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LA REPUBLICA, Martes 20 de abril de 1976 Pasado, presente y futuro del cine La pignoración de vehículos La presunta futura obsolescencia del cine ILic. José Rafael Meza Araya No hay cine sin industria, sin un grupo humano vasto y experto en su quehacer. El cine es labor de equipo: directores, productores, guionistas, actores, camarógrafos, iluminadores, laboratoristas, músicos, electricistas, ingenieros, periodistas, etc. todos interactúan y la obra cinematográfica es consecuencia de la suma de sus fuerzas y esfuerzos.
El cine es un producto natural de la era industrial y sintetiza el punto de culminación a que ha llegado la cultura del hombre. En la época de la especialización y de la división del trabajo, surge esta forma de expresión que sólo puede existir si hay unidad de voluntades, integración Búsqueda del Hombre en el cine.
El cine es concreción de lo que nuestra época es, y un buen medio para su análisis consiste en intentar observarlo bajo su signo. medida que el hombre dod avanza, como concreción de ese avance, todo empieza a concebirse como suma de voluntades. y eso es el cine desde el punto de vista de su forja, pero lo es, también, desde el ángulo de su expresión estética. Las grandes obras de cine arte dan a conocer, en síntesis unitaria. su visión del hombre, y todo con los más inimaginables recursos que hacen de sus tesis, de sus mensajes, Raúl Torres Martinez expresiones culminantes, admirablemente válidas y singularmente totales.
El análisis global de De Fleur no repara en la función y, por lo tanto, en el destino que cabe al cine concebido Una predicción sociológica.
como expresión artística. Las formas no artísticas del El doctor Melvin de Fleur, de la Universidad de cine, las de nuevo divertimento. o sea, las formas Kentucky (1. plantea la presumible obsolescencia de la secundarias, las subespecies degeneradas del cine, por cinematografia en un futuro a lo mejor no tan distante. cierto que están destinadas a desaparecer.
La base de esta forma de pensar se encuentra en un El cine como industria y no como arte recurre y ha gultas principio que le sirve para explicar varios fenómenos recurrido a vastos subterfugios para mantener propósitos socioculturales relacionados con los medios de puramente pecuniarios. Las llamadas superproducciones comunicación masiva: la obsolescencla es la contrapar. a lo César de Mille ya fueron superadas. Al verlas de tida natural de la innovación.
nuevo, hoy, resultan insoportables. Lo mismo ocurrirá Esta hipótesis referente al séptimo arte se sustenta, con los terremotos, tiburones y torres incendiadas principalmente, en la notable pérdida de acogida actuales. Eso, en materia de contenido. Desde el ángulo popular que se observa en los Estados Unidos y en países técnico, han fracasado también los mercaderes del de Europa Occidental a partir, aproximadamente, del cine: olvidado está el cine en tercera dimensión en que se año 1950.
entregaban anteojos especiales al espectador; fracasado se encuentra el cinerama filmado con tres cámaras y Factor decisivo parece ser el auge y difusión masiva de proyectado en pantallas gigantescas. El dispositivo que mueve los asientos, el sonido espectacular son la televisión, unido a otros fenómenos derivados de la expresiones equivalentes a la charlatanería, al malabacomplejidad de la vida presente: resulta más fácil, es más cómodo permanecer en casa pasando el rato frente a rismo, al mico que saca papelitos de la suerte. No son un aparato de televisión en el cual se proyectan, más que formas de romper la rutina con la novedad de lo raro.
inclusive, algunos filmes que, aunque viejos, atenúan un tanto o un poco el aburrimiento y hacen olvidar el cansancio.
El cine de verdad, como la novela de verdad, como el arte de verdad no pueden desvincularse de una técnica determinada ni de LA TECNICA (con mayúsculas. pero Una tesis contraria leíamos en esta misma página de se trata del elemento técnico al servicio de una LA REPUBLICA. David Sterrit nos señalaba cómo concepción estética.
seria el cine del futuro. Fundamentando sus ideas en una No hay arte sin técnica, pero un despliegue inútil y un base más bien vinculada al progreso tecnológico, este vacuo dispendio técnico no va más allá de objetivos autor veía una proyección masificada e impredecible de puramente lucrativos. Una técnica no es arte por el la cinematografia, principalmente en la crónica Las hecho solo de disfrazarse de tal.
cintas futuras: ciencuenta pantallas, pero cámaras.
El propio De Fleur piensa que el cine, tal como hoy lo Plena vigencia del cine.
nos concebimos, será remplazado por una cinematografia Claro es que De Fleur no partió de esta concepción como simple técnica de comunicación masiva, como artística del cine. Por eso, su teoría de la obsolescencia industria.
tuvo como antecedentes elementos argumentales en absoluto desvinculados de las expresiones estéticas. Para él, el cine desaparecerá absorbido por la televisión, así Arte e Industria: doble faz del cine.
como ha ocurrido con todo lo que ha perdido vigencia, La crítica fundamental que podría plantearse a De del mismo modo que ya no utilizamos las plumas de ave Fleur es que su análisis, demasiado global y para escribir, los cuellos postizos, las manillas para sociologizante. se refiere al cine indiscriminadamente, poner en marcha los automóviles, las damas de sin hacer una distinción en el doble aspecto que lo compañía para vigilar las fiestas de la gente joven.
caracteriza: el ser, al mismo tiempo, una industria y un La literatura ha permanecido aunque han ido arte.
quedando en el camino y con justicia sus formas nefandas. La novela de hoy es lo que es el hombre de hoy.
