Impuesto del 0,1 por ciento sobre el patrimonio de las sociedades jurídicas comerciales.
Sobretasas a las rentas de las empresas, a los salarios, a los rendimientos de los títulos valores y a las remesas al exterior.
Aumento de 50 por ciento en tasa a propiedad de vehículos de valor igual o superior a ¢7 millones.
Impuesto mensual escalonado de ¢120.000, ¢240.000 y ¢320.000 por mesa de juego en casinos y ¢100.000 por máquinas tragamonedas.
Tributo escalonado anual a las empresas de apuestas electrónicas (¢10 millones a las pequeñas, ¢16 millones a las medianas y ¢24 millones a las grandes).
Alza de $125.000 a $300.000 en tributo anual a bancos off shore.
Incremento del 100 por ciento en arancel de certificaciones que emite el Registro Público.
Tributo de ¢5 por unidad de consumo a las bebidas alcohólicas, importadas o producidas en el país.
Aumento del impuesto selectivo de consumo a los cigarrillos de entre ¢25 y ¢35 por cajetilla.
Fuente: Ley de contingencia fiscal.