6 LA REPUBLICA. Lunes 18 de febrero de 1980.
Estadio Fello Meza: Nervic buen fi 11 grandes DELIRIO DEL PUBLICO: Todo el fanatismo de los seguidores de ambos equipos se puso de manifiesto ayer en las graderias del Estadio Fello Meza. Miles de aficionados se presentaron portando banderas de todo tamaño con los colores de su equipo, vitoreando hasta enronquecer sobre todo cuando había goles.
En un ambiente de verdadera fiesta deportiva comenzó ayer la serie final por el título del fútbol mayor entre Car taginés ganador de la pentagonal y llerediano ganador de las cuatro primeras vueltas.
Desde muy temprano se llenó el estadio Fello Meza de público alegre y bullicioso que portaba centenares de banderas con los colores que identifican a esas entidades.
Prevalecian como era lógico las blanquiazules ya que la ciudad entera de Cartago se volcó sobre su estadio confiada en que su equipo representativo que tan bien ha venido jugando lograria la primera victoria dando un firme paso hacia el título de 97 Vitores en boca de hombres, niujeres y hasta niños festejaron el ingreso de los equipos al terreno de juego.
Se escuchó hasta el estallar de petardos como para poner todavía mas tensos los nervios de jugadores, directivos, cuerpo arbitral y público. las once y algunos minutos se puso la pelota en movimiento cuando el árbitro Ing. Luis Paulino Siles sono por primera vez su silbato.
Desde ese instante los visitantes se lanzaron a la carga con rápidos movimientos invadiendo el terreno defensivo brumoso y cuando solo habían transcurrido treinta segundos se abrió el marcador ante el asombro de aquella multitud en su gran mayori a local y la alegria desbordante de los seguidores florenses que en buena cantidad estaban en las gradas.
Ese gol tempranero se originó en una feliz combinación en la que intervinieron Nóbrega. Alvarez y Montero culminando con un valiente lanzamiento del arquero Chaves a pies de sus rivales que llegaron hasta pocos metros de su valla pero en el choque el balón quedó suelto y lo aprovechó el puntero izquierdo herediano Marvin Obando para anidar con remate a bocajarro.
Los locales no perdieron la cabeza por el contraste y comenzaron a trabajar arduamente tras el empate, Comenzaron a dominar las acciones a base de un fútbol mejor tejido Su medular integrada por Alvarado, Palacios y Morales carburó a la perfección y vinieron los intentos formales sobre la valla defendida ayer por Gladstone.
El empate estuvo por producirse varias veces pero la zagueria florense sacó y rechazó balones de gran peligro destacándose en especial Miguel Lacey.
En uno de esos lances de apuro resul lesionado el zaguero central Franco Benavides que tuvo que abandonar la cancha entrando a llenar dicha vacante Walter Rojas. a los treinta y seis minutos vino la primera igualada con un gol de cabeza de factura extraordinaria conseguido por Boina Solano, que rozandolo le cambió la dirección al cuero venciendo a Gladstone.
Un tanto de gran belleza que provocó el delirio del público por largos minutos.
COMPARSA LIMONENSE: Para alegrar más el ambiente hubo música tropical a cargo de un grupo limonense al que aquí vemos ofreciendo sus interpretaciones frente a la gradería de sombra. También estuvo poniendo su nota bulliciosa y alegre el conjunto de Cotico que se ha declarado apasionado seguidor del Cartaginés.
TOSHIBA como fue El uno por uno se mantuvo firme hasta el pito de cese pese a que los locales siguieron presionando hasta que se ordenó el descanso.
Vino la complementaria en la que decayó en parte el buen nivel té nico del cotejo, pero se mantuvo la misma fibra y entusiasmo Los minutos se fueron consumiendo y se llegó a los últimos diez por lo que ya la mayoria creia en el empate final Pero habia todavía mucho por verse primeramente a los rojiamarillos volver a tomar ventaja a los treinta y ocho minutos con otro gol de cabeza por cierto muy parecido al de Boina en el primer tiempo, pero esta vez de Yuba Paniagua aprovechando un servicio y una gran jugada del brasileño Nóbrega.
El tanto a esas alturas ya parecía decisivo y comenzó a retirarse con la cabeza agachada gran cantidad de aficionados locales.
Pero cuando ya solo restaban solo dos minutos para el pitazo final vino el segundo empate que convirtió el estadio RICARDO SALAZAR EN GRAN FORMA: Uno de los valores altos del equipo local fue el joven zaguero derecho Ricardo Salazar al que aquí vemos anulando a dos rivales del calibre de Macho Montero y Carlos Watson. La regularidad de su juego ha sido su característica durante toda la temporada. El muchacho tiene muchas cualidades.
DEPORTES Por LUIS CARTIN Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.