Roberto Alfaro Woodbridge, director de Aviación Civil, dijo estar preocupado por las coincidencias que mantienen entre sí los accidentes de SANSA y adelantó que investigan si la compañía violó alguna norma de seguridad en el caso del impacto contra el volcán Arenal.
Este es un resumen de una entrevista con La Nación :
–¿Por qué los vuelos internacionales que llegan aquí no tienen los mismos problemas que afrontan las avionetas?
–No soy Dios para contestarle esa pregunta; los aviones se accidentan porque operan.
–¿Podría ser por la altura de vuelo y los sistemas de navegación que unos y otros utilizan?
–Hay dos maneras de volar: una es por instrumentos y la otra es el vuelo visual.
"En vuelo visual, la responsabilidad de mantener la separación con el terreno es totalmente del piloto. En vuelo por instrumentos hay procedimientos y aerovías que deben recorrerse a alturas mínimas".
–A SANSA le han ocurrido tres accidentes sucesivos por razones muy similares. ¿Representa un patrón de conducta?
–No puedo justificar a la empresa, pero los accidentes hay que verlos en el contexto de la cantidad de vuelos que una empresa realiza.
"Estos accidentes son preocupantes para la Dirección de Aviación Civil, y por eso los estamos investigando. Luego del accidente del Arenal se hicieron observaciones a SANSA sobre sus procedimientos".
–Desde 1999 la OACI establece que en aviones de más de 5.700 kilos se debe exigir un sistema de aviso de proximidad de terreno (GPWS). ¿Por qué Aviación Civil no lo ha exigido en Costa Rica?
–Esto es una solicitud de la OACI, pero no quiere decir que hay que establecerlo ya. En nuestro reglamento el GPWS debe estar instalado antes del año 2004.
"La norma es clara, yo no puedo agarrar del cuello a los operadores y obligarlos a que inviertan en un equipo que será obligatorio en el 2004".
–La ley garantiza la seguridad de los pasajeros...
–No puedo cuestionar la ley; digo que hemos recuperado la categoría "uno" en seguridad, bajado la tasa de accidentes en un 57 por ciento y la cantidad de muertes en un 95 por ciento.
–¿Alguna investigación se realiza para establecer responsabilidades legales sobre estas muertes?
–Se estudia si hubo negligencia del piloto o la compañía.
"Tras el accidente de SANSA contra el volcán Arenal, se creo un órgano director que estudia si se violó alguna reglamentación".