Acompañe a un grupo de jóvenes inuit que escapan de su comunidad de Alaska para vivir diferentes experiencias fuera de su "illuvut" por primera vez.
El nuevo reality del canal TLC, Escape de Alaska , muestra cómo estos esquimales –varios de ellos recién salidos de la adolescencia – deben ingeniárselas para abandonar sus frías tierras, pues irse a “aventurar” es una razón demasiado terrenal como para que sea aceptada por sus mayores.
Por lo mismo, los aventureros deben ocultar sus verdaderas intenciones y dicen en su comunidad que se embarcarán en una misión cultural y religiosa… aunque así cometen la más imperdonable de las traiciones.
Tras exitosos proyectos como Mundo Amish , Hermanas gitanas y el cancelado Llegó Honey Boo Boo , la señal sigue paso a paso el increíble cambio de vida al que se exponen estos muchachos al dejar Alaska y cambiarlo nada menos que por el sol de San Diego, California.
A lo largo de seis episodios, la nueva serie acompañará el emotivo viaje de Mary, Frank, Tamara, Qituvituaq y Nuala, mientras se embarcan en su “escape” de alto riesgo desde heladas tierras para explorar el mundo más allá de sus aldeas y pequeños pueblos.
Si bien todos ellos aman a sus familias y se sienten orgullosos de su herencia cultural, están más que ansiosos por vivir nuevas aventuras en la gran ciudad.
Sin embargo, en Alaska, en California y en el resto del mundo la vida suele ser complicada, más si se trata de jóvenes inexpertos y pueblerinos, y ahora ellos deben asumir el shock de sus nuevos roles y, a la vez, sostener la historia diferente que cada quien inventó ante los suyos. Desde un falso papel de cine hasta una convención de nativos americanos en Las Vegas, todo cuento es válido si les da la posibilidad de cumplir su sueño.
Lo cierto es que la producción va mucho más allá de mostrar el lado hedonista de esta aventura, pues también queda en evidencia que las cosas en Anchorache están cuesta arriba para la población y las oportunidades para las nuevas generaciones son casi nulas.
De hecho, el reality mostrará la forma tan artesanal de vida que llevan los muchachos y sus familias, que además deben lidiar con el inhóspito clima y otras condiciones adversas. Sin embargo, como se verá, el corazón siempre tiende a buscar el hogar.