Las parejas que no pueden tener hijos debido a la esterilidad masculina recurrirían antes a la clonación que a un donante de semen, reveló ayer elcongreso sobre "Clonación humana y terapéutica" organizado por la Universidad La Sapienza y la Sociedad Italiana de Medicina Reproductiva.
Según el informe, presentado por el ginecólogo italiano Severino Antinori en este congreso celebrado en Roma, si la clonación humana fuese legal en Italia, sería la opción que elegirían la mayoría de parejas en esta situación, que la consideran un acto "no voluntario" debido a la ausencia de células germinales en el hombre.
"Así opina el 70 por ciento de las 300 parejas que atraviesan por esta situación que hemos entrevistado, y la mayoría de ellas también se decantaron por transmitir al niño el patrimonio genético del padre", explicó el experto.
El 30 por ciento restante "eligió el semen del donante tras reconocer que le da miedo recurrir a la clonación", aunque esta es la "última frontera para dar al hombre la posibilidad de transmitir sus genes y convertirse en padre", añadió.
"Esa es la razón por la que declaramos su finalidad terapéutica", afirmó Antinori, quien precisó que con la clonación "no se obtienen niños fotocopia, sino individuos con personalidad propia".
El ginecólogo reveló también que en las parejas en las que la causa de la esterilidad está en la mujer, solo el 2 por ciento se ha declarado favorable a la clonación, mientras que el 98 por ciento prefiere usar los espermatozoides del varón aunque sea apelando a cualquier otra técnica.
Sobre los riesgos de la clonación, Antinori reconoció que no pueden descartarse totalmente las malformaciones genéticas, pero dijo que es un peligro presente también en las otras técnicas de reproducción asistida.
El especialista también se refirió a los riesgos de aborto asociados a esta técnica, denunciados por algunos investigadores y teólogos, e insistió en que "alguien, por motivos que no comprendemos, quiere hacernos creer que este riesgo aumenta con la clonación".