En una acera de la comunidad desamparadeña de Higuito, Janier Acevedo y su compañero Sergio Luis Henao recibían palabras de aliento de rivales y aficionados.
Era como ir a dar el pésame. Los colombianos acababan de perder la Vuelta de Higuito, tras fallar en la última etapa, y se quedaron a solo siete segundos del título.
Acevedo reconoció los méritos de Raabe, pero también indicó que les pesó mucho el trabajo hecho en las etapas anteriores. "Veníamos agotados por la responsabilidad de sostener el liderato desde el primer día", afirmó mientras Henao sollozaba en silencio a su lado.
Colombia vino con un equipo de ciclistas jóvenes, todos de categoría sub 23 de la formación Orgullo Paisa. Aquí corrieron con el patrocinio de Cloro Los Conejos.
Acevedo añadió que los perjudicó no conocer bien el peligroso descenso por las localidades de La Lucha, Frailes y San Cristóbal.
“No podíamos tomar las curvas tan rápido. En todo caso, espero que hayamos dejado una buena imagen”, indicó el suramericano.
Jesús Piedrahita, gerente del equipo cafetero, expresó que tuvieron problemas mecánicos que minaron la fuerza del grupo. “El líder quedó solo y ya era muy difícil ganar. No alcanzamos el triunfo, pero ojalá en lo deportivo y lo humano hayamos dejado la mejor sensación”, manifestó.
A la hora exacta. El ciclismo también es un asunto de paciencia. Albin Brenes, entrenador de Pizza Hut, tuvo que esperar casi una semana para ordenar el ataque definitivo en Higuito.
“Colombia puso el ritmo estos días y ya estaban agotados. Por eso los atacamos con varios ciclistas, y cuando Raabe coronó en La Cangreja vi que estaba fuerte”, comentó el técnico.
Por su parte, el rutero vencedor comentó que los colombianos intentaron atacar al inicio del ascenso, en un pulso del cual salieron después muy damnificados.
“Trataron de probar a Iván (Amador), pero él venía bien y luego se escapó. En los kilómetros finales venía concentrado en hacer un buen cierre, no sabía que le hubiera bajado el tiempo”, dijo.