el coeficiente espiritual para hacerlo capaz no sólo de impedir los conflictos entre los hombres y de predisponerlos sentimientos pacificos y civiles, sino también de producir la reconciliación entre los mismos hombres, es decir, de engendrar la Paz. No basta reprimir las guerras, suspender las luchas, imponer treguas y armisticios. definir confines relaciones. crear fuentes de inTereses comunes, paralizar las hipótesis de contiendas radicales mediante el terror de inauditas destrucciones y sufrimientos: no basta una Paz impuesta, una Paz utilitaria y provisoria; hay que tentler a una Paz amada, libre.
Iratera, es decir. fundada en la reconciliación de los ánimos.
Lo sabemos que es dificil; más dificil que cualquier otro método pero no es imposible: no es pura fantasia Nuestra confianza está puesta en una bondad fundamental de los hombres y de los Pueblos. Dios ha hecho saludables las generaciones (Sab. 14. El esfuerzo inteligente y perseverante por la mutua comprensión de los hombres, de las clases sociales, de las Ciudades, de los Pueblos de las civilizaciones entre si no es esteril Nos alegramos. de manera especial en vísperas del Ano Internacional de la Mujer, proclamado por las Naciones Unidas de la participación cada vez más amplia de las mujeres en la vida de la sociedad, a la que ofrecen una aportación especifica de gran valor, gracias a las cualidades con que Dios las ha adornade: intuición, creatividad. sensibilidad, sentido de piedad y de compasión. amplia capacidad de comprensión y de amor permiten a la mujer ser de manera muy particular, artifice de la reconciliación dentro de las familias y de la sociedad.
Asimismo, es para Nos motivo de especial satisfacción el poder comprobar que la educación de los jóvenes para una nueva nien.
talidad universal de la convivencia humana, mentalidad no escéptica.
ne vil. no inepta, no olvidadiza de la justicia. sino generosa y amorosa, ha comenzado ya y ha hecho progresos: posee inprevisibles recursos para la reconciliación y ésta puede indicar el camino de la Paz, en la verdad.
en el honor, en la justicia, en el anior, y por tanto en la estabilidad en la nueva historia de la humanidad.
Reconciliación! Hombres jó.
venes. hombres fuertes, hombres responsables hombres libres, hombres buenos: pensais en ella. No podrá esta mágica palabra entrar en el diccionario de vuestras esperanzas, de vuestros éxitos.
Este éste es para vosotros nuestro mensaje de esperanza: la reconciliación es el camino hacia la paz!
El mensaje sobre la reconciliación como camino hacia la Paz exige un complemento, por más que esto vosotros ya lo sabeis y lo teneis presente.
No es sólo una parte integrante.
sino esencial de nuestro mensaje.
como sabeis. Porque nos recuerda a todos que la primera e indispensable reconciliación que hay que conseguir es la conciliación con Dios. Para nosotros los creyentes. no puede haber otro camino hacia la paz distinto de este: es más, en la definición de nuestra salvación coinciden reconciliación con Dios y paz nuestra, la una es causa de la otra.
Esta es la obra de Cristo. El ha reparado la ruptura que produce el pecado en nuestras relaciones vitales con Dios. Recordemos a este respecto, entre otras, aquellas palabras de San Pablo: Todo es de Dios que nos ha reconciliado con El por medio de Cristo (2 Gr. 18. El Anto Santo que estamos para comenzar quiere suscitar nuestro interés por esta primera y feliz reconciliación: Cristo es la paz: El es el principio de la reconciliación en la unidad de su cuerpo mistico (cfr. Eles. 14 16. 10 anos de la conclusión del Concilio Va.
ticano Il haríamos bien en meditar más profundamente el sentido teológico y eclesiológico de estas verdades básicas de nuestra fe y de nuestra vida cristina.
De ahí, una consecuencia lógica y obligada y al mismo tiempo fácil. si de veras estamos en Cristo: debemos perfeccionar el sentido de nuestra unidad; unidad en la Iglesia. unidad de la Iglesia; comunión mística, constitutiva la primera (cfr. Cor. 10; 12, 1227. restauración ecuménica de la unidad entre todos los cristianos la segunda (cfr. Decreto conciliar Unitatis redintegratio. una y otra exigen una propia reconciliación que debe aportar a la colectividad cristiana aquella paz que es un fruto del Espíritu, consiguiente a la caridad y a su gozo (cfr. Gal.
