Costa Rica abogó por el diálogo con la Unión Europea (UE), para resolver el conflicto por el arancel bananero que se cobrará en ese mercado a la fruta latinoamericana y evitar un nuevo llamado al panel de árbitros.
El ministro de Comercio Exterior, Manuel González, afirmó ayer que los exportadores del continente están abiertos a cualquier propuesta, aunque aclaró que si la reducción del impuesto es a apenas 225 euros por tonelada (el original fue 230 euros) lógicamente se cerrará la puerta al diálogo.
La UE posiblemente propondrá el nuevo arancel bananero el 9 de setiembre, según esperan los latinoamericanos.
Los productores del continente esperan con ansias la nueva propuesta, luego de que un panel de árbitros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) concluyera que la primera oferta de 230 euros por tonelada métrica no permite mantener el actual nivel de ventas a ese mercado.
Las naciones afectadas pretenden una tarifa máxima de 75 euros por tonelada.
El actual litigio bananero con Europa se origina en otro fallo de la OMC, el cual condenó el actual sistema de cuotas, licencias y un arancel de 75 euros por tonelada.
Los europeos decidieron sustituir el sistema por otro con un impuesto único, para cumplir con el fallo. Por eso propusieron inicialmente gravar con los 230 euros la tonelada, lo cual llevó a los latinoamericanos a poner una nueva denuncia en la OMC.
El 1.° de agosto pasado un grupo de tres expertos obligó a un nuevo período de consultas.
Vacaciones. González explicó ayer que los europeos se comprometieron a proponer un nuevo monto de arancel en los primeros días de setiembre, pues durante agosto son las vacaciones de verano.
Los exportadores tienen claro que la iniciativa la deben tomar ahora ellos, según se interpreta del fallo de los árbitros.
Europa debe presentar un nivel de impuesto que satisfaga a los latinoamericanos, que proteja a la producción de sus territorios (Las Canarias, Creta) y que, además, mantenga su ayuda a los países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP), recordó el ministro González.
Los países latinoamericanos enviaron una carta, la semana pasada, a los tres árbitros del conflicto, para que se respete el plazo de un mes en su deliberación, si es necesario llamarlos de nuevo.
La acción responde al interés europeo de apurar el trámite para que la nueva medida rija el 1.! de enero del 2006.