10 LA REPUBLICA, martes 11 de marzo de 1980 En sus formas siempre procuraba un ahorro de energía: el diseñador Colani con un automóvil concebido por él delante de alguno de los edificios del palacio barroco de Harkotten.
Un soñador encantador con ideas Schloss Harkotten (INP. Qué es lo que no habrá en París, amén de asistir a seminarios sobre aerodinámica Munsterland westfaliana. Convencido de que alli podrá diseñado ya. Desde helicópteros y cepillos de dientes, en la Sorbona, volvió al automóvil, ahora, sin embargo, desplegar plenamente sus actividades ha fijado su desde aviones y retretes, ropa interior femenino y vajilla, como diseñador de nuevas formas.
residencia en las islas británicas. De modo que dentro de camiones y coches para niños hasta relojes de pulsera y Finalmente y ya con fama como diseñ ador, volvió a poco renunciará a Harkotten donde en antiguas salas motocicletas! Sus frases se han hecho célebres. Nosotros presentar, una y otra vez, nuevos modelos de automóvil.
barrocas asemejan sus modernos diseños como cuerpos somos quienes más éxito tenemos en el continente. afirma Coches super rápidos con lineas eleganti simas. Su único extraños de otro mundo, donde delante de una gran con desenfado al hablar de su persona y su equipo. Las defecto era que nadie les queri a fabricar en serie. Hace escalinata principal aparcan sus modestos coches parproducciones de la competencia las ha llamado en alguna poco tiempo, sin embargo, parecia que iba a convertirse en ticulares (un Ferrari, un Bentley, dos Lincoln Continental y ocasión oligofrenia convertida en materia y a los realidad su sueño de la infancia. La Volkswagenwerk de un Lamborghini) y donde algo apartado descansa el manager de la industria les llama en ocasiones simplemente Wolfsburgo le pidió que desarrollase un sucesor para el célebre ocho con timonel (el bote con que los remeros cabrones cuando no les echa de su residencia. el Polo. Colani puso manos a la obra, buscando una linea alemanes debian de haber alcanzado la gloria olimpica. palacio de Harkotten en las proximidades Münster aerodinámica ideal para el más pequeño de los Volkswagen.
que fracaso puesto que sus asientos se rompieron durante el (República Federal de Alemania) que ha alquilado por Lo que siguió fue lo de siempre. Colani, que jamás se calla y estreno de la lancha. 100 marcos al mes.
que hasta a los directivos de grandes empresas suele decirles con claridad lo que piensa, se enfrentó con la Como ser totalmente feliz abandonará Colani Se trata de un loco trabajador o de un son ador en dirección técnica del consorcio VW. La consecuencia ha sido Alemania, no frustrado todavía por sus fracasos y concantador? Es harto difícil comprender al diseñador Luigi que su. sucesor del Polo está arrinconado en cualquier vencido de que las postrimerias del siglo serán su época.
Colani, hombre lleno de contradicciones y sorpresas. Sus garaje si no ha sido desguazado ya. Pero Colani dejaria de Con lo que quiere decir, más o menos, que entonces los consejos e ideas le valen al consorcio Thyssen anualmente ser quien es si prometiese cambiar la actitud.
ignorantes comprenderán el verdadero valor de las un millón de marcos por otra parte, sin embargo está con Lo que hace es exactamente todo lo contrario. Lleno de creaciones de Luigi Colani. Para entonces el diseñador.
siderado en los medio industriales como fatuo y presuntoso, rabia promete una suave guerra contra la Volkswagen que en la actualidad cuenta 2 años de edad, sera ya un una fama que él mismo ha hecho posible cuando aún como el dice.
setentón. Al preguntarle si entonces dejará de trabajar, necesitaba darse a conocer. Hoy, probablemente, dari a La mala empresa será castigada a su manera, ya que responde laconicamente: Pregúntenle a Herbert von mucho si pudiese cambiar su fama y mejorarla como sus pretende lanzar el modelo con algunas innovaciones y más Karajan si a esa edad dejará de hacer música.
disen os.
Quisiera ser reconocido como serio y hasta económico en Inglaterra.
como investigador.
Colani quiere permanecer en el futuro, de por si, más Stefan Klein En esta situación le ayudari a mucho, si pudiese presentar tiempo en la Gran Bretañ a que en su noble residencia en la éxitos, verdaderos triunfos de algunos de sus productos.
La realidad es distinta, sin embargo. Si prescindimos los lavabos, los WC, las bañ eras y los bidet que ha diseñado para una conocida empresa de instalaciones sanitarias en el Sarre, hay que registrar, ante todo, una serie de fracasos.
El cepillo de dientes optima. jamás ha sido introducido en una boca alemana. Ninguno de sus super aviones ha rebasado jamás la fase de modelo. En ocasiones provocaron sus creaciones la hilaridad e ironía cuando, por ejemplo, disen o un reloj con manecillas en forma de hoz. Los expertos en relojeria llamaron el artefacto de Colani un crucigrama de tiempo con una posibilidad de acierto del sesenta por ciento.
Más todavia le afecta, sin embargo, cuando sus ideas son objeto de abuso. Esto ocurrió con su sillón para secretarias.
El sillón parece una combinación de canguro y silla de dentista. Colani le había diseñado como aparato de asiento con un teclado protector para los tendones como puesto de trabajo integrado para una fábrica de muebles, con la supuesta promesa por parte de la dirección de la empresa de que el sillón seri a fabricado en serie. El resultado ha sido que, según Colani el artefacto se presenta desde hace diez an os en todas las ferias como novedad, sin que jamás haya sido fabricado. Colani sospecha que la fábrica jamás tuvo la intención de producirle en serie. Los astutos directivos de la empresa únicamente habrían tenido intención de aprovechar con el super sillón sólo el prestigio progresiste de Colani para poder vender con tanto mayor éxito sus miserables, criminales y vulgares sillas y sillitas.
Irónicamente dirá, en consecuencia, que somos los diesen adores con menos éxito del mundo. ironia que encubre cierta tristeza y desaliento.
Con igual dureza le afectan los fracasos en un campo del que dice que para él es aterradoramente indiferente para, poco después anunciar que al aludir a este tema le entra la furia. Aludimos al automóvil y, al mismo tiempo, a la mayor pasión de Colani, aunque casi siempre lo niegue.
Cuando todavía era un adolescente en Berlin, donde había nacido como hijo de una polaca y de un arquitecto zinematográfico suizo, transformó un viejo VW con piezas iejas de un Porsche en un automóvil más elegante, si bien io más rápido. Después de haber estudiado en la dividida excapital alemana escultura y pintura y después de haber, Un diseñador moderno en un puesto de trabajo barroco: Luigi Colani en el palacio de Harkotten subido a una motocł cleta BMW transformada por él.
rabajado con el constructor aeronáutico francés Dassault Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.