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Curré, Buenos Aires. Los pueblos indígenas de la zona sur rechazan la ejecución del proyecto hidroeléctrico Boruca, en Buenos Aires, Puntarenas, por considerar que afecta su desarrollo socioeconómico.
Los vecinos de las reservas de Altos de Comte y Puerto Jiménez (Golfito); Alto San Antonio y Abrojo de Montezuma (Corredores), y Coto Brus manifiestan que esa gigantesca obra limitará la tenencia de sus terrenos, principalmente.
El proyecto Boruca es impulsado por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), que hasta ahora ha realizado trabajos menores en la zona.
Los indígenas desfilaron el pasado 12 de octubre por la carretera Interamericana, con el objetivo de presionar para que las autoridades de dicha entidad escuchen sus argumentos.
Cambio radical
"Consideramos que todo proyecto que conlleva un cambio radical en nuestra forma de vida debe ser ampliamente discutido entre las partes. Sin embargo, este Gobierno se ha dedicado a imponer sus intereses político-económicos sobre el bienestar de las poblaciones más pobres del país", dijo el dirigente indígena Víctor Leiva Leiva.
El plan del ICE es construir una planta en Alto Boruca, sobre el río Térraba, que superará la potencia instalada de todas las existentes. El proyecto abarcará unas 25.000 hectáreas.
Faustino Mora Jiménez, líder de los indígenas, sostuvo que los pueblos se han organizado para unir sus esfuerzos en procura de asegurar el bienestar de su gente y la biodiversidad de la zona, que, consideran, es amenazada por el proyecto.
De acuerdo con las agrupaciones indígenas, la lucha no se debe solo al impacto que la represa producirá en las tierras indígenas, sino también en poblaciones aledañas.
Para Edith Rojas, presidenta del grupo de Mujeres Indígenas con Espíritu de Lucha, esta es una razón más para alzar las pancartas de protesta y darse el lugar que los indígenas merecen.
Un estudio del Museo Nacional, elaborado por Francisco Corrales Ulloa el año anterior, determinó que más de 200 sitios arqueológicos están ubicados en en la zona de impacto del proyecto Boruca. Se trató de conocer la versión de las autoridades del ICE, pero no fue posible obtener sus declaraciones.
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