p. 1

Abrir Noticia Guardar

Afectados en Sixaola se aferran a sus viviendas

Sixaola (Talamanca). Habitan en condiciones infrahumanas, pues no tienen agua potable, están rodeados de barro, sin ropa limpia y con lo mínimo de alimentación, pero aun así los pobladores de esta localidad se niegan a dejar las propiedades.
"No me voy para Bribri porque cuando regrese me voy a encontrar con que me robaron todos los 'calaches' (artículos del hogar) viejos", manifestó Rubí Edith Chinchilla Barrantes, una mujer que tiene 58 años de vivir en esta localidad.
María Jákamo Aguilar, dueña de la tienda Marianita, también se mantuvo firme. "La gente de la comisión (de emergencias) nos pide que salgamos, pero qué va a pasar con mi negocio. Soy viuda, pero voy a volver a levantar el negocio. Uno no se puede sentar a que le den las cosas", expresó.
Esa mujer, con 24 años de vivir en Sixaola, explicó que perdió unos ¢15 millones por daños en la mercadería.
Rodeado de incertidumbre
Aunque mucha gente está firme en que no sale, otras personas prefirieron abandonar momentáneamente el lugar para ir a un albergue en Bribri, cabecera del cantón de Talamanca, Limón.
El drama es muy diferente para cada una. Por ejemplo, para Óscar Sánchez su esposa, Jackeline Leiva, y sus hijas Kimberly y Keterine el futuro es incierto.
Esta familia, que dependía de un taller mecánico, se encontraba fuera de Sixaola cuando se produjo la inundación.
"Tengo 23 años de edad de los cuales 22 he vivido aquí. Todo lo he hecho con mi esfuerzo y no me quedó nada", narró Óscar.
La familia vivía ayer en el cajón de un camión de carga liviana que un amigo le prestó.
Al igual que ellos, los otros 200 damnificados de Sixaola permanecían en la parte alta de la carretera que termina en el puente sobre el río Sixaola, que enlaza a Costa Rica con Panamá.
Ese muro, de unos 200 metros de largo, sirvió para que se estacionaran allí unos 50 vehículos entre camiones, autobuses y automóviles.
Allí cocinan, duermen y hacen sus necesidades fisiológicas al aire libre.
Esta situación hace temer a las autoridades de salud que en cualquier momento puedan aparecer enfermedades, pero hasta el momento no se ha presentado ningún caso.

  • POR Carlos Arguedas C. / carguedasc@nacion.com POR | Carlos Arguedasy Marvin Carvajal
  • Nacional
Notas

Este documento no posee notas.