Ciudad Neily, Corredores. El Tribunal de Juicio de la Zona Sur, con sede en esta ciudad, absolvió ayer a un individuo de apellido Alvarado del delito de tráfico de drogas que le atribuyó el Ministerio Público.
El fallo se dictó después de que los jueces constataron que no se había aportado prueba directa para involucrar al imputado con el decomiso de 410 kilos de cocaína, en mayo del 2004, por la Policía de Control de Drogas (PCD) en Caracol de La Vaca, cantón puntarenense de Corredores.
El Tribunal estimó que aunque un informante alertó a la PCD sobre el camión donde estaba la droga oculta, en el debate no se demostró que el vehículo perteneciera a Alvarado.
Otro aspecto que pesó en el fallo fue una controversia sobre quién tenía las llaves del camión.
Lo anterior porque un testigo dijo en el debate que las llaves del automotor las tenía Alvarado y que fueron entregadas a un juez penal que participó de la diligencia.
Sin embargo, los miembros del Tribunal le preguntaron al juez sobre lo sucedido y este alegó que a él nunca le dieron tales llaves.
A favor. En las conclusiones, el fiscal Gustavo Gillen solicitó la absolución ya que no se pudo establecer el nexo entre el detenido y el vehículo que estaba estacionado a 100 metros de la vivienda de Alvarado.
Juan Carlos Arce, defensor de Alvarado, manifestó al salir del debate que su representado no tenía nada que ver con la droga.
Agregó que lo querían involucrar con el trasiego, pero afirmó que quedó demostrado que Alvarado nunca entregó las llaves del camión a nadie, como se dijo.
El juez Juan Carlos Peralta afirmó que al camión lo vieron circulan por las calles de la localidad durante varios días, pero nunca se especificó quién lo conducía.