22. También en estos campos debemos hacer la paz. Llegará ciertamente a vuestras manos el texto de nuestra Exhortación sobre la reconciliación dentro de la Iglesia publicada en estos días; os pedimos en nombre de Jesucri.
te que meditéis este documento y que saquéis propósitos de reconciliación y de paz. Que nadie piense en eludir esta indeclinable exigencia de la comunión con Cristo, la reconciliación y la paz.
aferrándose a sus habituales posturas de contestación para con la Iglesia: procuremos por el contrario que todos y cada uno den una nueva y leal contribución a esta filial, humilde. positiva edi.
ficación de esta Iglesia suya. No recordaremos las postreras palabras del Señor, como apología de su evangelio: Para que alcancen la unidad perfecta: y conozca el mundo que Tu me enviaste 17. 23. No tendremos el gozo de ver a los hermanos resentidos y lejanos que vuelven a la antigua y gozosa concordia. Deberiamos orar para que este Ano Santo dé a la Iglesia Católica la inefable experiencia de la restauración de la unidad de algún grupo de Hermanos, tan próximos ya al único rebaño, pero que titubean aún a traspasar el umbral. oraremos por los seguidores Oduber. Vlene de página 5)
nuevo. para orar, reflexionary comprometernos a trabajar por la paz. En medio de la alegria propia de ese día festivo creo que nos haria gran bien a todos poner una nota de seriedad reflexiva que nos lleve a una búsqueda sincera y diligente de la paz. El lema con el que el SANTO PADRE ha querido celebrar está próxima Jornada Mundial de la Paz es ocasión propicia que nos oblig a los costarricenses a sentimos de manera especial comprometidos en su celebración.
El lema es éste: LA RECONCILIACION CAMINO HACIA LA PAZ Quien conoce nuestra historia, quien convive nosotros, quienes hemos nacido en este suelo tenemos conciencia de una característica que distingue nuestra nacionalidad: el amor por la paz y la pacifica convivencia dentro del respeto a las leyes y del sistema democrático de nuestro pueblo, nacionales y amigos que por diversas razones viven con nosotros Nuestro mismo Hinmo Nacional es una exhortación al trabajo por la paz, al mismo tiempo que la expresión de un anhelo nacional: vivir dentro de la pacifica convivencia en la que con libertad todos pueden ejercer sus derechos y deberes con todos y para el bien de todos. Como todos los pueblos el nuestro ha sufrido momentos de profunda agitación hasta de violenta confrontación de ideas y de hombres, sin embargo, siempre ha renacido nuevamente la paz fruto de la reconciliación ciudadana. Algunos podrán ver en esta reconciliación la vuelta normal de las aguas a su nivel. Nosotros, en cambio, sabemos que es sobre todo fruto del esfuerzo voluntario de todos y cada uno de los costarricenses por encontrar en el diálogo, el perdón y aún en la acomodación el camino hacia la paz. Costa Rica es un país con grandes problemas, no lo podemos negar. Problemas que exigen solución inteligente, justa y rápida. Los costarricenses hemos escogido por voluntad propia el camino no de la violencia, sino de la búsqueda pacífica, del encuentro de ideas, del esfuerzo democrático de la exposición se vera y vigorosa de puntos de vista y opiniones diferentes y sobre todo el sentimiento y la conciencia de que somos hermanos y como tales hombro a hombro hemos de luchar por vencerlos, logrando una patria más feliz y libre. Hemos logrado una sociedad que aspira a una mayor justicia y progreso, pero dentro del mutuo respeto. Debemos agradecer a DIOS la Gracia de poder decir que (Pasa a la página 21)
se a TOBEADO potente Dura. Viene de página 5)
El control de precios lo ejercen patrullas de la Guardia Rural que recorren todo el país, para lo que realizan Inspecciones periódicas a todos los establecimientos comerciales.
Las denuncias contra los Infractores del año anterior fueron presentadas en su oportunidad ante las agencias Judiciales correspondientes, de acuerdo al siguiente desglose: 687 en San José; 509 en Puntarenas, 316 en Limon 266 en Alajuela, 220 en Guanacaste, 180 en Heredia y 84 en Cartago.
Para el presente año la Guardia de Asistencia Rural espera contar con mayores recursos, a fin de mantener un control más estrecho de los precios, especialmente de productos báskos.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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