Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
Buenas compras. Los gerentes de tiendas establecidas que venden prendas nuevas muy baratas afirman que la base de todo están en hacer buenas compras. Es muy sencillo: un comprador mayorista adquirió un lote en Panamá, Italia o China y no lo puede colocar. Acudimos a él y le ofrecemos precio y cómo tiene que salir rápido de la mercancía la vende.
¿Pérdida? No sabemos si el mayorista pierde o no. Eso no nos interesa, aquí lo importante es lograr el precio más bajo y trasladar el resultado al consumidor para poder competir.
Ofertas. Hay distribuidores locales que llegan a vender un producto, pero en las cadenas de supermercados los tienen en una oferta a un precio menor que el que nos ofrecen. Entonces ¿qué es más rentable: aprovechar las oportunidades y ofertas en la calle o comprar al distribuidor?
Costoso. Las textileras nacionales desde los años 80 no pueden competir. La mano de obra es muy cara, esa es la realidad. En China la producción a gran escala baja costos.
Desempleo. Cifras de la Caja Costarricense del Seguro Social indican que en 1990 habían 48 empresas de hilado con 3.726 empleados. En el 2000 habían 28 con 1.849 trabajadores. Así se repite en todos los rubros textiles.
Este documento no posee notas.