LA REPUBLICA, lunes 22 de diciembre de 1975 11 la hora muerta!
Yo no soy tomador. Yo soy de los que tomo porque no tengo otra cosa que hacer. eso me dije durante mucho tiempo y asi nació mi hora muerta. Esa hora que yo pretendi «llenar»
bebiendo con los amigos. Gente como yo que huia de sus responsabilidades refugiándose en el licor.
Mi esposa. mis hijos. cuán poco me importaban.
Cuán poco sabía yo lo que sentían. sintiéndose menos importantes que mis tragos! Hasta que un buen día algo me llegó muy adentro: uno de mis hijos, el mayorcito, me pregunto que por qué solo me veía los domingos. que cuando sus amigos hablaban de sus papo él no sabia que decir. Porque no sabía nada de mí. eso me puso a pensar. Mi hijo no me conocía. Yo no conocía a mi hijo. Me propuse hacer algo para arreglar esa situación. créame que no fue fácil!
Qué trabajo me costó zafármele a mis amigos. que trabajo resistir la tentación! Pero al fin lo logré: llené mis horas muertas dedicándole tiempo a mis hijos. Ayudándoles en sus tareas.
He descubierto a mis hijos: no son solo mis hijos; son también dos personas maravillosas de las que me siento orgulloso.
Ysaben? Creo que también ellos están comenzando a sentirse un poco orgullosos de mí.
Ya no tengo horas muertas que llenar. Ahora lleno mi vida viviendo y no bebiendo.
00 no todo el mundo puede tomar no todo el mundo debe tomar y nosotros, en Seagrams creemos que todo el mundo debe saberlo!
Seagram de Costa Rica Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.