Las torturas y abusos cometidos por soldados estadounidenses contra prisioneros iraquíes fueron presentados ayer por el Pentágono como casos aislados que serán castigados.
Son "casos aislados" que serán castigados, afirmó el jefe del Estado Mayor Conjunto, Richard Myers.
“Estoy conmovido por estas acciones aisladas (...) No es así como el ejército estadounidense actúa o debería actuar”, dijo el general.
La general Janis Karpinski, encargada de las prisiones en Iraq y suspendida de sus funciones, dijo que el cuartel de alta seguridad de la prisión, donde se dieron las torturas, está bajo control de inteligencia militar.
En una entrevista telefónica con The New York Times , la general declaró que la inteligencia militar podría haber alentado esas violaciones de los derechos de los detenidos y no los reservistas a sus órdenes.