Ciudad Quesada. Como si fuera su primera vez, Bernarda Vázquez Méndez –la primera mujer en ejercer el derecho al sufragio en nuestro país– votó con el mismo entusiasmo que hace 52 años, pero criticó el nuevo sistema de votación.
"Desde que voté por primera vez lo hice manchándome el dedo y no estoy de acuerdo con cambiar esas tradiciones. Marcar con lapicero no es lo mismo y quisiera morir con la tradición de mancharse el dedo", dijo esta ciudadana de 82 años, luego de votar en la mesa 3.269 en La Tigra de San Carlos.
Doña Bernarda ejerció su derecho por primera vez en 1950 al participar en un plebiscito en el que San Ramón y San Carlos se disputaban la pertenencia de La Tigra y La Fortuna.
Esta vez la ayudó a emitir el sufragio su sobrina Margarita Rojas.
"Espero volver a votar dentro de cuatro años y pido a todas las mujeres que salgan a votar. Es un deber, una obligación de las mujeres para hacerse sentir en política y así tener argumentos para exigir participación", recalcó esta partidaria socialcristiana.
Bernarda reside en una humilde casita que se le construyó por medio de un bono de vivienda, en San José de La Tigra. Ahí pasa sus días en compañía de su hermano Francisco, de 90 años, con una pensión estatal de ¢10.000 mensuales.