Abrir Noticia Guardar

Ejemplo y enseñanza

Alguna vez leí una frase de Omar Dengo que decía: "...hacerme consciente de lo que me creo, me hace creador"; esa frase me ha acompañado en la vida y la recuerdo cada vez que debo agradecer a las personas que han contribuido a mi formación.
Este es el caso de la doctora Iveth García, quien ahora se acoge a su merecida jubilación, después de muchos años de trabajar en el Servicio de Oncología del Hospital Nacional de Niños. La doctora García ha sido un verdadero ejemplo de dedicación, abnegación, rectitud personal y profesional; su contribución a la formación de las nuevas generaciones de pediatras ha ido más allá de la simple academia: nos enseñó responsabilidad, humanismo, compasión, positividad ante la adversidad. Siempre tuvo tiempo, dentro de su apretada agenda laboral, para escuchar nuestras dudas y problemas, incluso personales, y darnos un valioso consejo fruto de su experiencia y de su gran sensibilidad humana.
La partida de la doctora García deja un gran vacío en el hospital y en nuestros corazones, pero durante el tiempo que afortunadamente compartimos fue posible aprender de ella muchas cosas buenas, que nos acompañarán siempre. Sus enseñanzas y su actitud ejemplar seguirán vigentes en nosotros y en el hospital.
(*) Médica

  • POR María L. Ávila A. (*)
  • Opinión
Omar Dengo