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Gabelo vende legumbres vestido todo de verde

Acompaña su venta con boleros y 'rock'

Heredia. "Vio mi traje... lindo ¿verdad? Viera muchos me lo han querido copiar, pero yo no lo aflojo", dijo -con un orgullo que ensancha su pecho- Gabelo González Espinoza.
Entre los muchos personajes que destacan en el parque Central de Heredia, él sobresale con su caja de cartón repleta de frescos vegetales, pues siempre está muy bien ataviado con un traje entero verde perico.
"No hay casualidades, soy verde por dentro y por fuera y votaré por el próximo presidente, (Óscar) Arias", manifestó, convencido.
Cuando se le planteó la posibilidad de que donara su característico traje a su líder político, Gabelo González expresó: "Viera que yo lo he pensado, pero ¿usted cree que le haga gracia? Es que con tantos que él debe tener, seguro ya tiene uno de este color, es lo más seguro, no ve que es del verde del partido. Voy a pensarlo".
Su vida, sin duda, es la huerta que tiene en los alrededores de su vivienda, en San Pablo de Heredia. Sin embargo, la venta de las legumbres la hace en el centro de la ciudad de Heredia.
Pero su mayor debilidad son los boleros y su cantante preferido es Leo Marini.
" Lo leyó, ta ta tan, lo leyó, ta ta tan, la gitana looooo leyó" , tararea a todo pulmón para atraer a sus clientes, mientras recorre las aceras con sus inseparables tenis blancas.
Pero, de vez en cuando, deja el bolero por algo más movido.
"También le hago al rock , es que también le hago un poco al inglés. Ponga cuidado: "Siru leiguer lilileirer... Asey ¡hey! rock and roll, asey ¡hey! rock and roll ", repetía con un sonoro timbre que le impedía pasar desapercibido.
Con su canto aleja su soledad, pues a sus 64 años todavía fanfarronea de su soltería y su única compañía, su madre, falleció hace siete años.
"Tengo que seguir trabajando, porque si no no como porque uno no se puede pensionar ¿o se puede hacer eso? ¿Yo podría pensionarme o tengo que seguir en esto para siempre?... ¿será que podré?", repetía mientras tomaba su camino para tratar de vender las ramitas de culantro coyote, lechuga y ayotes tiernos.
De pronto, sin más explicación, Gabelo, cargó su caja de legumbres al hombro y se abrió paso entre la gente del parque. "Gracias, pero es que si me quedo más no vendo nada".

  • POR Emilia Mora
  • Nacional
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