Por Daniel Zamora
Nueva York (EEUU), 1 sep (EFE).- El veterano Andre Aggasi volvió a convertirse una vez más en el símbolo ganador e indiscutible del tenis norteamericano y a sus 35 años superó al saque demoledor del croata Ivo Karlovic para conseguir su pase a la tercera ronda del Abierto de Estados Unidos.
El triunfo de Agassi en tres sets decididos en el desempate y el de su compatriota Robby Ginepri frente al luxemburgués Gilles Muller, el verdugo de Andy Roddick, fueron junto con la exhibición de Lindsay Davenport lo más destacado de la cuarta jornada del último torneo de Grand Slam.
Agassi dio toda una lección de lo que significan 20 años de experiencia en el Abierto para poder superar a un jugador de 2,98 metros de alto, que sólo tiene una arma, su saque terrorífico, con el que puso al ex campeón del Abierto al borde del abismo como le sucedió a Roddick.
Pero Agassi, con ocho títulos de Grand Slam, a diferencia de lo que pasó con Roddick, superó a un rival inferior en todos aspectos técnicos del deporte del tenis y también los problemas de espalda que viene arrastrando desde hace meses.
Al final Agassi superó todos los obstáculos, incluidos 30 "aces" y ante el delirio de los aficionados que llegaron para verlo en la pista central Arthur Ashe ganó el partido por 7-6 (7-4), 7-6 (7-5) y 7-6 (7-4)
"Ha sido un partido muy difícil porque es imposible romperle el saque", declaró Agassi. "Creo que tuve mucha suerte de hacerlo en el desempate".
Agassi dijo que no quería ayudar a Karlovic a hacer historia con otro derrota sorpresa como lo que hizo con el australiano Lleyton Hewitt al que eliminó en la primera ronda de Wimbledon 2003 al que había llegado para defender el título.
"La clave del partido estuvo en la concentración que mantuve siempre porque un descuido te podía costar la derrota", destacó Agassi, que nunca se había enfrentado a Karlovic.
Más fácil lo tuvo su compatriota Ginepri, que se enfrentó a su amigo y compañero de dobles, Muller, el verdugo de Roddick, para ganarlo fácil por 6-1, 6-1 y 6-4, haciendo que el jugador luxemburgués fuese sólo "rey" por un día y volviese a su condición de "Crazy One", como el mismo se define.
El resto de la competición masculina dejo los triunfos claros del argentino Guillermo Coria, octavo cabeza de serie, que se ganó 6-2, 6-3 y 6-2 al estadounidense Vincent Spadea, mientras que el español Tommy Robredo (19), derrotó 5-7, 7-6 (7-3), 6-3 y 6-2 al brasileño Gustavo Kuerten.
El joven francés Richard Gasquet, decimotercera cabeza de serie, también se unió a la lista de los ganadores de la jornada y pasó a la tercera ronda después de ganar por 6-1, 3-6, 6-3, 3-2 y retirada al italiano Giorgio Galimberti, de 29 años, que lesionó en la espalda.
La sorpresa en la competición masculina la dio el suizo Stanislas Wawrinka que derrotó 3-6, 6-4, 6-3, 6-7 (4-7) y 6-1 al argentino Mariano Puerta, décimo cabeza de serie.
"El partido pudo ser para cualquiera de los dos, pero al final no me respondieron las piernas y el hizo los puntos decisivos que le dieron el triunfo", admitió Puerta, que dejó al tenis argentino con sólo tres representantes de los nueve que comenzaron el torneo.
Dentro de la competición femenina, Davenport confirmó su condición de gran aspirante al título y como la número uno del mundo, necesitó menos de una hora para darle paliza de 6-1 y 6-1 a la jovencita francesa Pauline Parmentier, la número 253 del mundo.
"Tengo que reconocer que no he jugado bien porque el viento me perjudicó, pero también me sentí más segura que el primer partido", declaró Davenport, ganadora del título del Abierto en 1998.
Davenport tendrá como rival en la tercera ronda a la española Anabel Medina Garrigues (32), que ganó 6-4 y 7-5 a la china Tian Tian Sun y se quedó con la única representante del tenis de su país de las siete que comenzaron el torneo.
La francesa Amelie Mauresmo, tercera cabeza de serie, también hizo valer su experiencia de siete participaciones en el Abierto, y dominó por completo a la adolescente búlgara de 16 minutos Sesil Karatantcheva a la que ganó por 6-0 y 6-1.
Mauresmo se enfrentará en tercera ronda a la alemana Anne-Lena Groenefeld (31) que venció 3-6, 6-3 y 6-4 a la francesa Virginie Razzano.
La belga Justine Henin-Hardenne, séptima cabeza de serie, también reivindicó su condición de favorita al título con el triunfo por 6-3 y 6-4 frente a la española María Sánchez Lorenzo.
Henin-Hardenne, actual campeona de Roland Garros, tendrá como rival en la tercera ronda a la surcoreana Yoon Jeong Cho, que dio la única sorpresa de la jornada en la competición femenina al ganar 6-4 y 6-3 a la argentina Gisela Dulko, vigésimo séptima cabeza de serie.
El resto de las cabezas de serie, incluida la rusa Elena Dementiva (6), que también fue verdugo de la argentina Mariana Díaz-Oliva a la que ganó por 7-5 y 6-1.EFE
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