Arnold Hauser llama, al último capítulo de su formidable Historia Social de la Literatura y del Arte. consideradas clásicas en el sentido azoriniano del El cine actual interpreta nuestra realidad y son Bajo el Signo del Cine. Después de haber establecido, término las obras del pasado que interpretan nuestra a través de la historia del arte, las vinculaciones sensibilidad de hoy.
existentes entre la vida social y el crear de los artistas a partir del paleolítico hasta llegar al impresionismo, no encuentra mejor idea que la de analizar el arte actual El cine seguirá existiendo. dentro del superior contexto del arte cinematográfico.
Claro que si, Variará como y cuanto el hombre varie.
Utilizará, en su beneficio, los aportes que la técnica y la ciencia y demás expresiones de la cultura puedan Cree que el presente siglo comienza en los años veinte otorgarle, en la medida en que a su servicio lo (así como el siglo diecinueve se inicia hacia 1830. época enriquezcan estéticamente.
en que aparece el cine sonoro. es éste, por cierto, surgir del cine. De eso y de algo más hablaremos en un Falsas casandras predijeron el fin del teatro a raíz del consecuencia, culminación presente de la historia del arte como reflejo de la historia del hombre. El arte tiene. ML. de Fleur: Teorías de la Comunicación próximo articulo. mania de totalidad. y ninguna otra expresión artistica Masiva. Edit. Paidós. Biblioteca Mundo Moderno.
que no sea el cine es manifestación tan compleja de esa Buenos Aires. 1972.
manla Hoy vuelvo de nuevo a criticar una mala práctica del Registro Público de la Propiedad de Vehículos; y lo hago sanamente, en forma constructiva.
El Registro Público de la Propiedad de Vehículos, no funciona conforme la ley se lo obliga, éste debió desde marzo de 1974, haber puesto a operar la Sección de Pignoración de Vehículos, sustituyendo al Registro de Prendas, que lo ha venido haciendo, con arreglo a Derecho.
No voy a continuar, sin dejar constancia, que este problema, no incumbe a don Armando Pérez y a doña Luzmilda Aguilar, personas bajo cuya dirección trabaja el Registro Público de la Propiedad de Vehículos. Este es un problema directo del Ministerio de Transportes, bajo cuya dirección funciona el Registro Público de la Propiedad de Vehículos, que para establecer la Sección de Pignoración de Vehículos, debe comenzar por acondicionar un local, procurarle el equipo necesario constituido por bienes muebles y por elemento humano que inicie labores de registro. Dentro de esta Sección se registrarán una serie de actos jurídicos de cierta envergadura, que consecuentemente serán la base de futuras acciones judiciales y por ello, su jefe debe ser un abogado.
El Ministerio de Transportes no ha mostrado interés de cumplir con la ley, hace que el Registro Público de la Propiedad de Vehículos funcione al margen de la Ley, impide el cumplimiento establecido por la Ley 5322 de 27 de agosto de 1973, la cual, en el artículo 22.
ordena establecer una Sección de Pignoración en este Registro, a efecto de controlar todas las obligaciones prendarias que se otorgan, garantizándose con vehículos.
Estas obligaciones son múltiples y diariamente se realizan, con lo que se impone aceptar que de la noche a la mañana no se va a improvisar este control; por lo que la ley dio meses para ello, con lo cual se imponía su funcionamiento, a partir de marzo de 1974.
La ley en referencia, derogó los artículos del Código de Comercio y sus reformas, así como las leyes que se opusieren, para que fuera en este Registro, en donde se registraran las prendas sobre vehículos.
Tuvo alcances dicha ley, como para ordenar que todas las prendas sobre vehículos, que estuvieren a la fecha inscritas en el Registro de Prendas, fueren inscritas nuevamente. exentas de derechos en la Sección de Pignoración que debía establecer el Registro Público de la Propiedad de Vehículos. Dentro de este precepto, igualmente deberían inscribirse ahí, lo referente a las inscripciones de renovación, prórroga, endoso o modificación, que debían hacerse sobre los contratos de prendas, una vez realizada la inscripción. Dejó al Registro de Prendas, la exclusividad para que realizara las cancelaciones, mientras no se hubiere hecho ninguna inscripción posterior, siempre que ésta se produzca dentro del año siguiente a la vigencia del artículo 138 de dicha ley, que legisló como disposición transitoria, a manera de acomodar la situación.
Es de todos conocido, que el Registro General de Prendas ha continuado con la función que le correspondía al Registro Público de la Propiedad de Vehículos, según las disposiciones legales que he mencionado; y me parece, que resulta contraproducente que este tipo de registro, se de en un lugar distinto, salvo que se haga, como es lo correcto hacerlo.
Es bastante criticable que el Poder Ejecutivo, a cuyo cargo está el estricto cumplimiento de la ley, se niegue a cumplir ésta, por medio del Ministerio de Transportes.
Para concluir, critico el desacierto del legislador de 1973, que ha pretendido hacer una doble sección del registro prendario, cuando hasta hoy, poco más o menos ha venido funcionando bien este control, que es un control doble, por cuanto el Registro General de Prendas comunica al Registro de Vehículos, las operaciones prendarias sobre vehículos, para controlarse en los asientos de inscripción de cada uno de los vehículos.
Creo que la Asamblea Legislativa está en la obligación, de levantar una información, para determinar, a qué se debe la negativa del Ministerio de Transportes, para cumplir con los preceptos de la ley en referencia, en atención a la crítica mia anterior, mencionada en el artículo que en esta misma sección se publicó el de los corrientes y en la actual.
Vease que se está dentro de la posibilidad, que el legislador de 1973 haya creado una ley que por su fondo resulte inoperante, además de que puede reñir con la institución prendaria, regulada por el Código de Comercio, con lo cual se le impone una derogatoria de esas normas, o modificarlas.
Ser gia nce pal JA Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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