–Don Rogelio, la encuesta de Unimer lo menciona a usted entre las tres personas con alguna preferencia. ¿Cómo recibe eso?
–Yo agradezco mucho a toda la gente que me menciona de manera espontánea.
–¿A qué cree que responde esa mención?
–Me parece que ese sector y en otras encuestas es igual. Los consultados piensan que yo puedo tener liderazgo alrededor de un movimiento.
–¿Y va a asumir esa bandera?
–Yo no he tomado la decisión ni es el tiempo para eso. Estamos a más de 500 días de las elecciones.
–¿Veo que lleva bien esa cuenta?
–Sí, llevo bien la cuenta.
–¿Cuál será el momento?
–A principios del próximo año.
–¿Está madurando la decisión, don Rogelio?
–Estoy tan concentrado en el ministerio que todavía no la he tomado en cuenta.
–¿Qué opinión tiene de las posibilidades de Ricardo Toledo y Luis Fishman?
–Don Ricardo (Toledo) me dijo que no tiene interés, el dijo que renunciaba a cualquier cosa. Y don Luis (Fishman) igual; él tendría que tomar una decisión antes de fin de año, porque legalmente es el vicepresidente.
–¿Cómo los ve a ellos con miras a una posible candidatura?
–Los dos tienen liderazgo. Yo tengo buen aprecio por ambos.
–Entonces, ¿usted no descarta optar por la candidatura?
–No, no lo descarto.
–¿Sacrificaría su carrera pública?
–Ya llevo bastante tiempo en el ministerio, en enero cumplo cinco años.
–¿Tomará la decisión solo?
–Con mi familia y amigos más cercanos.
–¿Con don Rafael Ángel Calderón?
–Sí, y con Rolando Laclé, que son mis grandes amigos.
–¿Y con don Abel?
–Obviamente que también.