El presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, vino al país para presentar condolencias por las vidas que se perdieron durante el intento de asalto y posterior secuestro en la agencia del Banco Nacional en Monteverde, Puntarenas.
El martes de la semana pasada, tres personas de origen nicaragüense intentaron un robo en esa oficina, en Santa Elena.
Durante este hecho perdieron la vida nueve personas, entre ellas dos de los asaltantes y un policía.
"Hay malos hijos de todos los países y este caso involucra a algunos nicaragüenses", manifestó el mandatario Bolaños.
Agregó que además de presentarle las condolencias a su contraparte costarricense, Abel Pacheco, también ofreció "prestar toda la colaboración que se pueda cuando haya casos similares".
Bolaños recordó que los presidente centroamericanos suscribieron un convenio que permite agilizar la captura de delincuentes en fuga en cualquiera de los países de la región.
Pacheco se mostró agradecido con Bolaños y enfatizó que lo que pasó en Monteverde "no es culpa de los hermanos nicaragüenses".